CRÍTICAS POR LA FALTA DE DETALLES

El PP se abre a apoyar el plan de la guerra de Sánchez pero insiste en bajar impuestos

En el PP reconocen "máxima disposición" para apoyar el paquete de medidas y no vinculan "a nada concreto" su apoyo

Insisten en el acuerdo de presidentes de La Palma y Feijóo tilda de "incumplimiento" que no conste lo pactado

Las críticas por falta de concreción se extienden a todos los grupos políticos

La coordinadora general del PP, Cuca Gamarra.

La coordinadora general del PP, Cuca Gamarra. / MARTA FERNÁNDEZ JARA.

El Gobierno apela a la "responsabilidad" de todos los grupos políticos del Congreso para que apoyen el plan de respuesta a la guerra de Ucrania que el Consejo de Ministros aprobará este martes con medidas extraordinarias que permitan a empresas y familias afrontar las consecuencias del conflicto y la brutal escalada de precios. Pedro Sánchez ya ha desvelado una de las grandes iniciativas del Ejecutivo, extender la bonificación de 20 céntimos por litro de combustible a todos los conductores (más allá de los transportistas). El principal partido de la oposición sigue sin desvelar el sentido de voto del real decreto ley que el Gobierno, aunque muestra "máxima disposición" para poder apoyarlo.

Eso sí, los populares no escatiman en reproches por la falta de detalle y transparencia del Gobierno. "Ni siquiera hemos visto el borrador completo", afirman en la dirección provisional del PP, sin esconder el enojo que también sienten otros grupos, socios habituales del Ejecutivo.

La negociación entre los dos socios de coalición se prolongó hasta la mañana del mismo lunes, obligando a dilatar los contactos entre el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y el resto de partidos después de comprometerse a una nueva ronda de llamadas durante el fin de semana. Las conversaciones de PSOE y Unidas Podemos se enquistaron en torno a dos decisiones: la protección del empleo, con medidas de flexibilidad interna como los ERTE para evitar despidos, y la revisión de los alquileres durante los próximos tres meses, que tendrán un límite del 2%.

La falta de luz verde hizo que Bolaños comenzara a hablar con los partidos a última hora de la noche del domingo y a lo largo de la mañana del lunes para enfado de la mayoría, que siguen criticando al Gobierno por la falta de concreción total.

El PP insiste en que “estará a la altura de las circunstancias”. La portavoz del grupo parlamentario y coordinadora general, Cuca Gamarra, explicó este lunes que Bolaños le hizo saber “algunas medidas” en su llamada, pero sin apenas detalles. El malestar lleva siendo evidente dentro del PP en los últimos días, pero la realidad es que siguen abiertos a apoyar el plan del Ejecutivo.

Aunque no se pronunciarán “hasta conocer la letra pequeña", los populares reconocen que “no condicionan su apoyo a nada en concreto” (tampoco a la bajada de impuestos, que hasta ahora había sido la principal exigencia del primer partido de la oposición). También el presidente de la Xunta y futuro líder nacional, Alberto Núñez Feijóo, intervino desde Galicia para mostrar ese enfado ayer, endureciendo incluso el tono visto en Madrid: "La información que tenemos es incompleta y confusa. La bajada de impuestos es el primer incumplimiento que podemos constatar, y desde el punto de vista energético, la realidad es que el Gobierno no ha obtenido el plácet del Consejo Europeo". Sobre la posición del grupo, reconoció que "habrá que esperar a que nos explique lo que va a aprobar".

Los populares aseguran que “muchas medidas llegan tarde” para la mayoría de sectores afectados y consideran que el real decreto ley debe incorporar bajadas de impuestos y ayudas directas. Sánchez aseguró que el plan contará con 6.000 millones de euros destinados a ese objetivo, pero en el PP no están tranquilos con el compromiso. Sobre todo, porque entienden que el acuerdo de los presidentes autonómicos en La Palma, con Feijóo liderando la rebaja fiscal, no consta en el borrador. Al menos, hasta donde ellos esperan.

Ya de la reunión de hace días con Bolaños y las tres vicepresidentas el PP ya salió con la idea de que el objetivo del Gobierno era esperar a que el Consejo Europeo tomara medidas antes de desgranar las nacionales en España. Todo ello, explicaban fuentes populares, para hacer “un esfuerzo fiscal mínimo”. El hecho de que Sánchez prorrogue la bajada en aquellos impuestos que afectan a la electricidad unos meses más es bien visto por los populares, aunque creen que debe ir más allá.

Críticas de todos los grupos por no concretar

Además de la llamada al PP, Bolaños habló con ERC, Ciudadanos, PNV y Más País y el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rafael Simancas, con el resto de grupos parlamentarios. El momento en que se han realizado los contactos deja muy poco margen para negociar con los partidos. Pero el Gobierno asegura que se ha optado por incluir algunas de las medidas que los grupos plantearon, en una ronda inicial de reuniones, y que se han incorporado al texto.

Los nacionalistas vascos, sin embargo, criticaron también las "generalidades" en una conversación de "cinco minutos" reprochando también tener conocimiento de los anuncios del presidente "por la prensa". Los independentistas catalanes se sumaron a la necesidad de conocer "la letra pequeña" antes de avanzar, aunque ven con buenos ojos la inclusión de algunas de sus medidas en el plan.

Desde La Moncloa, más optimistas, se apunta que han percibido una "buena acogida" y que "el tono ha sido constructivo". "El Ejecutivo espera que los partidos políticos demuestren unidad y responsabilidad en la respuesta a la guerra provocada por Putin y se sumen al gran acuerdo de país que ha propuesto el presidente y que necesita España".