Tribunales

Laura Borràs, a un paso de ir a juicio por malversación

La presidenta del Parlament está acusada de favorecer a un amigo cuando estaba al frente del Institut de les Lletres Catalanes

La presidenta del Parlament catalán, Laura Borràs.

La presidenta del Parlament catalán, Laura Borràs. / DAVID ZORRAKINO / EP

El juez del

Tribunal Superior de Justícia de Cataluña

 Josep Seguí, que instruye el caso de la presunta malversación de fondos públicos por parte de la presidenta del Parlament,

Laura Borràs

, ha dado por finalizada la investigación y ha dado un plazo al fiscal para que, si lo considera oportuno, presente su escrito de acusación. En esta causa no solo está implicada Borràs, sino también otras tres personas. El proceso judicial está abierto por un delito continuado de prevaricaciónfraude administrativofalsedad en documento mercantil y malversación, que supuestamente se cometieron cuando Borràs era directora del Institució de les Lletres Catalanes (ILC).

Borràs está imputada por favorecer presuntamente a un amigo, Isaías Herrero, con quien, según el juez, acordó, entre marzo de 2013 y febrero del 2017, el fraccionamiento de 18 contratos menores de prestación de servicios informáticos, reflejando importes y conceptos inventados. Las cuantías de cada uno de ellos eran inferiores a 18.000 euros. Para el magistrado, la actual presidenta del

Parlament

"abusó de las funciones que tenía reconocidas", dictando "resoluciones injustas" para trocear los contratos y eludir la concurrencia pública. De esta manera, ayudaba a los intereses de su amigo "en detrimento de la defensa de los intereses generales". Los contratos investigados suman 330.442 euros.

Indicios suficientes

Según el magistrado, Borràs, que dirigió la ILC entre enero de 2013 y enero de 2018, era quien contactaba con los proveedores que pudieran estar interesados en la presentación de ofertas, proponía la contratación, acordaba la adjudicación y el gasto y autorizaba los pagos. La presidenta del Parlament y Herrero, precisa la resolución, habían mantenido una relación profesional previa, puesto que habían coincidido en un grupo de investigación de estudios literarios y tecnología digitales, y él había ejercido de profesor en el máster que ella impartía en la Universitat de Barcelona.

De los correos electrónicos y las conversaciones telefónicas intervenidas, argumenta el juez, se desprenden "indicios suficientemente sólidos de la concertación entre los dos para defraudar" y adjudicar a Herrero los trabajos informáticos "en el sentido más ventajoso para él". La resolución agrega que Borràs aprobó las adjudicaciones de los 18

contratos

investigados "en plena consciencia de que entraban en contradicción con las exigencias de la legislación reguladora" del sector público y omitiendo la concurrencia pública.

El magistrado recalca que Herrero presentó unos presupuestos atribuidos a otras personas (que han negado su intervención) con el propósito de "simular" una concurrencia de ofertas en los expedientes de contratación de los servicios relativos a la página web de la ILC. La liquidación de los contratos menores investigados, en su opinión, "ha comportado un perjuicio a los caudales públicos", ya que que la determinación del importe de "cada uno" de ellos y de las correspondientes facturas de adjudicación "se hacía con criterios arbitrarios".

Correos y llamadas

Además de Borràs y Herrero, los otros imputados en esta causa son: Andreu P., que facilitó sus datos fiscales para presentar presupuestos, y Roger E., trabajador de ILC que supuestamente facilitó la contratación irregular.

Entre los mensajes figura un correo electrónico en el que Borràs se dirige a Herrero: "Como tienen que hacerse tres presupuestos para cada una de las personas o empresas diferentes, yo había pensado que podríamos hacer que tú te presentes a los cuatro y solo ganas uno, el más económico de la serie, la cooperativa idem, APM gestión idem. El resto se podría hacer con la empresa de Andreu y quizá con la cooperativa de

Madrid

. Si tu haces los cuatro vuestros, yo hago los otros. ¿Te parece bien?".

En una conversación telefónica intervenida el 6 noviembre del 2017, Herrero presumía: "Yo tengo una de marrones, bufff, hombre, claro, porque yo con la Borràs, con la jefa, yo facturo con la cooperativa, facturo unos trapis para allí (...) He de hacer dos presupuestos buenos y cuatro de no buenos". Después recalca: "Lo peor es si Borràs deja de ser directora".