GUERRA EN EL PP

Crisis total entre Casado y Ayuso: espionaje al hermano de la presidenta, corrupción y guerra sucia

El supuesto espionaje por colaboradores de Génova para dañar a la presidenta y el tajante desmentido del PP llevan a un nuevo episodio de la guerra interna que ahora sí podría estallar por completo

Ayuso, Casado y Almeida FOTO JOSÉ LUIS ROCA

Ayuso, Casado y Almeida FOTO JOSÉ LUIS ROCA / José Luis Roca

Paloma Esteban

Paloma Esteban

En plena batalla entre Génova y la Puerta del Sol personas del núcleo duro de Pablo Casado contactaron con detectives para investigar al hermano de Isabel Díaz Ayuso, según han publicado 'El Confidencial' y 'El Mundo'. Una de las personas al mando de esta operación habría sido Ángel Carromero, hombre fuerte de José Luis Martínez-Almeida en el Ayuntamiento de Madrid y, sobre todo, muy cercano al propio presidente nacional, con quien mantiene una amistad de años desde que empezaron juntos en Nuevas Generaciones.

El PP, por su parte, "desmiente tajantemente" las informaciones y asegura que "tomará las medidas judiciales oportunas ante estas falsedades". La noticia se conoce justo después de las elecciones de Castilla y León y cuando el PP se enfrenta a la negociación más dura que nunca ha mantenido con Vox. El secretario general, Teodoro García Egea, canceló a última hora de la tarde un foro que tenía previsto mañana con el diario 'Información' en Alicante. El alcalde madrileño, que también se ha visto afectado, comparece a primera hora del jueves en el Palacio de Cibeles. También lo hará la presidenta en la sesión de control en la Asamblea madrileña.

El objetivo, según los citados diarios, era encontrar información comprometedora sobre Tomás Díaz Ayuso, cuyo nombre ya fue protagonista hace meses en la Asamblea de Madrid, después de que la oposición diera la voz de alarma por varios contratos adjudicados en abril de 2020, durante lo peor de la pandemia, para adquirir mascarillas FFP2 y FFP3, por parte de la Comunidad. Esa adjudicación se la llevó la empresa en la que trabaja el hermano de la presidenta y la sospecha de los colaboradores de Génova era que Tomás Díaz Ayuso se pudo llevar una comisión.

A pesar del fuerte desmentido de Génova, la información ha hecho saltar por los aires la tregua (que ya venía menguando) entre la Puerta del Sol y la dirección nacional. Ambos decidieron arrancar el año político bajando las espadas para remar juntos por Castilla y León.

Pero 24 horas más tarde todo comenzó a evaporarse. Primero fue el portavoz del gobierno de Ayuso, Enrique Ossorio, al pedir que se retomara cuanto antes la celebración del congreso madrileño. Luego Ayuso se enfrentó a la línea oficial de pactos en Castilla y León abogando por acercarse a Vox y sugiriendo a su partido "que no decidiera los pactos pensando en lo que diría la izquierda". Y esta información ha dado la puntilla a un partido que ya se encuentra abierto en canal.

Los contratos y el hermano de Ayuso

Los contratos de la empresa en la que trabaja el hermano de Ayuso no son algo novedoso. El pasado mes de noviembre la Asamblea de Madrid se convirtió en un auténtico polvorín, precisamente por la investigación que la oposición pidió. Fue Vox quién decidió salvar a la presidenta de la comisión promovida por la izquierda para evitar una nueva exposición personal de Ayuso. A esa iniciativa le precedió un pleno monográfico que terminó en una enorme polémica. 

Los partidos de la izquierda llegaron a abandonar el pleno después de que la presidenta de la Asamblea, Eugenia Carballedo, anterior consejera del Gobierno de Ayuso, expulsara a una diputada del PSOE por sus acusaciones directas a Tomás Díaz Ayuso. “Usted ha ido por los hospitales a sugerir a las unidades de contratación qué empresa contratar”. Los socialistas lanzaron la supuesta sombra de corrupción que después, según los citados diarios, desde Génova quisieron continuar en los pasados meses.

El PP afronta con este nuevo episodio una guerra que varios sectores de la formación ven "sin retorno".