Sánchez testará su credibilidad como gestor de la recuperación

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, líder absoluto del PSOE, pidió a su partido hace unos meses que había que consolidar el siguiente mensaje: los socialistas españoles también saben sacar a España de crisis económicas, y además, lo saben hacer mejor que el PP, con más igualdad, con más Estado de Bienestar y con los derechos fortalecidos. El 13 de febrero de 2022, en Castilla y León, feudo tradicional del Partido Popular, tendrá su primer examen. No le será fácil aprobarlo, porque ahora mismo le lastran el desbocado aumento del precio de la luz y la incertidumbre que está generando ómicron.

Sánchez, en principio, se volcará en los comicios castellanoleoneses para que gane el mismo candidato que ganó los de 2019 (35 escaños frente a los 29 del PP). Luis Tudanca, el líder del PSOE en la comunidad autónoma, barón de máxima confianza del presidente, tendrá su segunda oportunidad.

El despliegue del presidente por el territorio, a la espera de que cuaje la agenda, buscará obtener el máximo rendimiento de una serie de datos que Moncloa confía en que sean más que positivos, sobre todo el crecimiento de la economía y el aumento del empleo.

Ambos parámetros estarán determinados por la llegada y circulación de los fondos UE. En agosto pasado, la Comisión Europea avaló la llegada de 9.000 millones de euros y a primeros de mes hizo lo propio con otros 10.000 millones. Dado que el dinero que propulsa Bruselas empezará a regar la economía nacional a partir de enero, el presidente lleva varios días de presentación en presentación de los PERTE, es decir, los planes estratégicos para la recuperación y transformación de la economía. El primero fue para el sector del automóvil, pero durante este otoño se han encadenado las exposiciones de los destinados a la salud de vanguardia o a las energías renovables.

Castilla y León, como todas las demás comunidades, aspira a catapultar sus previsiones económicas gracias a los fondos. Lo hará con un nuevo Gobierno, ya que las elecciones darán un viraje al rumbo político de la autonomía. Las encuestas internas y algunas publicadas apuntan a una victoria clara del PP, pero la fecha de los comicios, 13 de febrero, plantea una serie de interrogantes. Uno de ellos tiene que ver con la propia fecha, en pleno invierno, lo que para los estrategas electorales resulta extraño. Opina un dirigente del PP en conversación con este medio que poner urnas un domingo invernal, en una comunidad como la castellanoleonesa, de clima continental, puede resultar perjudicial.

Otros factores a tener en cuenta son la credibilidad que la ciudadanía dará a los argumentos que han llevado al actual presidente, el popular Alfonso Fernández Mañueco, a adelantar los comicios, entre ellos una supuesta moción de censura que Cs estaría pergeñando con el PSOE. El portavoz socialista, Felipe Sicilia, ha negado semejante hipótesis. Un nuevo elemento que irrumpe y que puede trastabillar los planes del mandatario del PP es la irrupción de Soria Ya! como nuevo competidor electoral.

Sánchez, el gestor

El Ministerio de Economía, en su cuadro macro, dibujó un crecimiento para este año del 6,5%, pero el Banco de España, recientemente, rebajó las suyas a por debajo del 6. Está por ver el efecto que la variante ómicron causará en la dinamización empresarial y laboral que los organismos han pronosticado. Puede que haya nuevas restricciones, y en consecuencia, nuevas contracciones económicas. Con todo, el PSOE confía en que la llegada de los fondos y las bases de los presupuestos generales del Estado, a punto de ser aprobados, esquiven los malos augurios y la nube negra de esta nueva embestida de la pandemia.

El Gobierno acelerará el proceso de inoculación de la tercera dosis de la vacuna para proteger a la población y, al menos, limitar temporalmente el parón que puede ocasionar ómicron. En materia sanitaria, a eso se agarra Sánchez, como ha demostrado hasta la fecha, pues enarbola la tasa de población vacunada siempre que tiene intervención pública. Es uno de los países que con más éxito ha hecho la campaña.

Al tirón de la vacuna, al empuje de los fondos europeos y a las perspectivas económicas se suma el vigor del mercado de trabajo, lo que está muy relacionado. Moncloa espera no se estanque o quede revertido por culpa de la pandemia. Noviembre de 2021 se cerró, en números de desempleo y ocupación, como uno de los mejores meses de la última década.

Ahora bien, el presidente tiene un problema enorme que amenaza con socavar su credibilidad: la inflación. El alza de precios, derivado del aumento imparable y desbocado del de la luz, le puede causar una muy mala pasada.

Sánchez, el legislador

A la inercia del país en sus números macro, el Gobierno y el PSOE añadirán la agenda legislativa. Los presupuestos están prácticamente zanjados, a la espera del "ok" del Senado y su previsible entrada en vigor, siempre y cuando no haya cambios en el proyecto y deba regresar al Congreso para el visto bueno definitivo. En las cuentas están guardadas las políticas sociales del Ejecutivo.

Hace poco, las Cortes aprobaron la nueva ley del Ingreso Mínimo Vital, que las fuentes socialistas consultadas esperan que llegue, así, a más gente. En poco tiempo quiere aprobar el decreto de la reforma laboral para empezar a desmontar el modelo vigente del PP. La lucha contra la temporalidad es uno de sus pilares.

Estos tres instrumentos legislativos estarán en marcha cuando Castilla y León tenga que votar, el 13 de febrero. Para entonces, se habrá reanudado la actividad legislativa en el Congreso, aunque a baja velocidad, ya que enero es inhábil y la inclusión en el calendario de este nuevo domingo electoral provocará que esa semana anterior no haya agenda parlamentaria.

Optimismo contra pesimismo

Sánchez tiene claro desde hace meses que sus opciones de repetir mandato en Moncloa dependen de que sea capaz de congeniar con el estado de ánimo de la ciudadanía. Ha detectado que la gente quiere buenas noticias tras dos años de pandemia que no cesa ni decae por el momento.

Tal y como indican las fuentes del PSOE consultadas, apelará a la ilusión por un nuevo ciclo de más prosperidad y justicia social, frente a un PP que niega los síntomas de la recuperación y se enfanga en discursos catastrofistas. Los excesos verbales del líder nacional de los populares, Pablo Casado, son un argumento que los socialistas pretenden rentabilizar al máximo como demostración de su tendencia al catastrofismo.

Este lunes fue día de encuestas. Una de GAD3, la de Andalucía y el barómetro del CIS. Éste último sondeo, de casi 3.000 entrevistas, dio un repunte al PSOE como partido favorito de los españoles. Repetiría prácticamente el mismo resultado del 10 de noviembre. Sánchez, por su parte, sigue siendo el predilecto para seguir en la Moncloa, pues así lo dice más de un 21 por ciento de los encuestados.

Su credibilidad como gestor, como presidente, está en juego. En Cataluña triunfó. En Madrid fracasó. Castilla y León inclinará la balanza.