AVANCE DEL NUEVO LIBRO

"Casado, un bienqueda. Egea hace política de pelotas y peloteo": Cayetana Álvarez de Toledo 'revienta' el PP

El libro de la exportavoz llega en mitad de la peor crisis interna para Casado como presidente del PP

La exportavoz relata cómo entró en su equipo y que no le terminaba de convencer "por sus ganas de caer bien"

Los grandes ataques se dirigen a García Egea, "un político del que no se recuerda una sola idea original o realmente valiosa"

Cayetana Álvarez de Toledo

Cayetana Álvarez de Toledo

Paloma Esteban

Paloma Esteban

Cuando hace meses saltó la noticia de que Cayetana Álvarez de Toledo preparaba un libro hablando de su última etapa en el PP, muchas voces en el partido se alarmaron. Las especulaciones sobre lo que contaría, el grado de detalle y a quién mencionaría se dispararon. Las 519 páginas que llevan por título ‘Políticamente indeseable’ salen a la venta esta semana y cargan muy especialmente contra Pablo Casado y Teodoro García Egea, inmersos en este momento en la crisis interna más grave que ha sufrido el líder del partido desde que llegó a la presidencia: el pulso con Isabel Díaz Ayuso.

“Había algo de Casado que no acababa de convencerme. Lo que se llama un bienqueda o un veleta”

Álvarez de Toledo, que ya avanza en el libro que no piensa dejar el acta de diputada, relata los episodios previos a dar el paso de integrarse en el equipo de Casado. Su primer contacto fue con Miguel Ángel Quintanilla, “un politólogo conservador que escribía buenos discursos a Aznar y que acabó en Génova”. Según cuenta, antes de que realmente se convocaran las primarias ya había gente trabajando en un futuro liderazgo de Casado. “Me citó en la cafetería de la antigua residencia de estudiantes en El Pinar”, detalla. Entonces le dijo que no: “Siempre había trabajado con gente más inteligente y valiente que yo, y no me sumé”. Aún así, estableció “un hilo de contacto” con el que después sería elegido sucesor de Mariano Rajoy.

El dardo (no se sumó porque no era más inteligente que ella, se entiende) no es el primero que menciona sobre el líder popular. En páginas anteriores avanza la opinión que siempre tuvo de él: “Había algo de Casado que no acababa de convencerme. Me parecía un hombre de empatías variables. Un camaleón sentimental. Lo que se llama un bienqueda o un veleta”. Y continúa: “Son tales sus ganas de caer bien que acaba adaptando su posición a la de cada uno de sus interlocutores, aunque sean incompatibles entre sí”. 

"Egea es de los políticos que no han tenido una idea original ni realmente valiosa.  Su forma de entender la política son las pelotas y el peloteo"

Como era previsible, las experiencias que relata “más desagradables” y los principales ataques van dirigidos hacia García Egea, con quien siempre ha mantenido una pésima relación. “Cuando era portavoz me preguntaba cómo era posible tener que dedicar tanto tiempo y energía a este hombre. Es un arquetipo y perfiles como el suyo proliferan en los partidos. Son políticos de los que no se recuerda ninguna idea original ni realmente valiosa. Pero acaban imponiéndose por la pura fuerza de su ambición. Buscan el poder y lo ejercen de manera despótica, teocrática. Teodocrática”, afirma Álvarez de Toledo sobre el número dos del PP.

“Busca el control absoluto también en los medios, los empresarios, los jueces… Con la misma combinación de palo y zalamería. Su forma de entender la política son las pelotas y el peloteo”, zanja. Hasta ahora la dirección nacional del partido descarta tomar cartas en el asunto y no pretenden imponer ninguna sanción, más allá de lo que decida hacer el grupo parlamentario en el Congreso tras conocerse que rompió la disciplina de voto la pasada semana, oponiéndose a la renovación institucional pactada con el Gobierno que incluye a nombres como Enrique Arnaldo para el Tribunal Constitucional.

Carga contra los diputados del PP

Algunos de los episodios del libro están llamados a levantar ampollas dentro del grupo parlamentario. Sobre todo por las fuertes críticas a sus compañeros de escaño, a los que acusa de hacer un “seguidismo” propio de “una pandilla”: “De pronto hombres y mujeres adultos, inteligentes y formados acaban comportándose como una claque servil y sectaria”, asegura, reprochando que el chat del grupo parlamentario se convierte en “un espectáculo de diputados compitiendo entre elogios con emoticonos de palmas” y expresiones como “¡¡¡Grande!!!”, “Maestro”, “Sensacional”

La exportavoz parlamentaria también cuenta “que no exagera al decir que la conversación más desagradable de su vida” fue con García Egea, que mantuvo un tono “que no podía ser más injusto, avasallador” y que “jamás imaginó la irracionalidad y el despotismo que mostró”, “dispuesto a aplastar cualquier signo de inteligencia, sensibilidad o criterio”. Asegura Cayetana Álvarez de Toledo que “disparó contra Guillermo y Mario” (en referencia a los diputados Mariscal y Garcés) e incluso “contra Adolfo, a quien reprochó aprovecharse de la memoria de su padre” incumpliendo la disciplina de voto en una votación del Congreso. 

Mucho espacio dedica también la diputada a criticar decisiones estratégicas del partido, como la campaña de las elecciones catalanas “que puso en peligro el escaño de Alejandro Fernández”, a quien la exportavoz considera “el mejor parlamentario español” o la destitución fulminante de Alfonso Alonso en el País Vasco para poner en su lugar a Carlos Iturgaiz, “que solo sirvió para alumbrar una mustia campaña”, ironizando también con la línea política elegida para aquella campaña, “absurda contra el PNV y basada en la gestión”.

Álvarez de Toledo presentará oficialmente su libro a finales de noviembre en Madrid con la incógnita si algún miembro del partido, dado el contenido, acudirá a la cita. Fuentes del PP insistían en que no actuarían contra la exportavoz abriendo un expediente disciplinario destinado a la expulsión del partido y siguen defendiendo que se trata de una campaña “para vender libros”. Consideran que es ella “la que debería marcharse” dada la opinión que tiene del presidente, el secretario general, el PP en su conjunto y sus compañeros de escaño. Ella dice que aguantará hasta el final.