VOTACIÓN DECISIVA

El temor del PSOE y Podemos a las deserciones de última hora se cierne sobre el TC

Las direcciones de ambos grupos parlamentarios indican que la renovación está controlada pese al malestar

En Unidas Podemos reconocen en privado que las razones de Gloria Elizo y Meri Pita, muy críticas, son compartidas

La vicepresidenta tercera del Congreso y diputada de Unidas Podemos, Gloria Elizo

La vicepresidenta tercera del Congreso y diputada de Unidas Podemos, Gloria Elizo / Verónica Povedano. Congreso de los Diputados

Ángel Alonso Giménez

Gloria Elizo, diputada por Madrid de Unidas Podemos y vicepresidenta tercera del Congreso, y Meri Pita, diputada por Las Palmas, hicieron público lo que todos sus compañeros y compañeras de grupo dicen en privado: que renovar el Tribunal Constitucional con magistrados de la trayectoria de Enrique Arnaldo es contraproducente y contradictorio con las exigencias de ejemplaridad.

En el pleno del Congreso de este jueves, los 35 integrantes del grupo "morado" deberán pronunciarse sobre el acuerdo adoptado con el PP para ello. Como la votación es secreta, y a pesar de las medidas adoptadas y de la explicaciones dadas, el temor de las direcciones parlamentarias a que se expandan los votos díscolos se ha hecho tangible. Todos los indicios apuntan a que habrá quorum suficiente, insisten, e incluso se atreven a darlo por hecho, pero los temblores no cesan.

Elizo y Pita, así como el consejero de Políticas Migratorias y Justicia del Gobierno navarro y exdiputado nacional, Eduardo Santos, firmaron este miércoles un documento que acto seguido enviaron a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. Las dos parlamentarias en activo no avanzaron qué votarán, pero sí verbalizaron una discrepancia de calado con el contenido del pacto de renovación del Tribunal Constitucional, es decir, con los nombres.

Se centraron en uno especialmente, el de Enrique Arnaldo, de quien este medio ha desvelado numerosos vínculos con el partido que le ha postulado: el PP. También ha destapado irregularidades y vulneraciones del estatuto del personal de las Cortes Generales, pues es letrado del Parlamento. "Cada voto afirmativo es una ignorancia deliberada", sostienen los firmantes acerca del posicionamiento de Unidas Podemos, a favor de las candidaturas.

Enrique Arnaldo, durante su comparecencia en el Congreso.

Enrique Arnaldo, durante su comparecencia en el Congreso. / EFE

Sin embargo, a donde apuntan Elizo, Pita y Santos es a la concepción misma del Tribunal Constitucional. Aceptar que perfiles tan partidistas como el del mencionado Arnaldo formen parte de él presupone aceptar la imposibilidad de un giro progresista en la judicatura, según su argumentación. Conlleva, además, convertir el alto tribunal en un actor más de "combate político". "No aceptamos que sea así de ninguna manera" porque "el precio a pagar en términos políticos de regeneración democrática y sociales, de construcción de ciudadanía, es sencillamente inasumible", zanjan. Las dos diputadas y el exdiputado no reniegan del pacto, sino del a "quiénes" incumbe.

Malestar enorme, pero no para frustrar el pacto

Nada más hacerse público el posicionamiento crítico de dos de los 35 diputados/as de Unidas Podemos, comenzaron a circular las reacciones, incluso del presidente, Pedro Sánchez, quien en la sesión del pleno de este miércoles dedicada a la última cumbre europea se ha referido al perfil de Arnaldo y a la controversia generada: "A mí no me gustan algunos de los candidatos propuestos por el PP, pero el compromiso del Gobierno de España y de los grupos socialista y de Unidas Podemos es salvar el acuerdo y garantizar la renovación que exige la Constitución", dijo.

A este argumento se ha aferrado el PSOE desde que empezaron a trascender las irregularidades de la trayectoria del magistrado. La prioridad es la renovación. Por debajo queda la idoneidad de quiénes protagonizan la renovación.

Unidas Podemos ha recurrido a una tesis similar. Antes que prolongar el bloqueo institucional, mejor desbloquear. Fuentes de esta formación consideran que acometer cambios de tendencia ideológica en el poder judicial resulta harto complicado. Iniciar el movimiento en el Constitucional, a pesar del coste que está infligiendo a las siglas, es esencial. Uno de los nombres propuestos es el de Ramón Sáez, de quien las citadas fuentes destacan su solidez y bagaje.

El malestar en la formación es unánime. Lo dicen todos los diputados a los que se les consulta. EL PERIÓDICO DE ESPAÑA ha recabado las versiones de la dirección y de algunos de sus diputados, y coinciden en subrayar esa sensación de incomodidad. Pero también en que habrá voto a favor, es decir, en que pondrán el nombre de Arnaldo en el cajetín del enlace que les habilitará el Congreso, ya que será un procedimiento telemático.

Pablo Echenique y Ione Belarra.

Pablo Echenique y Ione Belarra. / EFE

También es unánime esa zozobra en las filas socialistas. Todos admiten que no les gusta nada el perfil de Arnaldo. Se ha generalizado la expresión que hasta ahora han usado el socialista Odón Elorza y el presidente del grupo de Unidas, Jaume Assens: la de votar con "la nariz tapada".

Con todo, en la dirección de Unidas Podemos y en la del PSOE la seguridad de que no habrá votos rebeldes no es tan consistente ya. Si tienen que aventurar, las fuentes aventuran que no los habrá. Lo que sí garantizan es que el pacto del Gobierno y del PP está fuera de peligro.

El PSOE tiene 120 diputados, el PP 88 y Unidas 35; 243 en total. Tendrían que producirse en las bancadas de los tres hasta 33 deserciones, 33 parlamentarios que eludan escribir el nombre de Enrique Arnaldo, porque el umbral mínimo en cada caso es 210 votos. Es una cifra demasiado alta como para pensar que la opción de que Arnaldo no saldrá en primera votación. La viabilidad de las otras tres opciones no está en el aire.

Un apunte: no participarán en la votación los diputados de ERC, Cs, PNV, EH Bildu o JxCat. Ningún aliado del Gobierno acompañará a socialistas y "morados", salvo el representante de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, que al menos apoyará a sus dos candidatos.

El mecanismo de la votación

Será telemática, lo que es una anomalía porque el reglamento indica que las votaciones de renovación de los órganos constitucionales son secretas. Los servicios técnicos de la Cámara harán lo mismo que cuando tocó aprobar las candidaturas del nuevo consejo de administración de RTVE.

Los diputados accederán al enlace facilitado en sus perfiles de la intranet de la Cámara. Verán una suerte de cajetín dentro del que tendrán que escribir uno, dos, tres o cuatro de los nombres propuestos, que son los que se expusieron a la evaluación de la Comisión de Nombramientos hace una semana. Si un diputado pusiera un nombre diferente, el voto será nulo. El plazo para rellenar dicha caja terminará a las 13.00 horas de este jueves.

Al lado del citado cajetín, los diputados verán también un enlace a un documento pdf, que es el que usan para dar fe de que han votado. Hay grupos, como el PSOE, que piden enviar el documento a la dirección. Otros no.

Fuentes socialistas explican que la instrucción la mantendrán el jueves, incluso para las de la renovación del Tribunal Constitucional, del Tribunal de Cuentas y del Defensor del Pueblo, aunque, al ser secreta, en esas tres ocasiones no solicitarán el sentido del voto, sino solamente la corroboración de que han votado.