INVESTIGACIÓN

El futuro presidente del TC y Arnaldo maniobraron para colocar a Matas en la universidad

González-Trevijano escribió una carta que el candidato a magistrado del TC utilizó ante el juez Castro para defender la legalidad de sus relaciones con el expresidente balear

Los magistrados Enrique Arnaldo y Pedro González Trevijano y el expresidente balear Jaume Matas.

Los magistrados Enrique Arnaldo y Pedro González Trevijano y el expresidente balear Jaume Matas. / El Periódico de España

Cristina Gallardo/Tono Calleja

El futuro presidente del Tribunal Constitucional, que según todas las previsiones será el magistrado Pedro González-Trevijano, maniobró siendo rector de la Universidad Juan Carlos I con el candidato a este órgano por el PP Enrique Arnaldo para facilitar "algún vínculo académico" al expresidente balear Jaume Matas. Así se acredita en una carta que firmó en 2010, cuando Arnaldo y Matas ya estaban siendo investigados en la 'macrocausa' Palma Arena.

Concretamente, González-Trevijano escribió una carta a Arnaldo el 8 de abril de 2010, -una fecha en la que el que el candidato a renovar el TC había sido ya imputado en la causa abierta en Baleares por sus relaciones profesionales con el Gobierno de Matas- cuyo objetivo fue dejar constancia de un almuerzo celebrado tres años antes en la sede de la propia Fundación de la Universidad Juan Carlos I en la que el expresidente balear les expuso sus proyectos de futuro, su deseo de conseguir alguna ocupación en la univesidad y reveló también que iba a vincularse profesionalmente al despacho del propio Arnaldo.

La misiva a la que ha tenido acceso EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, fue escrita por González-Trevijano conociendo la situación en la que se encuentra su amigo Arnaldo, que fue catedrático de esa universidad, por expreso deseo de éste, según refleja el documento. Se incluye en un paquete de un total de siete que el propio Arnaldo remitió al Juzgado de Instrucción número 3 de Palma de Mallorca para justificar sus actividades.

Experiencia en materia medioambiental de Matas

"Fue un encuentro cordial en el que recuerdo que él nos expuso sus proyectos de futuro entre los que se encontrba buscar algún vínculo con el mundo académico a partir de su experiencia en materia medioambiental, que finalmente no se concretó", admite González-Trevijano en la carta, añadiendo que también se comentó en dicho almuerzo que Matas se iba a vincular al despacho profesional de Arnaldo .

Su labor sería, añade la nota, la de "servir de puente para informar y valorar los proyectos de consultoria legislativa para la modernizacion de los Estados iberoamericanos que se ponen enmarcha por el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial". Añade que, por conocer la experiencia que Arnaldo ya había desarrollado en este campo en países como Bolivia, Perú, Panamá y la República Dominicana, se congratuló por todos los planes e incluso pidió al catedrático que mantuviera un canal de información abierto con la Universidad, "por si algún profesor podía implicarse, de alguna forma, en algunos de los proyectos".

Una segunda carta confirma el almuerzo

El encuentro es confirmado en una segunda carta dirigida a Arnaldo y aportada al Juzgado por otra de las asistentes al almuerzo, la directora general de la editorial juridídica Wolters Kluwer España, Rosalina Díaz. "Me pides que te confirme la celebración de una reunión a la que asistí y lo hago con mucho gusto (...) recuerdo que hablamos de muchas cosas", añade, para relatar a continuación que Matas les contó sus planes de trabajo en Estados Unidos en un grupo vinculado al sector turístico, su interés en seguir muy de cerca las primarias entre Hillary Clinton y Barak Obama y que "iba a disponer de tiempo para otras actividades profesionales privadas".

Díaz también dio por sentado del contenido del encuentro que Matas iba a colaborar activamente en el despacho profesional de Arnaldo "entre otros campos el de la llamada consultoría legislativa en Iberoamérica".

Unos meses antes de esta reunión, en febrero de 2010, Arnaldo había declarado como investigado en el caso Palma Arena en relación con unas labores de asesoramiento para implantar la televisión pública balear para las que Matas le había contratado en 2004. 

El asunto fue archivado, pero el juez Castro acusó inicialmente a Matas de un delito de malversación de caudales públicos y cohecho por adjudicar dos contratos públicos la firma de Arnaldo por importes de 30.000 euros y 12.000 euros, respectivamente.

Se da la circunstancia de que Arnaldo ha defendido este martes su "presunción de inocencia" durante su comparecencia en la Comisión Consultiva de Nombramientos del Congreso de los Diputados, además de la compatibilidad de todas estas actividades con su labor de letrado en las Cortes. El candidato a propuesta del PP se ha definido ante los diputados como "templado y prudente" y ha añadido: "Me gustaría también decir que cuando alguien acude a un juzgado no puede ser considerado eterno sospechoso. Pertenece a otras épocas pasadas lo de ser sospechoso de por vida, felizmente superadas.