Opinión | LA PALABRA DE LOS NÚMEROS

Inestabilidad política y prima de riesgo

Los mercados son procíclicos y, con Alemania en recesión, el empleo en España sigue creciendo un 2% anual y eso ayuda a explicar que no seamos una preocupación para los inversores

El Banco de España confirma que la deuda pública bajó al 107,7 % del PIB en 2023

El Banco de España confirma que la deuda pública bajó al 107,7 % del PIB en 2023

En el mes de noviembre la inestabilidad política en España ha ido en aumento pero la prima de riesgo se mantiene estable. Primero con la DANA y la tensión que se vivió la semana posterior y luego con el continuo goteo de casos judiciales que afectan directamente al presidente del Gobierno y a los principales responsables de su partido pero esa tensión no tiene impacto en el diferencial entre la deuda pública española y la alemana.

¿Cuál puede ser la causa? En el mercado de deuda pública participan miles de inversores y es difícil saber que piensan todos ellos pero si hay algunas causas que pueden ayudar a explicar este comportamiento anómalo que, sin duda, es una excelente noticia para la economía española.

Los mercados son procíclicos y, con Alemania en recesión, el empleo en España sigue creciendo un 2% anual y eso ayuda a explicar que no seamos una preocupación para los inversores. En Alemania también hay crisis política y hay elecciones anticipadas en febrero con un resultado incierto ya que se espera un fuerte repunte de la extrema derecha que podría entrar por primera vez en el gobierno desde 1945.

En Francia también hay crisis política y se rumorea que puede haber una posible moción de censura del actual primer ministro con los votos de la extrema derecha de Le Pen y la extrema izquierda de Melenchon y eso, seguramente, forzaría a Macron a anticipar las elecciones presidenciales. Francia tiene ya más deuda pública y más déficit que España, su economía no crece y su prima de riesgo con Alemania ha subido en el último por encima de la española y también por encima de la Grecia que fue el país que provocó la crisis del euro en 2010.

En España el déficit público acumulado entre enero y septiembre apenas se ha reducido una décima de PIB con respecto a los mismos meses de 2023, aunque los ingresos públicos siguen creciendo un 7% anual. El gasto crece también un 7%, muy por encima de la regla de gasto que impone Bruselas del 2,9%, que permitiría reducir la deuda a niveles sostenibles sin necesidad de hacer recortes como sucedió en la crisis del euro.

Que la prima de riesgo y el empleo se hayan descorrelacionado del ciclo político en España es una buena noticia pero seguimos necesitando emitir casi 300.000 millones de euros cada año de deuda pública para pagar el déficit de las pensiones y el sueldo de los funcionarios y somos una economía muy vulnerable. Si se produce más tensión en la prima de riesgo francesa, el contagio llegaría inmediatamente a España.

Por esa razón sería necesario presentar una senda de estabilidad presupuestaria, con el Gobierno central liderando e imponiendo a las comunidades autónomas el cumplimiento de la regla de gasto que impone Bruselas pero con la actual debilidad del Gobierno, la excesiva fragmentación del parlamento y la disparidad ideológica y de intereses de los socios de legislatura ese escenario es pura ficción.