Opinión | ELECCIONES

El PP ganaría sin garantías de Gobierno

El sondeo del GESOP para Prensa Ibérica sitúa a Feijóo en cabeza, pero el escenario del 23J sigue muy abierto

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante una reciente rueda de prensa en la sede nacional del Partido Popular.

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante una reciente rueda de prensa en la sede nacional del Partido Popular. / Eduardo Parra / Europa Press

Las elecciones del 28 de mayo tiñeron el mapa de España de azul, aunque esa mancha, más que un verdadero tsunami del PP, es una consecuencia del derrumbe de la izquierda, y no tanto del PSOE, sino mucho más bien de la izquierda a su izquierda, tanto de Podemos como de las izquierdas periféricas. Esta lectura que aconseja prudencia respecto a la extrapolación de los resultados de las elecciones municipales y autonómicas a las elecciones generales y que matiza la inevitabilidad de una victoria del bloque de derechas es congruente con la encuesta del GESOP para Prensa Ibérica que se publicó este domingo. Este sondeo, realizado inmediatamente después del anuncio de la convocatoria electoral avanzada, arroja algunos datos que evidencian que aunque el PP va claramente en cabeza, el escenario de cara al 23 de julio está muy abierto y no puede darse nada por descontado.

El PSOE tiene algunos motivos para el optimismo ya que se ha producido un incremento de la valoración positiva del Ejecutivo, un dato que cuestiona la idea de que las elecciones del 28 de mayo han sido un castigo al Gobierno de coalición. Del mismo modo existe una mayor preferencia por un Gobierno de coalición de izquierdas que por una coalición de derechas, hasta el punto de que la segunda fórmula preferida es un gran acuerdo entre PP y PSOE. No obstante existe una gran división respecto a qué tipo de Ejecutivo lo haría mejor y tras la experiencia del primer Gobierno de coalición en España más de la mitad del electorado muestra su preferencia por uno monocolor. Al mismo tiempo, hay una amplia mayoría de ciudadanos que expresa una notable insatisfacción respecto a los resultados de esas elecciones, especialmente los electores de izquierdas, lo que se podría traducir en un incremento de la movilización de ese electorado, a diferencia de lo sucedido el 28 de mayo. Sin embargo, hay que tener presente que no solo ese electorado está muy movilizado sino que lo está el conjunto de los ciudadanos, ya que el 77,4% afirma querer ir a votar, una cifra muy elevada y más teniendo en cuenta la atípica fecha electoral en la que se celebraran las elecciones.

Pero, sobre todo, el sondeo revela que el PP parte como favorito y que es percibido, muy mayoritariamente, como el futuro ganador de las elecciones, lo que alienta la idea de la ola de cambio iniciada en las elecciones del 28 de mayo. Al mismo tiempo Alberto Núñez Feijóo es el líder, junto a Yolanda Díaz, que tiene la valoración más elevada de todos los líderes aunque ninguno de ellos apruebe y también que es el mejor valorado en su su espacio político. Esta, sin embargo, es compatible con un empate en la preferencia de Sánchez y Feijóo como presidentes. Y a pesar de que el PSOE es el partido que tiene una mayor intención de voto directa, el PP es la formación que cuenta con una mayor fidelidad de voto y dicha fidelidad junto con la simpatía de partido permite estimar que el PP podría ganar las elecciones del 23 de julio y alcanzar, aunque no la tiene asegurada, la mayoría absoluta junto con Vox.

Alberto Núñez Feijóo es el líder, junto a Yolanda Díaz, que tiene la valoración más elevada de todos los líderes aunque ninguno de ellos apruebe"

Existe el interrogante de cual será finalmente la oferta política a la izquierda del PSOE y también del independentismo catalán y de si las fórmulas elegidas tendrán un efecto maximizador de los resultados que podrían beneficiar a la izquierda, pero de momento el PP es el claro favorito. La incógnita es cual será el alcance de su victoria y si podrá gobernar.