Opinión

Miseria de la economía

No hay economía neutral, sin objetivos y sin sistemas de valores, y estos los pone el sistema democrático. Un objetivo podría ser la semana de 4 días

Jornada laboral de cuatro días en València.

Jornada laboral de cuatro días en València.

La semana de cuatro días es impagable. No lo digo yo, lo dicen nada menos que investigadores de la Universidad de Cambridge y del Boston College que han estudiado la opinión de casi tres mil empleados de 61 empresas que han participado en una prueba piloto organizada con el grupo de defensa 4 Day Week Global, la semana global de cuatro días, la experiencia les gustó tanto a los participantes que decidieron seguir. En realidad son 32 horas que algunos aplican en cuatro días o reduciendo la jornada a seis horas y media. Más de un tercio de los empleados pedirían entre un 25 y 50% mas para volver a los cinco días; y lo que es más, uno de cada seis dijo que ninguna cantidad de dinero les convencería de volver a trabajar cinco días a la semana. Y además subió la productividad. Y digo yo, si la experiencia es tan rotunda cómo es que no hay ningún informe del Banco de España recomendándolo. Y mira que el Banco es prolífico en informes. No pierde ocasión.

Los empleados recibían el 100% de su salario. Los ingresos de las empresas "se mantuvieron prácticamente iguales" durante la prueba de seis meses, pero aumentaron un 35 por ciento en promedio en comparación con un período similar de años anteriores. Disminuyeron las renuncias de los empleados. El experimento en cuestión se ha realizado en empresas de menos de 25 trabajadores– el 66%- y predispuestas a explorar la jornada flexible. No es factible para algunos, incluidos los trabajadores en industrias clave como el cuidado infantil y la atención médica, que ya enfrentan una escasez generalizada de personal. El programa piloto del Reino Unido involucró al doble de empresas y empleados que el programa piloto anterior, publicado en noviembre, y es el más grande de su tipo. Tampoco la CEOE de ha dicho ni pio.

Al final del experimento, los empleados reportaron una variedad de beneficios relacionados con el sueño, los niveles de estrés, la vida personal y la salud mental, según los resultados publicados (Washington Post 21 de febrero 2023). El tiempo que los hombres dedican al cuidado de los niños aumentó en más del doble que el de las mujeres, lo que apunta a los efectos positivos de una semana laboral más corta en la igualdad de género, aunque no hubo cambios en la proporción de tareas domésticas que informaron hombres y mujeres. Los ministerios correspondientes – Trabajo, Sanidad, Seguridad Social, Igualdad…. – no han abierto la boca.

“La elección de fines y medios no puede ser neutral y la economía actual excluye la idea de justicia y moralidad”. “La eficiencia de que presume la economía canónica es un principio, no un valor, como ocurre con la justicia o la equidad. Los principios tienen cierta connotación autoritaria, mientras que los valores la tienen discursiva, pues se llega a ellos por acuerdo”. Las citas son de Manuel Sanchis, economista y filósofo y vienen muy a propósito con la investigación de Cambridge citada al principio. “Miseria de la economía. Anatomía filosófica de una racionalidad vacía” (Editorial Trea.2023) es el desafiante título del último ensayo de este profesor de Economía Aplicada en la universidad de Valencia y economista de la Comisión Europea de 1986 a 2005. Seguramente contribuyen a clarificar porque muchas veces algunos callan; por qué se investigan determinadas cosas y no determinadas otras; y por qué por mucho modelos matemáticos y formales que traigan en economía es necesaria- también en otras ciencias- la idea de justicia un sistema de valores y de opciones que debería estar consensuado. El mercado perfecto que se autorregula no existe, la “mano invisible” que regula los mercados no promueve el interés público, sino que extiende el sufrimiento de la gente. “El mercado perfecto que se autorregula se correspondería con el mercado justo- escribe Sanchís-. “Aquí entraría el poder coercitivo del legislador democrático para combatir lo que podríamos denominar la “mano invisible invertida”, es decir las consecuencias no intencionales de la persecución del interés propio”, que no es el interés público.

No hay economía neutral, sin objetivos y sin sistemas de valores, y estos los pone el sistema democrático. Un objetivo podría ser la semana de 4 días. Los beneficios- valores- para los participantes se extendieron más allá de la oficina y en la vida personal de los empleados. Parecen valores prioritarios. En 1938 se implantó la semana de 40 horas, ya ha llovido. Habría que ir pensando en actualizar la jornada.