CUIDADO DE LA PIEL

Las 5 señales que indican que puedes tener dermatitis atópica

Los expertos insisten en que es imprescindible utilizar productos de higiene y de cuidado diario adaptados a la piel muy seca, irritada y atópica

Un paciente con dermatitis en la clínica Quirón.

Un paciente con dermatitis en la clínica Quirón. / Joan Cortadellas

Andrea San Martín

Andrea San Martín

Con motivo del Día Nacional de la Dermatitis Atópica, este miércoles 27 de noviembre, la Asociación de Afectados por Dermatitis Atópica reafirma su compromiso con la marca de dermocosmética Bioderma para ofrecer soluciones especializadas a aquellos que la padecen. "Nacimos con la intención de visibilizar la enfermedad, es muy importante que esta enfermedad no se banalice y que la gente se dé cuenta de que es mucho más que un simple picor", explica África Luca de Tena, responsable de comunicación de AADA.

La dermatitis atópica (DA) es un trastorno crónico de la piel, caracterizado por piel seca e irritable que cursa con brotes ocasionales de tipo eccema (hinchazón e inflamación). Para evitarlo, los dermatólogos coinciden en que gracias al cuidado adecuado de la piel facilitaría un buen mantenimiento de calidad de vida. A pesar de que se trate de una "enfermedad multifactorial que resulta de la interacción de factores genéticos, ambientales e inmunológicos", tal y como indica el doctor Alejandro Fernández, jefe del servicio de dermatología de Clínica Corachan. En este sentido, añade que "los pacientes con DA presentan defectos en la función de barrera de la piel; carecen de ciertas proteínas que mantienen la integridad cutánea".

¿Cómo saber si tengo dermatitis atópica?

Aunque suele afectar principalmente a bebés y niños, en algunos casos puede persistir en la adultez, afectando significativamente el día a día. De tal forma que, los expertos recomiendan identificar las cinco señales más comunes:

  1. Piel muy seca: una característica común de esta afección es la sequedad intensa de la piel, que puede volverse áspera y descamada.
  2. Picor persistente: a menudo intenso y constante, es uno de los síntomas más distintivos de la dermatitis atópica y puede empeorar en la noche.
  3. Enrojecimiento o inflamación: la piel puede mostrar enrojecimiento o zonas inflamadas, especialmente en áreas como el rostro, cuello, codos, detrás de las rodillas o en las manos.
  4. Lesiones o eccemas: las erupciones cutáneas, como pequeñas ampollas que pueden supurar y formar costras, son comunes. Estas áreas inflamadas suelen ser más visibles y molestas.
  5. Engrosamiento o cambios en la piel (liquenificación): con el tiempo, el rascado constante puede hacer que la piel se engrose, se vuelva más áspera o con una textura diferente.

¿Cómo debemos cuidarla?

Los expertos insisten en que es imprescindible utilizar productos de higiene y de cuidado diario adaptados a la piel muy seca, irritada y atópica. Por ejemplo, los laboratorios NAOS, siempre han aplicado su profundo conocimiento de la biología de la piel para desarrollar productos que protejan su ecosistema y mejoran la calidad de vida tanto de los pacientes como de sus familiares.