Ni Almería, ni Málaga: esta playa única en España se esconde bajo un castillo

Ante la cuarta ola de calor de este verano, la búsqueda de lugares en los que resguardarse de las altas temperaturas se vuelve imprescindible. Para algunos residentes y turistas son grandes opciones las áreas del norte peninsular, que permanecen más frescas que otras zonas de España, pero también hay quien opta por más localizaciones en las que es posible darse un chapuzón para refrescarse.

Hay regiones especialmente conocidas por sus bonitas calas, como las islas Baleares, las Canarias o Murcia. Pero hay lugares de ensueño no tan conocidos, como es el caso de una pequeña playa que se encuentra bajo un castillo: la Cala Jovera, en la localidad de Tamarit, Tarragona, en plena Costa Dorada.

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Este municipio se ubica a pocos kilómetros de la capital de la provincia. Aunque hay más playas próximas, la Cala Jovera es una de las más bonitas de la zona. Se puede aparcar el coche en alguno de los aparcamientos cercanos, en los 'campings' en los alrededores o en el pueblo, según recomiendan los visitantes. Después hay que llegar a pie a través de un sendero, pero no se tardan más de quince minutos.

La arena es fina y las aguas son cristalinas, calmadas y templadas, dado que esta cala está bañada por el mar Mediterráneo. El paisaje lo completan varios acantilados rocosos de baja altura y un bosque de pino mediterráneo, además del imponente castillo cuyo origen data del siglo XI. En 1916, un hombre estadounidense, Charles Deering, recompró la construcción y encargó la restauración. Hoy en día es un salón de eventos emplazado en un icónico entorno.

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La longitud de la playa es de 90 metros, según indica Turismo Tarragona. Los visitantes y los oriundos señalan que en la época estival hay una alta afluencia de gente para el pequeño espacio disponible para asentar las toallas. Por ello, se recomienda madrugar (se ve el amanecer) o pasarse por allí a última hora de la tarde. Por otro lado, la Cala Jovera no dispone de puesto de socorrismo, ni de vigilancia, por lo que a pesar de sus aguas tranquilas, hay que mantener la precaución.

Aun así, merece la pena acercarse por este lugar histórico y hermoso para dar un paseo o contemplar las vistas marítimas, vegetales y arquitectónicas de este conjunto que ha recibido el galardón de Playa Virgen del litoral de Tarragona.

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