El chiringuito que ha conquistado a famosos y críticos gastronómicos

Hubo un tiempo en el que lo que a uno se le venía a la cabeza cuando se decía la palabra chiringuito era algo más bien humilde. Un restaurante en pleno paseo marítimo, con camareros dicharacheros y olor a fritura de pescado, en el que en todo caso pocos se atreverían a negar que se comía de escándalo. Pero los tiempos han evolucionado, los chiringuitos han ganado en elegancia y han llegado incluso a la alta cocina.

De este segundo tipo es 'Casa Jondal', un chiringuito en el que comer con los pies en la arena no está en contradicción con que se siente al lado Leonardo Di Caprio, los críticos gastronómicos lo eleven a los cielos o la cuenta ascienda a los 1.500 €.

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Casa Jondal, un chiringuito de lujo y elegancia

Casa Jondal no es uno de los tantos locales populares de la costa española, es sinónimo de exclusividad y elegancia. Entre sus comensales han pasado Leonardo DiCaprio, Jeff Bezos, Mick Jagger, Bono, Messi, Roger Federer y Naomi Campbell. Todos con una sola cosa en común, una cartera llena como para costearse una experiencia gastronómica de primera categoría.

Y lo primero que venden es una experiencia. Hablamos de un oasis en medio de Ibiza, un lugar tranquilo en el que escuchar las olas y elegante en todo su mobiliario. Con base en una clásica casa blanca ibicenca y mobiliario de madera, no encontremos aquí unos altavoces con el hit del verano, ni un señor tocando el acordeón a cambio de unas monedas.

 Y no solo los rostros conocidos y los precios altos acreditan la calidad: los críticos gastronómicos se rinden a sus pies. Nombre conocidos en el mundillo, como Alberto Luna, hablan de "la mejor comida de su vida", y detrás de los fogones contamos con un chef de prestigio, Rafa Zafra.

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La carta

Zafra se curtió en 'El Bulli', que forma ya parte de la historia de la gastronomía de este país, y ofrece una experiencia de "marisquería de autor". Mantiene el mismo proveedor que en su anterior trabajo, Pere Gotanegra, y de esta forma aporta tanto calidad en la materia prima como sus propias ideas. Así, las técnicas que maneja son el servido en crudo, el marinado, la brasa, el salteado, la fritura, el guiso, el hervido, el horno y la salazón. No deja ni un palo sin tocar.

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La carta se divide en "El Mar", "Especiales del Mar", "Especiales de caviar", "Algo de carne" y el "Para acompañar". Pero también cuenta con una carta de cócteles para pasar al terreno de las tumbonas. Por mencionar algunas joyas, se va de los 300 euros el kilo de tronco de cigala a la brasa, de los 200 la cigala ibicenca (a la brasa con bilbaína o con salmorreta, huevos fritos y patatas) y no puede estar mal el arroz caldoso de bogavante, a 180 euros el kilo. Para acompañar, el caviar más caro de la carta es el Amur Beluga, con guarnición y por 320 euros los 100 gramos.