La Inteligencia Artificial no solo sirve para copiar, también empodera

Se habla mucho estos días de ChatGPT, la herramienta de Inteligencia Artificial que redacta con solvencia todo lo que uno le pida y que está causando quebraderos de cabeza en institutos y universidades (al hacerle los “deberes” a los estudiantes, crea todo un dilema con el plagio); pero no todo tiene por qué ser malo y son muchos los que están convencidos de que estos avances tecnológicos pueden traer también grandes ventajas al sector educativo.

Que se lo pregunten al alumnado de ESO del colegio Monterrey, en Vigo, que ha empezado el año probando una aplicación que se sirve de Inteligencia Artificial y Realidad Virtual para transformar los nervios al hablar en público y convertirlos en energía que les empodere. 

En concreto, lo que hace la herramienta es crear una experiencia inmersiva con VR durante la que los jóvenes se sitúan en un escenario virtual con público a modo de entrenamiento, y, después, le devuelve un feedback personalizado gracias a la IA.

“Con las gafas, ves una clase en la hay algunas personas mascando chicle o a las que parece que no les importa lo que dices. Te pone en situación y tú vas hablando de lo quieras”, cuenta Candela Mato, de la clase de 3º de la ESO y una de las alumnas encargadas de validar el prototipo durante una lluvia de ideas que ha resultado ser muy fructífera, con especial mención a la posible adaptación de la app a casuísticas como el Déficit de Atención, propuesta por una alumna de 4º.

Ganar “tablas” para la vida real

También su compañero Andrea Mato formó parte de este particular focus group: “La prueba con las gafas fue muy interesante. Creo que a una persona que sea más introvertida o que, por ejemplo, llegue nueva a un colegio, puede resultarle mucho más fácil hablar si sabe que nadie real le va a juzgar”. “Al final, es diferente y te metes dentro del papel”, apuntilla sobre esta especie de simulación que, repetida varias veces a lo largo del curso, nos va a dar tablas para hacer frente a una situación real. 

Y es que, hoy en día, las soft skills se consideran cada vez más fundamentales tanto para la vida laboral como personal: “En el colegio, somos conscientes de la importancia de la expresión oral y de hecho queremos introducir la asignatura de oratoria para impulsarla y resolver ciertas carencias. Por eso cuando nos eligieron para este proyecto nos pareció una gran oportunidad”, explica la profesora de Audición y Lenguaje Adela Domínguez sobre la iniciativa, que volverá pronto al centro escolar para ser testada, ahora ya sí, con el prototipo final y las distintas sugerencias de los jóvenes del centro implementadas.