VIDA Y HOGAR

El truco que tienes que conocer para limpiar las persianas una vez al año y dejarlas como nuevas

Esto es lo que tienes que hacer

Una persiana

Una persiana / P. X.

R. P.

En las tareas del hogar hay actividades que son más agradecidas que otras. Incluso las hay que son más peligrosas que otras. Y luego están esas labores aborrecibles que siempre dejamos para el mes que viene y nunca llega el momento de afrontarlas. Limpiar las persianas es una de ellas, porque reclama un gran esfuerzo y un tiempo considerable. Por ello, es importante conocer todos los trucos caseros que puedan agilizar esta faena.

No es lo mismo limpiar la persiana por fuera que por dentro, especialmente si no tenemos acceso a la persiana por la parte exterior. Además, hay que tener en cuenta de qué material está hecha nuestra persiana: madera, PVC, plástico, aluminio... La naturaleza de cada persiana reclama un tipo de producto diferente.

Por otra parte, el color también será determinante a la hora de limpiar ya que el blanco, que es uno de los colores más típicos en este elemento, resulta un poco más dificultoso.

Con un poco de jabón neutro y agua limpia podremos sacar brillo a nuestras persianas independientemente de su material. Sin embargo, cuando la suciedad está muy pegada, se pueden utilizar productos más específicos (que no sean abrasivos) o hacernos con una vaporeta.

Pero entre los expertos en limpieza estos meses está calando una técnica bastante fácil. Se trata de abrir con cuidado el cajetín de la persiana y de ir limpiándola poco a poco por dentro con agua caliente y un poco de lavavajillas (Fairy por ejemplo). Así conseguiremos que estén como nuevas sin demasiado esfuerzo.

Eso sí: si tienes una terraza o vives en un bajo va a ser más fácil porque vas a poder hacerlo por fuera que es mucho más fácil. Lo que no es verdad por mucho que se repita es que el agua de la lluvia limpie las persianas: al contrario, casi las estropea más.