Dinamarca se diluye y Australia salta hacia los octavos

Australia vuelve a estar en unos octavos de final de una Copa del Mundo. El equipo de Graham Arnold, el a priori menos favorito, supo jugar con los nervios de Dinamarca. Inoperante en ataque, los europeos chocaron una y otra vez en la ordenadísima zaga oceánica. Leckie, en un gol a lo ‘Juan Palomo’, dio el pase a los ‘socceroos’.

Era la sexta participación de Australia en un Mundial, la quinta consecutiva. Hasta la fecha su techo estaba en los octavos de 2006, pero ahora en Qatar tiene la opción de rebasar lo que ya es todo un éxito para el combinado oceánico. Todo lo contrario que Dinamarca, candidata al premio de mayor decepción. Tras alcanzar las semifinales de la pasada Eurocopa, donde tuvo la final a su alcance, los de Kasper Hjulmand no se presentaron en Doha. Hace las maletas con solo un punto en tres partidos y siendo inferior en todos los partidos.

En la decisiva jornada, el elenco europeo fue un manojo de nervios. Mucha posesión pero poca profundidad. Jensen probó a Ryan en los compases iniciales y poquito más. Ni el descanso le sentó bien. Como prueba, la concesión de dos córners en apenas un minuto, el primero en una salida de balón para olvidar.

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Australia esperaba su ocasión y la tuvo a la hora de juego. Recuperación en campo propio con Dinamarca instalada en su territorio y llegó el momento Leckie. El delantero del Melbourne City aprovechó un balón al espacio de McGree y mareó a Maehle antes de cruzar el balón a Schmeichel.

Tenía media hora por delante el conjunto danés para marcar los dos goles que necesitaba. Estuvo muy lejos de lograrlo. Pudo haberlo cambiado todo un penalti sobre Dolberg, uno de los revulsivos de Hjulmand, pero el árbitro corrigió rápido su decisión al estar el punta del Sevilla en fuera de juego. Duro varapalo para Christensen, Eriksen, Braithwaite y compañía.