Tres activos en los que invertir si no quiere ver mermado su capital con la inflación

La inflación elevada parece que ha venido para quedarse. La semana pasada conocimos que la inflación en la Eurozona subió a niveles récord y, por el momento, nada anticipa que vaya a bajar de la forma tan rápida como ha subido. Sólo en un año ha subido más de cinco puntos porcentuales. La clave ahora es qué activos tener para evitar una merma en el poder adquisitivo.

A menudo si se pregunta a los expertos por un activo que proteja contra la inflación la primera respuesta es clara: el oro. Según datos del Consejo Mundial de Oro con datos que llegan hasta 1971, el oro ha rendido un 15% anual de media cuando la inflación se ha situado en niveles superiores al 3% y sólo algo más del 6% cuando los precios están por debajo de ese nivel.

Este año, el oro cotiza ligeramente en negativo. En el más corto plazo, a pesar de la fortaleza que había mantenido a tenor de la revalorización del dólar, las actas de la Reserva Federal no han servido de estímulo para el oro, ya que el dólar ha recuperado rápidamente sus pérdidas iniciales y ha eliminado las ganancias del metal amarillo. El bono estadounidense a 2 años no está demasiado lejos de sus recientes máximos y el bono a 10 años también ha subido en los últimos días, lo que podría seguir presionando al oro.

Sin embargo, “la inversión sigue en juego, lo que significa que parece que sigue habiendo una desconexión entre lo que esperan los operadores de bonos y lo que hacen los operadores de acciones. Si la narrativa de la recesión comienza a pesar más en los mercados financieros, el oro podría hacer otra carrera hacia los 1.800 dólares y quizás incluso tener más éxito esta vez”, reconoce Craig Erlam, analista de mercado sénior, Reino Unido y EMEA, OANDA.

En segundo lugar están los activos inmobiliarios cotizados o REITs, fondos de inversión inmobiliaria. Un tipo de activo que ha batido a la inflación en un 68% de las ocasiones. ¿El motivo? Este tipo de activos posee activos inmobiliarios que van incrementando su precio, tanto de venta como del alquiler, según se incrementa la inflación.

Además, en los últimos meses el sector se ha visto impulsado por una creciente demanda de particulares que deciden invertir en vivienda con el único objetivo de invertir sus ahorros. Esta coyuntura económica ha situado al sector inmobiliario, y en concreto a la vivienda, como un valor refugio y como una inversión muy atractiva y de seguridad frente a la subida generalizada de los precios, según el Observatorio de Aedas Homes. Y es que según datos del Banco de España, la rentabilidad de la vivienda (rendimiento por alquiler más variación de precios) asciende al 10%. Un porcentaje muy superior a los Bonos del Estado a 10 años (2,6%) y los depósitos que, aunque empiezan a despuntar, apenas ofrecen rendimiento.

A este sector pertenecen las compañías con altas barreras de entrada y fuerte poder de fijación de precios. Uno de los must, a juicio de los gestores de fondos, en un entorno de precios al alza. Pero ¿y si se piensa al contrario? Hay compañías de distribución de alimentos de consumo básico con bajos precios que seguramente vean incrementada su demanda ante una previsible reducción del consumo (o de los gastos) por parte de los consumidores (la inflación no está subiendo de la misma forma que los salarios).

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El consultor financiero Ismael de la Cruz cita el caso de la estadounidense Dollar General, una compañía que vende a precios más bajos que nadie con multitud de productos, desde consumibles hasta productos para el hogar pasando por prendas de vestir, alimentos y productos de salud y belleza.  

Con unas ventas y beneficio que se han situado por encima de lo esperado, la proyección para el conjunto del año le ha permitido elevar sus propias previsiones. De los 28 analistas que cubren actualmente el valor, 21 optan por recomendar “compra” o “fuerte compra” del valor frente a 7 que recomienda mantener y 2 que “venden” la acción.