LOTERÍA DE NAVIDAD

Esta es la terminación más buscada para la Lotería de Navidad en Alcalá: está agotada desde agosto

A pocos días del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad 2024, hay largas colas en las administraciones de Alcalá de Henares desde primera hora de la mañana para hacerse con un décimo

Alcalá de Henares se prepara para la Lotería de Navidad

Alcalá de Henares se prepara para la Lotería de Navidad / José Javier Viera

En Alcalá de Henares ya huele a Navidad. La localidad alcalaína, engalanada para una de las fiestas más especiales del año, cuenta con una gran programación navideña y presenta un ambiente cargado de ilusión por sus calles. 

Muestra de ello son las grandes colas que se forman desde primera hora de la mañana en las administraciones de lotería. El sorteo del día 22 es una fecha marcada en el calendario por los vecinos: "Hay mucho movimiento. Cada año más. A la gente le gusta mucho jugar porque es un sorteo muy familiar", declaran desde las administraciones.

Las administraciones tienen grandes colas desde primera hora de la mañana

Las administraciones tienen grandes colas desde primera hora de la mañana / José Javier Viera

Aunque admiten que la venta online les “ha perjudicado” y son una “gran competencia”, reconocen que "a casi todo el mundo le gusta tener su décimo en físico y elegirlo".

El 13, el número más buscado en Alcalá

Y, pese a que cada cliente quiere un número en específico, hay terminaciones que son, con diferencia, las más solicitadas. "El 13 se agota enseguida. En agosto ya no tenemos. También gustan mucho los impares como el 5 o el 7", apuntan. 

Desde julio y hasta el día previo de la lotería hay una amplia demanda por los décimos de Navidad. La ilusión por el sorteo, "el más jugado del año con diferencia", provoca que se vendan prácticamente todos. Hasta los números más "feos".

"Hay mucha gente que va a por ellos porque llaman la atención", declaran desde la administración 10. "Eso da igual, al final todos están en el bombo", asevera un cliente.

"Los números "feos" los vendemos como 'números atrevidos' y los clientes se lanzan a por ellos. E incluso los pasan por nuestra herradura (el amuleto del local) para tener suerte", explican desde Los Caballeros de la Suerte, la administración nº3.

El 'amuleto' de los Caballeros de la Suerte, la administración nº3

El 'amuleto' de los Caballeros de la Suerte, la administración nº3 / José Javier Viera

En La Cervantina no cesan las largas colas. La administración repartió El Gordo el año pasado (88.008) y desean que la fortuna les vuelva a sonreír en 2024. "Fue un día muy especial, la tercera vez que repartimos un premio. Este año la gente compra muchos décimos aquí".

La Cervantina dio El Gordo en 2023

La Cervantina dio El Gordo en 2023 / José Javier Viera

"Compro siempre aquí y el año pasado no tuve suerte. Espero tenerla este año", afirma Juana, cliente habitual. Aunque Gregorio, su marido, es más reacio a la Lotería por un 'trauma' del pasado.

"Hace muchos años me tocó un premio de 35.000 pesetas, pero se me pasó el plazo para reclamarlo y no pude recogerlo. Desde entonces le he cogido manía".

El Gordo, el gran deseo de vendedores y clientes

Repartir el primer premio es el gran deseo para las administraciones. “Abriremos por la mañana por si acaso, pese a ser domingo. Aunque no es lo mismo darlo a que te toque, sería una alegría inmensa. Abriríamos muchas botellas de champán y lo celebraríamos con todo el barrio”, afirman desde la Administración nº8, que saltó a la fama en toda España por repartir el segundo premio de la Lotería de Navidad en 1988.

Recuerdos del segundo premio de 1988 en la Administración nº8

Recuerdos del segundo premio de 1988 en la Administración nº8 / José Javier Viera

“Hemos dado muchos premios pero El Gordo es nuestra cuenta pendiente. Me encantaría darlo para colgar un cartel enorme”, exponen desde la Administración nº3. Otras, como la número 6, verán el sorteo desde casa, pero guardarán “sidra en las neveras por si acaso hubiera que abrir”.

El gasto medio es muy variado. Víctor, quien admite que aprovecharía el premio para regalar un viaje a sus padres, se gasta cerca de 400 euros y, aunque solo le haya “tocado una pedrea” juega porque es un “sorteo muy especial y familiar”. 

“A mi familia nos llaman los loteros porque compramos mucho. Nunca nos ha tocado nada pero la ilusión nunca se pierde”, reconoce Dolores.

Gabriel tuvo la suerte de que le tocase la Lotería de Navidad hace 44 años. Y entre lágrimas, visiblemente emocionado, afirma que “no dudaría en repartirlo entre sus hijos para ayudarles”.