OBRAS EN MADRID

La retirada de amianto en una nave municipal indigna a los vecinos de Retiro

Desde el Ayuntamiento se asegura que los trabajos cumplen todos los requisitos legales

La retirada de amianto en una nave municipal desata la inquietud vecinal en Retiro

Madrid

La inminente retirada del techo de amianto de una gran nave en el corazón de un patio de manzana del barrio de Pacífico ha encendido las alarmas entre los residentes. La Asociación Vecinal Retiro Norte ha solicitado al Ayuntamiento de Madrid la paralización de las obras hasta que se garantice "la seguridad plena del entorno" y se informe de manera clara y directa a toda la vecindad, que asegura haber sido avisada apenas cinco días antes del inicio previsto de los trabajos, el lunes 7 de julio.

El aviso ha llegado en forma de una escueta nota distribuida por la empresa responsable, en la que se recomendaba a los vecinos mantener las ventanas cerradas, no tender ropa al exterior y seguir las indicaciones de los operarios. Nada en el comunicado mencionaba el amianto, material cuya manipulación está estrictamente regulada debido a su peligrosidad.

La obra, que durará unas tres semanas, afecta a una nave ubicada en un solar de propiedad municipal. Según la asociación vecinal, el consistorio había previsto trasladar a ese espacio a empleados del Área de Política de Vivienda. Sin embargo, finalmente se les ha autorizado el teletrabajo durante el periodo de desamiantado. "Es personal técnico que conoce de primera mano los riesgos del amianto y no han querido exponerse. A los vecinos, en cambio, solo nos han colgado un cartel", denuncia Ángeles Rodríguez, presidenta de la asociación.

"No hay riesgo para la salud"

Desde el Ayuntamiento se asegura que los trabajos cumplen todos los requisitos legales. La empresa adjudicataria, especializada en este tipo de intervenciones, será la encargada de retirar el material con el plan de desamiantado autorizado por la Comunidad de Madrid. Añaden además desde la institución, que se trata de "amianto no friable", lo que, según el consistorio, reduce considerablemente el riesgo de dispersión de fibras. "Todo se hará encapsulado, conforme a la normativa. No hay riesgo para la salud", han indicado fuentes del Área de Obras y Equipamientos.

A pesar de estas garantías, el malestar en el vecindario crece. Las comunidades colindantes se están organizando de cara a la próxima Junta Municipal del distrito de Retiro, el martes 8, en la que esperan exigir mayor transparencia y participación en las decisiones que les afectan directamente.

Cabe recordar que el uso de amianto está prohibido en España desde 2002 por su alta toxicidad. Su manipulación sin medidas adecuadas puede implicar riesgos graves para la salud, como el desarrollo de patologías pulmonares o cáncer si las fibras se inhalan durante su retirada.