CITA POLÍTICA

Todo son sonrisas en el congreso del PP mientras se guarda "un segundo de silencio" por Sánchez

La segunda jornada de la cita popular transcurre triunfal para Feijóo entre churros con chocolate y la intervención de un cómico para hablar "del fresco"

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo (d), y el primer ministro portugués, Luís Montenegro.

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo (d), y el primer ministro portugués, Luís Montenegro. / FERNANDO VILLAR- EFE

Víctor Rodríguez

Víctor Rodríguez

Madrid

Con churros con chocolate, las ponencias de estatutos y política aprobadas por unanimidad, la presencia de líderes europeos y un cómico haciendo escarnio de Pedro Sánchez sobre el escenario, la segunda jornada del 21 Congreso Nacional del PP transcurre con absoluto triunfalismo en el pabellón 10 del recinto ferial de Ifema, en Madrid. Todo son sonrisas en el cónclave popular mientras en Ferraz se celebra un más que complicado comité federal.

El tono de la cita socialista, que ha comenzado con la renuncia de quien había sido designado para ser adjunto a la secretaría de Organización, Paco Salazar, después de que elDiario.es publicara testimonios que le acusan de acoso sexual, ha terminado de apuntalar uno de los argumentos que se venía apuntalando desde cada voz del Partido Popular en las últimas semanas: mientras que la cita conservadora serviría para "rearmar" su proyecto en torno a Alberto Núñez Feijóo, el comité federal socialista iba a mostrar a una formación "en descomposición".

Ha contrapuesto la situación el flamante nuevo secretario general del partido, Miguel Tellado, al referirse desde la tribuna al encuentro socialista como "comité funeral con Sánchez de cuerpo presente". Poco antes, en los pasillos, su antecesora, Cuca Gamarra, ironizaba con que en el PSOE los cargos "no llegan ni a ser nombrados". "El problema no es el Partido Socialista, el problema es el sanchismo", repetían a su llegada al congreso los barones populares: Fernando López Miras, Jorge Azcón, Juan Moreno... "Cuanto antes se marche Sánchez, antes tendrá oportunidad el Partido Socialista de regenerarse y de volver a ser un proyecto político viable y no estar siempre arrinconado por problemas de corrupción, de tratos con la prostitución, de tratos raros con las mujeres", ha asegurado el presidente andaluz.

Ni siquiera la situación del presidente valenciano, Carlos Mazón, expuesto por la gestión de la dana, y que llegaba a la segunda jornada de manera discreta, sin hacer declaraciones, recibido por los tímidos aplausos de seis jóvenes simpatizantes, hace mella en la euforia en los asistentes a la cita popular, que si ayer eran recibidos en el puesto del PP de la Comunidad de Madrid con fresas de Aranjuez "porque nos gusta la fruta", hoy tenían en la misma barra churros y chocolate.

Sigue a buen ritmo la venta de camisetas con lemas como "Son las cinco y no he comido" o "Muy españoles y mucho españoles" ideadas por Nuevas Generaciones, de la misma manera que se están vendiendo también bastantes libros de José María Aznar en el espacio de Faes. El duro discurso del expresidente ayer, en que aseguró que "si pactas con delincuentes, no te extrañe acabar en la cárcel" gustó en la militancia.

Tan relajado es el ambiente entre los populares que incluso se han permitido la contratación de un monologuista para hacer mofa de la situación en el PSOE. Entre el debate de las ponencias y la intervención en el congreso del primer ministro portugués Luís Montenegro, el cómico canario Abraham Gómez Rosales ha subido al escenario durante un cuarto de hora. "Quiero hablar de las bondades de Pedro porque lo está pasando fatal. Como hace calor, hay que hablar del fresco", ha dicho. Ha vuelto a aparecer tras la intervención de Alicia García, portavoz popular en el Senado, antes de que se levantara la sesión de la mañana, para pedir, con una rosa en la mano, un segundo de silencio por Pedro Sánchez.