SALUD

El brote de salmonela deja casos en Madrid: cómo detectar si estás intoxicado y cómo actuar

Una intoxicación alimentaria en un festivo gallego provoca más de un centenar de afectados

Una tortilla en mal estado puede provocar salmonelosis.

Una tortilla en mal estado puede provocar salmonelosis. / EPE

Madrid

Un brote de salmonelosis registrado en un festival gallego el pasado fin de semana ha dejado ya centenar y medio de afectados procedentes de toda España. Además de Galicia, Castilla y León, Málaga, Asturias y Madrid son los otros territorios que cuentan con casos procedentes de esta cita musical. La Xunta apunta al origen bacteriano como detonante de esta intoxicación tan temida en época estival.

Una tortilla servida en este Trasan Fest celebrado en A Coruña parece ser el origen del problema sanitario. La investigación, que se encuentra en marcha, dilucidará la procedencia de la comida, así como su proceso de elaboración y conservación. Los ingresos hospitalarios ya ascienden a 41 personas.

¿Qué es la salmonelosis?

La salmonelosis es una infección bacteriana causada por la Salmonella, que afecta principalmente al tracto intestinal y puede llegar a provocar gastroenteritis. Se transmite mediante el alimento o agua contaminados. La carne de ave, los huevos, la leche no pasteurizada, las frutas y verduras mal lavadas o la comida tratada con utensilios contaminados son los principales agentes transmisores.

Para su prevención, es crucial mantener medidas de control en todas las etapas de la cadena alimentaria. La Salmonella puede multiplicarse en un amplio rango de temperaturas, desde 5 a 45 grados, siendo la temperatura óptima 35-37 grados, detalla la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan).

¿Cómo detectar un caso de salmonelosis?

Los principales síntomas que pueden advertir la presencia de salmonelosis son la diarrea, el dolor abdominal, las náuseas, la fiebre y los vómitos, que pueden aparecer hasta 72 horas después de la infección.

Si los síntomas son leves, suele bastar con mantener buena hidratación y reposo. Sin embargo, si la situación es más grave, conviene buscar atención médica inmediata. Especialmente, si la persona afectada pertenece a un grupo de riesgo: niños, ancianos, personas con problemas inmunitarios, etc.