El Ayuntamiento de Madrid defiende sus toldos en la Puerta del Sol y recuerda que es una estructura BIC: "No se puede plantar ni un árbol"

Dos años después de finalizar la reforma integral de la emblemática plaza de Sol, el Ayuntamiento de Madrid ha concluido las obras con la instalación de 32 toldos con los que resguardar a los ciudadanos del calor. Sin embargo, la nueva instalación no ha estado exenta de polémica y quejas por parte de los viandantes, que apuntan a que se trata de una plaza sin árboles y a que estas lonas no cumplen su papel.

Desde el Ayutamiento de Madrid, la delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, ha defendido su modelo de toldos en la Puerta del Sol, recalcando que se trata de un Bien de Interés Cultural (BIC). Además ha resaltado la inviabilidad de modificar la estructura para implementación de árboles, dejando una plaza de cemento en su lugar.

"No se puede plantar ni un árbol"

En cuanto a la funcionalidad de los toldos, García Romero ha querido subrayar también que estos cuentan con "una enorme calidad y una resistencia importantísima", y que su diseño ha sido avalado por ingenieros de caminos.

La delegada ha señalado que las instalaciones han pasado por "todo tipo de controles de la Comisión de Patrimonio", hasta el punto de que "hasta la propia chincheta del anclaje se revisaba más o menos a fondo".

Finalmente ha destacado que los toldos son desmontables y se han instalado "a petición popular", contando con un diseño n diseño aprobado mediante concurso del Colegio de Arquitectos, y que en cualquier caso, "con toldos o sin toldos, en la Puerta del Sol va a hacer calor a 40 grados, pero al menos ahora hay zonas de sombra donde se reduce algo la temperatura".