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Thomas Stork, nuevo chef Mandarin Oriental Ritz: "No venimos a seguir tendencias, venimos a crear historia en Madrid"

El chef alemán Thomas Stork se une a Quique Dacosta para revolucionar la alta gastronomía de este hotel emblemático de la capital situado en Triángulo del Arte

Thomas Stork, nuevo chef ejecutivo de Mandarin Oriental Ritz, Madrid.

Thomas Stork, nuevo chef ejecutivo de Mandarin Oriental Ritz, Madrid. / Cedida

Andrea San Martín

Andrea San Martín

Madrid

Mandarin Oriental Ritz, Madrid, ha anunciado la incorporación de Thomas Stork como nuevo chef ejecutivo del emblemático hotel, donde formará parte del equipo liderado por Quique Dacosta, director gastronómico del establecimiento. Esta alianza promete una fusión excepcional entre tradición, innovación y excelencia culinaria en uno de los escenarios más prestigiosos de la alta hotelería española. "El Ritz es un lugar emblemático, una casa con una historia enorme y un nivel excepcional que merece el máximo respeto", confiesa a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. Y trabajar bajo la dirección del tres estrellas Michelin, con quien comparte una visión clara y coherente de la alta gastronomía, ha hecho que su llegada haya sido aún más especial.

Desde su Bavaria natal la trayectoria de Thomas Stork está marcada por el rigor, la dedicación y una visión internacional de la gastronomía. Stork se formó en la legendaria Residencia de Heinz Winkler, en Alemania. "Conservo los valores de mi Baviera natal: calidez, tradición y oficio. Tras más de treinta años fuera, el mundo me ha enseñado tres claves para cualquier equipo: buen humor, humildad y conocimiento", afirma Stork. Para él, la familia es el motor fundamental que guía muchas de sus decisiones, reflejo de una vida que ha combinado la pasión por la cocina con el compromiso personal.

Posteriormente, asumió la supervisión gastronómica del Hotel Las Dunas 5* GL en Estepona (Málaga), consiguiendo allí su primera estrella Michelin en 2001. Desde sus inicios, ha estado vinculado a proyectos de alta cocina con proyección internacional, lo que ha consolidado su perfil como un chef con una mirada amplia y exigente. También ha sido el chef ejecutivo de AIDA Cruises, la principal compañía alemana de cruceros, donde implantó y consolidó restaurantes gastronómicos en sus barcos, obteniendo reconocimientos internacionales por su labor. En Marbella, fue una figura clave en hoteles emblemáticos como Los Monteros y Puente Romano. En este último permaneció once años al frente del equipo culinario y fue reconocido como Mejor Chef de Andalucía en 2013. Bajo su liderazgo, Puente Romano acumuló premios nacionales como Mejor Resort de España (2016) y Mejor Hotel Gastronómico (2019).

Palm Court en Mandarin Oriental Ritz Madrid.

Palm Court en Mandarin Oriental Ritz Madrid. / Cedida

En 2022, Stork dio un giro hacia la formación académica al asumir la dirección culinaria de Le Cordon Bleu México, coordinando ocho escuelas universitarias integradas en la red de Universidades Anáhuac. Durante dos años, unificó los criterios académicos con los estándares europeos para preparar a nuevas generaciones de chefs con una base sólida y actual. Ahora, de regreso en España, aporta toda esta experiencia al equipo donde ve cada espacio culinario como una oportunidad única para expresar hospitalidad a través de la gastronomía: "Palm Court debe ser un referente de elegancia atemporal, con platos que respeten la tradición pero con un toque contemporáneo. El Jardín invita a una cocina más fresca y desenfadada, conectada con el entorno y la temporada. In Room Dining es la máxima expresión de confort y detalle, donde cada plato debe sentirse hecho a medida. Banquetes representa el arte de la coordinación y el trabajo en equipo, sin perder el alma del sabor. Champagne Bar es puro refinamiento: un espacio para celebrar, sorprender y mimar al cliente con pequeños gestos bien pensados", sostiene.

Misma filosofía culinaria

El chef alemán también comparte su particular visión sobre la gastronomía del Ritz y el trabajo con Quique Dacosta: "Trabajar con Quique es fácil porque su visión de la alta gastronomía y la mía coinciden. El lujo en la comida es una expresión que debe estar al mismo nivel que el servicio y el entorno del hotel. Aquí, en un lugar tan emblemático, todo debe reflejar calidad y respeto por la tradición". Además, destaca la diversidad de conceptos que gestionan en el Ritz, desde el restaurante clásico con reinterpretaciones contemporáneas, hasta un bar más casual con bocados de alta calidad para compartir. "Cada universo gastronómico tiene un enfoque distinto, y eso es parte de la riqueza del hotel", añade.

Sobre la gestión de una cocina que atiende a paladares internacionales, Stork subraya que la clave está en la armonía del plato. "Si el plato es armónico y equilibrado, gustará a casi todo el mundo, independientemente de sus orígenes o cultura. La cocina española es la base del Ritz, con un claro respeto por la tradición y la calidad de los ingredientes, combinada con una influencia francesa muy presente, pero siempre adaptada a un estilo mediterráneo y suave".

En lo personal, entre sus platos favoritos para el verano destacan las ensaladas frescas, crujientes, con toques de verduras asadas y hierbas mediterráneas, además del clásico steak tartare, un plato que disfruta tanto en casa como en su cocina profesional. "Me gusta preparar el steak tartar con un toque personal, sin anchoa pero con un poco de carne encima, cebollino en lugar de cebolla para un sabor más fresco, y siempre un buen toque picante y mostaza, que es casi una tradición alemana", explica.

Tras tres meses al frente de las cocinas del Mandarin Oriental Ritz, Thomas se muestra plenamente integrado y satisfecho con su equipo multicultural, que comparte un idioma común: el español. "No venimos a seguir tendencias, venimos a crear historia en Madrid", explica a este medio teniendo muy presente que la cocina es trabajo en equipo y que sin ellos no sería posible conseguir que cada comanda salga a gusto de los comensales. La decisión de asentarse en Madrid también está muy ligada a su familia, especialmente a la educación de sus hijos, que combinan el alemán y el español en su día a día.

Thomas Stork llega así a uno de los grandes referentes de la hostelería europea con la ambición de continuar la tradición de excelencia del Mandarin Oriental Ritz, integrando su experiencia internacional, su respeto por la tradición y su visión moderna de la alta gastronomía para ofrecer a sus comensales una experiencia única y memorable.