QUEDÓ ANTEPENÚLTIMA

Melody se desahoga tras la espantada de Eurovisión: "Lo que menos me ha gustado es no haber podido dar todo como artista"

La representante de España se sincera sobre el paso de 'Esa diva' por Basilea en una rueda de prensa salpicada de reproches a RTVE

Melody, este lunes momentos antes de su rueda de prensa.

Melody, este lunes momentos antes de su rueda de prensa. / José Oliva (EP)

Pedro del Corral

Pedro del Corral

Madrid

Que Melody huyese de Basilea nada más terminar Eurovisión levantó las alarmas. Fue tal su espantada que, deprisa, sin apenas comunicación, decidió incumplir la agenda que tenía prevista con RTVE. Hubo quien la acusó de mal perder tras quedar antepenúltima con Esa diva, desvelando discusiones y reproches en el camerino de España. Sin embargo, la artista no se ha pronunciado al respecto hasta hoy. “Los artistas muchas veces tenemos dificultades que nadie sabe. Me siento orgullosa de esta actuación, de todo lo que he dado”, ha explicado en la rueda de prensa que, de normal, como en años atrás, suele celebrarse al acabar el festival en Prado del Rey. Ella, en cambio, ha necesitado nueve días para saber qué decir. Pues, aunque su discurso sea hoy conciliador, sus gestos mostraron otra cosa entonces. Melody habla por fin. Más alto que claro, eso sí.

“No todo ha sido un camino de rosas. Antes de terminar, comuniqué que necesitaba unos días de descanso. Estaba agotada. Quería estar con mi hijo, retomar mi vida. Me ha sorprendido el revuelo que se ha montado. Sobre todo, cuando se habla tanto de la conciliación familiar. Se han dicho cosas que no son verdad, como que había echado a gente del camerino. Nunca lo he hecho ni lo haré. Mi calidad humana no me lo permite”, ha comentado. Los 37 puntos (27 del jurado y 10 del televoto) que recibió la colocaron en la misma posición que alcanzó Soraya Arnelas en 2009 y Blas Cantó en 2021. De las cuatro participaciones procedentes del Benidorm Fest, la plataforma donde hoy se escoge al representante de España en Eurovisión, ella ostenta el peor resultado: a la tercera plaza de Chanel (2022) hay que sumar la decimoséptima de Blanca Paloma (2023) y la vigesimosegunda de Nebulossa (2024).

De voz imbatible y escenografía caótica, su mayor hándicap han sido las expectativas generadas en torno a ella. Con otro tema hubiese barrido. Pero, por más vueltas que le dio, Esa diva no estuvo a la altura de una intérprete prometedora. Una lástima: de otra forma, quizá, el puesto 24 que logró hubiera sido mucho mejor. No obstante, aunque el Micrófono de Cristal lo levantó Austria, hay que reconocerle la pasión dedicada. Hacía tiempo que una candidatura no despertaba tal interés. De aquellos barros, estos lodos: “No todo vale por la audiencia. Sé que hay que rellenar contenido, pero antes deben informarse. Hay que respetar siempre al artista. Lo he dado todo y he estado las horas que han hecho falta”.

RTVE decide

No era una opción ganadora. Y RTVE lo sabía, de lo contrario no hubiese tocado la producción musical, la dirección artística y la puesta en escena. De haber contado con un pack perfecto, se hubiera mantenido. Y no fue así. “El objetivo es llegar al gran público con una versión más internacional. Para ello, se han potenciado al máximo los elementos identificativos de la canción”, explicó la corporación en un comunicado. Se optó por no respetar la propuesta votada en el Benidorm Fest y eso dice bastante. Así que Melody hizo lo que pudo. Su particular Noche de fiesta, bien chabacana, poco efectiva, no se entendió en Serbia, Georgia, Noruega… Querían más ruido, más foco, más estruendo. Lo que no hubo fue más votos.

"Todo es mejorable. Personalmente, yo hubiese hecho otra escenografía más potente. Una vez ganas el Benidorm Fest, la candidatura pasa a RTVE y ellos deciden. Yo hubiera planteado algo más impactante, pero tampoco es motivo para obtener esa puntuación. Hay cosas que no tienen nada que ver con la música sobre las que no voy a pronunciarme”, ha sostenido la artista, que se ha mostrado cercana y positiva en todo momento. Ahora bien, no ha dejado pasar la oportunidad de lanzar una pullita a la cadena: " Lo que menos me ha gustado es no haber podido darlo todo como artista". Sobre si volvería en un futuro: depende. "Si es por el público, sí. Pero tendrían que cambiar las condiciones".

Polémica sobre Israel

Políticamente hablando, el caso de Melody también ha sido controvertido. Hasta el punto de ser un argumento para defender su fracaso. En la primera semifinal, segundos antes de la actuación de Israel, los comentaristas, Julia Varela y Tony Aguilar, informaron sobre las víctimas de Gaza y lanzaron un mensaje de paz. “Las víctimas de los ataques israelíes superan ya las 50.000 y, entre ellas, más de 15.000 niños y niñas”, dijo ella. “Esta no es una petición contra ningún país. Es una llamamiento por la paz, la justicia y el respeto de los derechos humanos acorde con la vocación integradora y pacífica del festival”, añadió él. Un gesto que llevó a la Unión Europea de Radiodifusión (UER) a amenazar con multa a RTVE en caso de repetirlo. En la final, la cadena se limitó a poner el siguiente mensaje: “Frente a los derechos humanos, el silencio no es una opción”.

Mensaje emitido por RTVE durante la final de Eurovisión.

Mensaje emitido por RTVE durante la final de Eurovisión. / ARCHIVO

Hay quien ha achacado el mal resultado de Melody a esta petición: el Partido Popular, por ejemplo, publicó un tuit en el que culpaba directamente a Pedro Sánchez de ello. "De temas políticos no puedo hablar porque lo tengo prohibido por contrato, sólo quiero que haya amor y paz". No obstante, ha mostrado su visión al respecto: "Me gustaría que se respetase el origen por el que se creó Eurovisión: unir a los pueblos a través de la música. Deseo que todos los conflictos del mundo se aclaren. Nos merecemos disfrutar de la vida. Ese es mi rol como artista. Quería dejarlo claro: los derechos de las personas están por encima de todo"