Cómo los abuelos salvan la economía de Madrid: "En contra de lo que se piensa, son más cuidadores que objeto de cuidados"

Más de 2.170.000 millones de madrileños conforman el sector sénior, que comprende a todas aquellas personas entre los 55 y 75 años. Se trata de uno de los pilares fundamentales para la economía y la sociedad de la capital, según el I Barómetro del Consumidor Sénior de la Comunidad de Madrid, elaborado por el Centro de Investigación Ageingnomics, de Fundación Mapfre. El objetivo detrás de esta radiografía no es otro que analizar los hábitos de consumo y comportamiento de este grupo de edad, que a día de hoy representa el 32% de la población total en la región, además del 60% del gasto y el 25% del PIB a nivel nacional. Según desvela este estudio, la gran mayoría de ellos siguen en activo, son capaces de ahorrar a final de mes, son propietarios de las viviendas que habitan y capaces de ayudar económicamente a su entorno. Además, gran parte de la agrupación consigue jubilarse a los 65 años o antes, continúan conduciendo, hacen ejercicio regularmente y están presentes en redes sociales. 

Un perfil que, normalmente, pasa desapercibido, pero que supone un pilar fundamental en varios sectores de la capital. “Este barómetro respalda las tendencias observadas a nivel nacional y algunas diferencias. Los madrileños son más propensos a viajar por turismo: un 85% planea hacerlo, frente al 77% en el conjunto nacional. También tienen un nivel de participación superior en actividades culturales y son más activos en internet que el resto de España. En contra de lo que a menudo se piensa, los séniors son más cuidadores que objeto de cuidados”, ha señalado el director del centro de investigación, Juan Fernández Palacios, durante su presentación. 

La generación plateada

Así mismo, Fernández ha descrito al consumidor medio de la Comunidad de Madrid como una persona con economía estable y capacidad de compra por encima de la media, con curiosidad y ganas de descubrir nuevas experiencias: “De ahí sus ganas de viajar, su participación en la sociedad, su rechazo a los límites a la conducción por el hecho de cumplir años. Tienen una forma saludable de envejecer. Son demandantes de alimentos sanos, cosméticos y servicios médicos preventivos”. Esta investigación confirma que la llamada “generación plateada” mantiene positivas las expectativas económicas de la comunidad, pues el 60% del conjunto reconoce sentirse tranquilo con su situación actual y el 72% prevé una mejora en los próximos años. Otros datos recogidos señalan que el 50% de los mayores madrileños ahorra para posibles imprevistos (63%), para una posible enfermedad o situación de dependencia (47%) o, simplemente, para estar tranquilos en el día a día (46%)

Por otro lado, el grupo tiene previsto incrementar sus gastos a lo largo del año, especialmente en partidas como la vivienda, el agua o la electricidad (44%) y la alimentación (35%). De igual forma, 8 de cada 10 lamentan no poder reducir su gasto en vivienda (57%) y sanidad (43%) sin ver mermada su calidad de vida. “Echando la vista atrás podemos afirmar que se han agudizado las tendencias que ya estaban presentes hace 10 años. Vemos una mayor concienciación sobre el potencial de esta generación como consumidores y partícipes activos en la producción de bienes y servicios”, ha explicado el director. Esta sensibilización se da principalmente en las administraciones públicas, en las empresas y en los ciudadanos: “Debemos felicitarnos porque su protagonismo va a ser bueno para toda la población”. 

Edadismo

Los séniors son, entre otras cosas, un soporte familiar, económico y de cuidados para su círculo más cercano (56%), especialmente con sus hijos (41%). Además, el 39% de aquellos que tienen nietos se ocupan de ellos al menos una vez por semana y, entre los más jóvenes, el 36% también cuida a un familiar mayor. Por otro lado, sólo el 14% de los mayores madrileños estaría dispuesto a alargar su vida laboral pasados los 65. En este sentido, la agrupación siente que la sociedad les envejece antes de lo deseado y, según el barómetro, consideran que alguien es mayor, de media, a los 74 años, mientras que la sociedad fija esa edad, según su percepción, a los 67.  No solo eso, si no que la discriminación por edad o edadismo ha afectado al 20% en alguna ocasión. 

Los datos también revelan que, en la Comunidad de Madrid, el 85% de los mayores tiene previsto viajar a lo largo del año, una cifra ocho puntos por encima de la media nacional. Los más viajeros se encuentran entre los 65 y 69 años (97%), una franja que corresponde con las personas recién jubiladas. La cultura también representa un factor de peso en esta investigación, pues el 77% afirma organizar actividades de esta índole, al menos, una vez al año, siete puntos por encima de la España promedio. En términos de conducción, cerca del 60% de los mayores conduce una vez por semana, una frecuencia que decrece a partir de los 70 años. Con respecto a la salud, los madrileños cuidan sus salud para mejorar su calidad de vida: controlan su alimentación, respetan las horas de sueño y realizan ejercicio físico como medidas preventivas. Destaca que la mayoría apenas hace uso de la sanidad hasta los 70 años y que el 88% de los séniors están enamorados. Además, dos de cada tres reconocen la importancia de las relaciones íntimas a su edad y más de la mitad (52%) señala estar satisfecho con su vida sexual. 

Un papel determinante

Por último, el barómetro de Fundación Mapfre revela que, en Madrid, el 86% de los madrileños es dueño de su casa y el 71% la tiene sin cargas hipotecarias. Sólo el 10% de ellos vive de alquiler, frente al 15% de la media nacional. La fórmula que más confianza les inspira a la hora de rentabilizar su inmueble es la nuda propiedad (11%), junto a la hipoteca inversa (9%); el 35% está abierto al ‘coliving’; el 52% no está dispuesto a abandonar su casa; y el 16% contempla la posibilidad de vivir en una residencia. El informe señala, además, que los mayores de 55 años están cada día más digitalizados y que entre las actividades que más realizan destacan la de consultar su banco online (91%), realizar compras (78%), consultar y publicar contenidos en redes sociales (63%) y ver tutoriales y cursos online para aprender actividades nuevas (59%). 

Tal y como ha expresado Juan Fernández Palacios, se trata de un colectivo ampliamente digitalizado: “El ejemplo lo tenemos en la banca, donde destacan las operaciones online, que en Madrid alcanza el 91% frente a un 85% del colectivo nacional”. Por otro lado, los seniors madrileños tienen contratados más planes de pensiones y seguros de salud que en otras comunidades. “Tiene que ver con una mayor capacidad de gasto”, ha aclarado. Dejando a un lado los datos compartidos, la coincidencia entre datos nacionales y regionales es bastante amplia en temas esenciales: “Su papel como pilar económico y de apoyo en muchas familias, el rechazo a la prohibición de conducir o la apuesta por el envejecimiento saludable”. “Ya en 2021, el consumo de los mayores de 50 suponía el 60% del gasto nacional, según un estudio elaborado por Oxford Economics. Son datos trasladables a la capital”, ha zanjado. El papel de este grupo en el consumo y progreso de la Comunidad de Madrid, que en 2050 superará el 40% de la población, es determinante