AYUNTAMIENTO DE MADRID

Los trabajadores de limpieza defienden su postura frente a las críticas por Montecarmelo: "No saben lo que es un cantón"

Residentes y operarios se han concentrado frente a Cibeles coincidiendo con el nuevo rechazo del PP a reubicar la instalación

Vecinos concentrados este martes frente al Palacio de Cibeles en protesta contra el cantón de Montecarmelo.

Vecinos concentrados este martes frente al Palacio de Cibeles en protesta contra el cantón de Montecarmelo. / H.G.

Héctor González

Héctor González

Madrid

La explanada frente al Palacio de Cibeles ha albergado este martes a las dos caras de la moneda del conflicto que rodea al cantón proyectado por el Ayuntamiento de Madrid en el barrio de Montecarmelo. Por un lado, los vecinos y representantes de varias asociaciones del noroeste de la capital, que han vuelto a reclamar la reubicación del parque de limpieza, y, por otro, trabajadores del SELUR que han acudido para defender su labor y la necesidad de este tipo de instalaciones.

Nosotros no estamos ni a favor ni en contra de la reubicación", lo que "no estamos dispuestos es a que se usen los argumentos que están usando", ha argumentado Serezade Talavera, responsable de limpieza viaria de UGT, contrariada por los mensajes que sostienen que los cantones son una fuente de "olores, ratas y residuos", o que suponen "un peligro para los niños".

Según esta operaria municipal, los vecinos que se oponen al proyecto "no saben lo que es un cantón", que en realidad no son "nada más que vestuarios y aparcamiento de camiones", donde los trabajadores no están más que para cambiarse y guardar el material. En el caso concreto de Montecarmelo, además, se pretende construir una base del SELUR, "que es un servicio de limpieza urgente" y, por ende, "tiene que estar dentro de la ciudad", ha expuesto Talavera.

"Si quieren la calle limpia, pues tendrán que tener un cantón", ha afirmado la representante sindical, antes de insistir en que ni ella ni sus compañeros les importa la ubicación concreta del parque. "La cuestión es que tenemos que estar en un sitio accesible" donde los "operarios no tengan ningún riesgo" por tener que cruzar una carretera ni que se vean obligados a hacer "un montón de kilómetros de transporte", ha insistido.

Los vecinos recuerdan su oposición unánime al cantón

"Estamos aquí porque hemos conseguido [...] un consenso sobre dónde debe ir una instalación industrial de este tipo", que no es "en medio de barrio residencia rodeado de tres colegios con 5.000 alumnos", ha explicado Paco, portavoz de la Plataforma No al Cantón. "Todos los partidos de la oposición nos apoyan", ha añadido el representante vecinal sobre la ubicación alternativa planteada por hasta seis asociaciones vecinales del noroeste de Madrid, en una parcela industrial de Las Tablas.

"Los políticos están para solucionar problemas y no para crearlos, como es este caso", ha apuntado Lorenzo Álvarez, presidente de la Asociación de Vecinos de Las Tablas. Se trata de "una parcela inmensa de grande y es una solución que Borja Carabante debería de meditar, porque es una solución que le estamos proponiendo el conjunto de los vecinos", ha argumentado Álvarez sobre la ubicación propuesta. Además, ha señalado, "está mejor ubicada a nivel de transporte público para los trabajadores y las trabajadoras del servicio de limpieza".

El PP vuelve a rechazar la reubicación del cantón

Entre los aplausos de los trabajadores de limpieza presentes como invitados en el Pleno y algunos gritos de los vecinos - que han terminado siendo expulsados- el PP ha votado en contra de las dos proposiciones de la oposición para instar al Gobierno municipal a mover el cantón a Las Tablas.

Pese a compartir argumentario, ni la propuesta de Vox ni la presentada conjuntamente por Más Madrid y PSOE - alineadas ambas con la propuesta consensuada por las entidades vecinales- han prosperado, tal y como ya había adelantado el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante.