El 18 de marzo

Ayuso remata su gira internacional con una visita al Papa Francisco

La presidenta madrileña arremetió contra el Santo Padre en un viaje a Washington por una carta del Pontífice al presidente de México en la que pidió perdón por los "pecados" cometidos por la Iglesia Católica durante la conquista española.

El papa Francisco durante el nombramiento de 20 nuevos cardenales.

El papa Francisco durante el nombramiento de 20 nuevos cardenales. / EFE

Elena Marín

Elena Marín

La agenda internacional de Isabel Díaz Ayuso finaliza este mes, poco antes de disolver las cortes autonómicas, con una visita al Papa Francisco en el Vaticano. Esta será la última imagen de la presidenta del Gobierno de la Comunidad de Madrid fuera de las fronteras nacionales antes de dedicarse completamente a recorrer los municipios de la región para enfrentarse a las urnas el próximo mes de mayo.

Según informan desde la Puerta del Sol, el próximo “18 de marzo” el Pontífice recibirá "a una delegación madrileña" en la que participará la presidenta con motivo del IV Centenario de la Canonización de San Isidro Labrador, una efeméride por la que la Santa Sede declaró el primer año santo de San Isidro (entre mayo de 2022 y mayo de 2023) y por la que el alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida, dictó un bando el pasado 13 de mayor agradeciendo al Papa Francisco "la concesión de un Año Jubilar para la ciudad de Madrid" e invitando a los residentes en la capital a participar en las distintas actividades organizadas por este motivo.

La foto para el electorado

La presidenta tendrá así una foto con el Pontífice en vísperas de la cita con las urnas, una imagen que buscó también la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, cuando comenzaba su proceso de escucha para crear Sumar o que tienen también el presidente Pedro Sánchez o el ministro Félix Bolaños. La foto con Bergoglio tuvo sus riesgos para los dirigentes de izquierdas, especialmente para Díaz, porque no todo su potencial electorado entiende la necesidad de asociarse al máximo dirigente De la Iglesia Católica, pero tampoco la población más conservadora defiende los postulados de este Papa y, de hecho, en Vox se muestran muchas veces contrarios a él.

Este será uno de los pocos viajes de la presidenta regional al extranjero en el que la atracción de inversiones para Madrid no será el principal objetivo, como ha sucedido en las visitas de hace solo unas semanas a Londres, Jerusalén o Lisboa, o las que ha realizado a lo largo de los casi dos años de legislatura a París (en estas mismas fechas del año pasado), Bélgica, Italia o Estados Unidos.

Sorpresa por las palabras del Papa

Precisamente en uno de sus primeros viajes internacionales desde que gobierna en solitario, en septiembre de 2021, Ayuso se trasladó a Washington durante tres días, coincidiendo con la convención nacional del PP de Pablo Casado, y allí comenzó su cruzada en defensa del legado de la conquista española en el continente americano. Esta defensa, propiciada por un movimiento revisionista de la herencia española en los países latinoamericanos y en varias ciudades del país americano que visitaba, coincidió con una carta que el Papa Francisco envió al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, con motivo del Bicentenario de la Independencia, en la que hablaba del perdón por los "pecados" que pudiera haber cometido la Iglesia Católica durante aquellos años de la conquista española.

Ayuso no vio con buenos ojos el contenido de aquella misiva del Papa Francisco y no dudo en criticarlo públicamente. "A mí me sorprende que un católico que habla español hable así a su vez de un legado como el nuestro, que fue llevar precisamente el español y, a través de las misiones, el catolicismo y, por tanto, la civilización y la libertad al continente americano", manifestó la presidenta durante aquel viaje a Washington en respuesta al Pontífice.

"Leyenda negra"

La dirigente madrileña quiso aquellos días hacer frente a la "leyenda negra" y "revisión maniquea de la Historia" frente al "alarmante" crecimiento del "indigenismo y el populismo" que entiende que se está produciendo en algunos países latinoamericanos y que apunta que es el "nuevo comunismo" del siglo XXI, de ahí también su empeño, además del estrictamente económico, por convertir Madrid en un referente de la cultura hispana y hacer de la capital un lugar donde se habla español con distintos acentos. De esta "leyenda negra" habló también el ex presidente del Gobierno José María Aznar en un acto de la semana pasada en el que ambos destilaron sintonía y en la que mencionó el "supuesto destrozo genocida cuando se descubre América".

Aquel viaje de la presidenta a Washington coincidió con la convención nacional del PP de Pablo Casado, cuando la pugna por el poder territorial ya había comenzado entre ellos, y la presidenta tuvo que reducir los cinco días de viaje que tenía previstos por Estados Unidos para poder acudir al acto final con el resto de los barones populares en Valencia.