PATRIMONIO CULTURAL

El Ayuntamiento de Madrid se reunirá con el Gobierno a finales de año para decidir si cubre el Templo de Debod: "No corre prisa"

Luis Lafuente, director general de Patrimonio Cultural del Consistorio de la capital, ha indicado que "esa decisión tiene que tener un consenso nacional e internacional"

La Fundación Santa María la Real ha elaborado un estudio sobre el estado de esta construcción del siglo II a.C. y destaca que "no hay patologías que precisen intervención inmediata"

Templo de Debod FOTO JOSÉ LUIS ROCA

Templo de Debod FOTO JOSÉ LUIS ROCA / José Luis Roca

Ana Ayuso

Ana Ayuso

El Templo de Debod no está tan mal, dicen. Según ha indicado Luis Lafuente, director general de Patrimonio Cultural del Ayuntamiento de Madrid, el complejo arquitectónico del siglo II a.C. se encuentran en un "estado de conservación adecuado".

Por ello, descartan que sea necesario preservarlo de inmediato, dado que no muestra patologías de gravedad. No obstante, Luis Lafuente ha señalado que el objetivo de conservación del Templo de Debod es dual: por una parte, garantizar su preservación y, por otra, el disfrute público.

Sin embargo, Lafuente ha dicho que, una vez se traslade la información sobre el estado actual del Templo de Debod al Gobierno de España y a la Comunidad de Madrid "para que tomen la decisión adecuada". "Esa decisión tiene que tener un consenso nacional e internacional", ha añadido.

Lafuente ha anunciado que a finales de este año se reunirá con ambas instituciones a final de año y que se llevará a cabo un encuentro internacional en 2023 para plantear cómo se debe operar con el Templo de Debod. "No corre prisa tomar esa decisión", ha señalado, y ha recalcado que uno de los elementos a tener en cuenta de cara a futuras actuaciones reside en que "forma parte del paisaje urbano".

En un encuentro con la prensa, tanto Lafuente como los técnicos de la Fundación Santa María la Real, que han elaborado un estudio sobre el estado del Templo de Debod, se ha detallado en qué consiste el Plan de Conservación Preventiva, así como el calendario de actuaciones a seguir para que esta joya patrimonial de Madrid se mantenga intacta con el paso de los años. 

Anteriormente, los protocolos de actuación sobre el patrimonio se centraban en solucionar los problemas conforme surgían, pero ahora "la tendencia es otra", ha expresado el director general de Patrimonio Cultural. "El objetivo ya no puede ser solo curar a los monumentos de sus patologías, sino prevenir futuros" desgastes que pueda presentar un edificio con tanta historia, ha destacado.

Se trata de "proyecto vivo que ha de evolucionar con el edificio", ha indicado Lafuente, y que se enfoca en la "conservación preventiva". El director general de Patrimonio Cultural ha señalado que el Ayuntamiento potenciará líneas de concienciación pública y de educación patrimonial para que los visitantes no deterioren este emblemático enclave. Lafuente ha recalcado la "responsabilidad que tenemos las administraciones públicas para garantizar el disfrute del ciudadano del patrimonio cultural".

La Cátedra UNESCO de Patrimonio de la Universidad Politécnica de Madrid y la empresa Zenit Tipografía y Cartografía llevaron a cabo entre 2020 y 2021 estudios científicos destinados a conocer el estado de conservación del templo. Concluyeron que el monumento madrileño no presenta patologías significativas que pudieran comprometer la preservación de sus valores materiales e inmateriales.

Se han localizado alrededor de 90 factores de riesgo que "pudieran darse" en un futuro en el Templo de Debod.

"No hay patologías en el Templo de Debod que precisen intervención inmediata", ha incidido uno de los técnicos de la Fundación Santa María la Real, puesto que de momento se encuentra seco y no parece reflejar problemas por sales ni por humedades. La construcción necesitaba que se realizase un drenaje que ya ha sido ejecutado por el Consistorio.

El templo no será cubierto, pero sí monitorizado de forma continua. Un georradar analiza en tiempo real más de 206 puntos, 38 nodos y más de 15 parámetros, como la humedad, el CO₂ o la calidad del aire, para conocer el estado actual de la construcción que llegó a Madrid hace 50 años.

Esa monitorización comenzó en el año 2016 y, de los resultados de esas revisiones continuas, la Fundación extrajo que no había una luminosidad ni unos gases que pudiesen afectar al templo, así como el hecho de que la vegetación puede ayudar a la conservación del edificio.

La Fundación Santa María la Real ha elaborado una aplicación que muestra en tiempo real el estado de cada una de las zonas del templo y de los elementos que componen la construcción que deban ser intervenidos. Las salas de este histórico edificio se encuentra actualmente repleta de sensores y dispositivos inalámbricos que permiten revisar si los técnicos deben actuar sobre alguna área concreta del templo.

Los análisis continuos de la construcción resultan determinantes de cara a plantear acciones de conservación, restauración o mantenimiento.