De Madrid al cielo, pasando por el Pirulí

El skyline madrileño tiene un dueño de nombre engañoso: el popularmente conocido como 'Pirulí' es en realidad una imponente torre de telecomunicaciones de 232 metros de altura que este martes ha cumplido 40 años señoreando el cielo de Madrid. Cuatro décadas después de su inauguración para retransmitir el Mundial de Futbol del 82, la monumental estructura de Torrespaña sigue el corazón responsable de hacer llegar las señales de radio y TDT a todos los rincones de la geografía española.

Obra del arquitecto Emilio Fernández y Martínez de Velasco, comenzó a construirse en 1981, pero no entró en servicio hasta el Mundial de 'Naranjito'. Hasta 1989 fue torre emisora exclusiva de Radio Televisión Española (RTVE); después pasó a manos de Retevisión, compañía creada ad-hoc para la explotación del espacio radioeléctrico televisivo, y, ya en 2003, de Abertis (actual Cellnex Telecom).

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Para conmemorar el 40 aniversario, RTVE ha puesto en marcha una exposición fotográfica en la SGAE en la que rememora en imágenes la historia de la torre. La muestra, titulada 'El Pirulí, 40 años de ilusiones', cuenta con 31 fotografías que reflejan la inmensidad de la torre, emblema de RTVE durante los últimos cuarenta años y una contribución indiscutible en la contrucci´çon de de la "marca RTVE".

Al igual que en otras ocasiones simbólicas, como el cincuenta aniversario de la cadena pública o el inicio de la campaña de 'La Gran Consulta' en septiembre del pasado año, el 'Pirulí' se iluminará las noches del 7, 8 y 9 de junio. Por otro lado, para aquellos que no puedan acudir a la sede de la SGAE a contemplar la exposición en persona, RTVE también ha creado una página web dedicada especialmente a repasar la vida del monumento.

La torre cuenta con ocho plantas, cuatro cerradas y cuatro abiertas, en las que se distribuye equipamiento técnico, servicios auxiliares y alrededor de 250 antenas fijas y móviles. El corazón de Torrespaña se encuentra en la tercera planta. En ella no se produce ningún programa ni contiene platós de televisión; sino que estos se ubican en los dos edificios del complejo de Torrespaña de RTVE a los pies de la torre, donde están instalados los servicios informativos de TVE desde 1983.

El 'Pirulí' fue diseñado y construido para soportar una enorme cantidad de peso y vientos de hasta casi 200 km/h. Para evitar que se parta, la punta de la antena oscila más de un metro. En sus cuatro décadas de existencia solo ha sufrido un único apagón, el 28 de agosto de 2002, cuando se declaró un incendio en la torre y Madrid se quedó sin televisión durante casi tres horas. Desde entonces, las medidas de seguridad se han triplicado, con lo que se considera "prácticamente garantizado" que no volverá a suceder.