LA VIDA CONTIGO

¿Ya has hecho tu lista de propósitos de año nuevo? Estos son los consejos para que, este año sí, los cumplas

Te explicamos paso a paso cómo conseguir todo lo que te propongas

Propósitos de año nuevo

Propósitos de año nuevo / EPE

S. C.

Año nuevo, vida nueva. O eso dicen. Bien lo saben en los gimnasios, que se llenan en enero de gente que quiere perder todo lo ganado en las Navidades, o en las academias de inglés, o en las de cocina... Todo el mundo hace sus propósitos de Año Nuevo tomando el día uno de enero como el principio de un cambio drástico en su vida. Los más comunes son los que todos podemos imaginarnos: ir al gimnasio, hacer dieta, aprender otro idioma, cocinar mejor, cambiar de trabajo, viajar más, sacarse el carnet de conducir...

Un sinfín de metas que empezamos a cumplir en enero y que, la mayoría de las veces... dejamos en febrero. Es entonces cuando los gimnasios se quedan vacíos y todo el mundo pugna por cancelar sus suscripciones, dejamos de tener tiempo para las clases de inglés y los alimentos precocinados vuelven al carro de la compra.

Los propósitos de Año Nuevo son una forma excelente de planear nuestro año, de empezarlo con positividad y de conseguir, tras doce meses, crecimiento personal o laboral. El problema es que, la mayoría de las veces, no los cumplimos y eso nos hace sentir frustración o pensar que, al final del año, no hemos conseguido nada. Por eso, en este artículo te contamos algunos errores que no debes cometer y algunos consejos para cumplir tus propósitos.

Elige lo que realmente quieres

Ya lo decían las abuelas, el que mucho abarca poco aprieta. Es muy normal ver listas de propósitos llenas a rebosar: gimnasio, dieta, pasar más tiempo con la familia, salir más, viajar, dormir mejor, tener mejor salud mental, ahorrar, estar más con los amigos, conseguir otro trabajo, sacar más al perro... y un larguísimo etcétera.

Seamos realistas: esta cantidad de propósitos ya no son propósitos, es estrés. Es imposible que, con el ritmo de vida actual, podamos conseguir 10 o 20 propósitos a la vez sin desesperarnos. Es mejor dedicar los primeros días del año a pensar qué queremos realmente, cuáles de esos propósitos nos van a hacer más felices, cuáles van a conseguir hacernos mejor personas y elegir unos pocos, una cantidad que de verdad consideres que puedas abarcar.

Apúntalo en un papel

El ordenador está genial, pero hay veces que hay que recaer en lo analógico. Apunta esos propósitos que hayas elegido en un papel. ¿Por qué escribirlo a mano? Por lo mismo por lo que tomábamos apuntes en el instituto: hacerlo de esta manera favorece la comprensión y la memorización. Así que es una forma de que esos propósitos calen en nuestra memoria.

Después, es importante que pongas esa lista en un lugar visible por el que pases continuamente, para que siempre la tengas presente. Así, aunque el año avance, siempre recordarás lo que querías hacer.

Empieza con un solo propósito

Aunque hayas elegido unos pocos propósitos, por ejemplo tres o cuatro, quizás pueda ser difícil llevarlos a cabo todos a la vez. Por ejemplo, si te propones ir al gimnasio varias veces en semana, salir más con tus amigos y pasar más tiempo con tu pareja, a lo mejor te das cuenta de que es imposible llegar a todo y terminas dejándolo.

Por eso, lo mejor es empezar con un solo propósito, el que quieras, o con un par que sean compatibles. Por ejemplo, puedes empezar por hacer más deporte y comer más sano, o combinar conocer a gente nueva con aprender inglés si vas a cafés de intercambio de idiomas. Pero si crees que tus propósitos son muy costosos, lo mejor es empezar por uno de ellos y, cuando estés en camino y lo hayas introducido en tu rutina, comenzar con el siguiente.

Paso a paso

Sean cuales sean tus propósitos, debes simplificarlos y convertirlos en pequeñas metas. Si tu meta es, por ejemplo, aprender inglés, no puedes pretender hablar de forma fluida en un mes, igual que no puedes perder 20 kilos de golpe o aprender a ahorrar en unas semanas. Debes comenzar siempre por metas cortas: empezar a escuchar un podcast para hablar un idioma, perder tu primer kilo, o ahorrar tus primeros 50 euros al mes.

De esta forma podrás ir viendo como, poco a poco, cumples pequeñas metas. Esto te motivará a seguir adelante hasta llegar a tu meta final. Sino, es posible que te frustres por no llegar a conseguir el propósito.

Establece tu plan de acción

Si ya tienes las pequeñas metas que vas a ir poniéndote es el momento de establecer fechas. Si tenemos claro los pequeños pasos a dar pero no cuánto tiempo tenemos para cumplirlos, nos acabaremos dispersando, tardaremos demasiado tiempo y, al final, no cumpliremos la meta.

Para evitar eso, debemos ponernos fechas límites. Por ejemplo, si quieres viajar más, apunta que antes de marzo has tenido que visitar un pueblo nuevo y haber ido a un lugar de Europa. Si quieres encontrar un trabajo nuevo, proponte enviar tus currículum antes de febrero. Solo debes adaptar esto a cada propósito.

Organización, organización, organización

El calendario y la agenda se van a convertir en tus mayores aliados. Dedica el primer día de cada mes a organizarte en un calendario, qué días vas a dedicar a tu propósito, cuándo tienes que cumplirlo, qué días no podrás hacerlo... Y lo mismo con la agenda. Dedica el domingo o el lunes a organizar tu semana día a día para saber de qué hora a qué hora podrás hacer deporte, en qué momento podrás ir con tus amigos, o cuando deberás visitar a la familia. Eso te ahorrará pensar todo el rato en lo que tienes que hacer. Únicamente tendrás que dedicarle un día a la semana y luego seguir el plan.

La rutina suele ser un asco en general, pero en este caso, deja que te guíe. Planifica las mismas acciones, los mismos días y en los mismos horarios. Cuando la repitas unas cuantas veces esa acción será un hábito y habrás conseguido el primer paso de tu propósito: interiorizarlo. Así, cumplirlo te saldrá casi solo.

Recompénsate

El refuerzo positivo es la clave. Establece una recompensar para cada vez que consigas una pequeña meta. Cómprate ese libro que realmente querías leer, ve a comer a tu restaurante favorito o a ver esa película que te gusta al cine. Así asociarás el cumplir metas con algo positivo

Priorízate

Si quieres cumplir tus propósitos, ser más feliz y crecer en todos los sentidos, debes empezar a priorizarte. Debes poner primero tus metas y el cumplimiento de tus propósitos. Para esto, es bueno aprender a decir 'no' de vez en cuando. Sobre todo a esas peticiones que te restarán tiempo y espacio para cumplir tus metas

Persevera

Este es sin duda el consejo más valioso. Es normal que a lo largo de todo un año falles en algunas cosas: que una semana no vayas a entrenar, que seas más sedentario, que prefieras coger una pizza a una ensalada. Es lo más normal del mundo. Un año tiene 365 días y no podemos ser perfectos todos ellos.

Lo más importante es entender que no pasa nada, se puede fallar e incluso abandonar un propósito por semanas. Pero persevera, vuelve a intentarlo y retómalo por donde lo dejaste. Así, este año sí, conseguirás cumplir todos tus deseos.