DIPLOMACIA

Irán asegura que avisó de que no estrecharía la mano de la reina y alega cuestiones religiosas

Escribieron a la Casa Real avisando de que "por temas, protocolarios el embajador no puede estrechar la mano a Su Majestad la Reina"

Aseguran que la mano en el pecho es la forma tradicional de saludar a las mujeres en un país donde los hombres no pueden tocarlas en público

La polémica se produce en medio de una dura represión de las protestas feministas en el país y con dos españoles detenidos y en la cárcel

El desplante del embajador de Irán a la reina en la recepción al Cuerpo Diplomático

Agencia ATLAS | Foto: EP

Mario Saavedra

Mario Saavedra

El embajador de Irán en España, Hassan Ghashghavi, no estrechó ayer la mano de la reina Letizia, como sí había hecho con el rey Felipe VI, a su lado, durante la recepción anual del Cuerpo Diplomático acreditado en España. Sí lo hicieron el resto de los 120 jefes de misión extranjeros presentes en el Palacio Real.

Este jueves, la embajada del país persa ha emitido un comunicado en el que lamenta la polémica generada, “sobre todo en redes sociales”, pero asegura que avisó de que no estrecharía la mano de la monarca a la Casa Real en un correo de confirmación de asistencia en la que, el 17 de enero: "El embajador acudirá solo y, como en otras ocasiones, recordamos que por temas protocolarios no puede estrechar la mano a Su Majestad la Reina”, decía el correo. Ghashghavi se limitó a poner la mano en el pecho para saludar a la reina, porque los hombres iraníes tienen prohibido tocar a ninguna mujer en público. La embajada iraní defiende que ese es, por motivos religiosos, el saludo tradicional iraní.

Doña Letizia correspondió al saludo sin contacto del diplomático con semblante serio y un breve gesto de la cabeza y sin llegar a mover los brazos, porque sabía que Ghashghavi no iba a estrechar su mano. Anteriores embajadores asistieron con sus esposas y eran estas las que estrechaban la mano de la reina.

La embajada iraní afea que el saludo del embajador de Irán a la reina de España "haya sido objeto de juicios erróneos y equivocados en algunos medios, especialmente en las redes sociales” y afirman que el saludo protocolario poniendo las manos en el pecho se basa en “antiguos y conocidos principios ceremoniales de la República Islámica de Irán en todas las recepciones, alrededor del mundo entero, en todas las ocasiones y todos los lugares”.

Ponen como ejemplo a las embajadoras iraníes en países como Dinamarca, Finlandia, Naciones Unidas o Suiza, que tampoco estrechan la mano cuando presentan sus credenciales. “Este hecho nunca ha sido considerando como un “desplante” de diplomáticas iraníes hacia jefes de gobierno o estado de los países donde están asignadas, por la prensa de esos países”.

La polémica del saludo a la reina se produce en medio de una dura represión de las protestas de jóvenes manifestantes a manos de las fuerzas de seguridad de Irán, después de que una mujer muriera bajo custodia de la policía de la moral, donde se encontraba por llevar mal puesto el velo. Desde entonces han muerto centenares de personas y varias más han sido ejecutadas, una cifra que el Gobierno de Teherán no ha hecho oficial. Se produce también mientras se mantiene detenidos a dos españoles por, según Irán, participar en las protestas

En el comunicado de la delegación diplomática iraní se resalta que las relaciones entre las dos naciones de Irán y España, “originarias de dos grandes civilizaciones, la de la Península Ibérica y la de Persia, son históricas y milenarias” y que las “relaciones diplomáticas y oficiales entre los dos piases también datan de más de cuatrocientos años”. Añaden en su comunicado que “tal como indican estadísticas de solventes e imparciales centros internacionales, la mejora de la situación de mujeres en Irán no es ni comparable con los años previos a la revolución” impulsada por el Ayatollah Jomeini hace 44 años.