EN ARGELIA

Arranca la cumbre de la Liga Árabe con mensajes de unidad y en defensa de la causa palestina

El presidente argelino reivindica un frente común para afrontar la crisis económica actual

Un cartel da la bienvenida a los líderes de la cumbre de países árabes en Argel.

Un cartel da la bienvenida a los líderes de la cumbre de países árabes en Argel. / EP

Marc Ferrà

Los representantes de los países árabes ya se encuentran en Argel para celebrar la Cumbre de la Liga Árabe tras tres años de parón. En la sesión de apertura se han repetido los mensajes de unidad, aunque no será hasta este miércoles cuando los líderes se pongan manos a la obra. Encima de la mesa se acumulan los conflictos de Yemen y Libia, además de la crisis económica y la inseguridad alimentaria que sacude muchos puntos de la región.

"La causa palestina es nuestro tema central", ha reivindicado el presidente argelino, Abdelmadjid Tebboune, en su discurso como anfitrión. Argelia ha abanderado esta reivindicación y quiere que la cumbre sirva para lograr la unidad de sus homólogos árabes, especialmente para contrarrestar el acercamiento de varios países miembros a Israel. Minutos antes, el presidente tunecino, Kais Saied, también ha defendido que la única solución es un Estado palestino libre con capital en Jerusalén. 

Además, el mandatario argelino ha remarcado que "el mundo árabe no ha conocido antes una crisis como la actual" y ha pedido crear un bloque económico "inexpugnable" entre los países árabes para preservar sus "intereses comunes". La cumbre ha arrancado con la presencia de una docena de jefes de Estado, la mitad de los que conforman la Liga Árabe. Entre las ausencias, destacan la del príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, y la mayoría de líderes del Golfo, además de los Monarcas de Marruecos y Jordania. 

Acuerdos de Abraham

En 2020, Emiratos Árabes Unidos y Bahréin normalizaron sus relaciones con Israel. El Estado hebreo lanzaba, de la mano del anterior presidente estadounidense, Donald Trump, su conquista diplomática de los países del Golfo. Meses después, Marruecos siguió los mismos pasos y Sudán firmó un acuerdo preliminar. Era la primera vez en 26 años, desde el acuerdo de paz con Jordania en 1994, que un país árabe normalizaba relaciones con las autoridades israelís. La cumbre de Argel es la primera en la que todos los países árabes se encuentran después de estos acuerdos que han polarizado la región

Antes de empezar la cumbre, Marruecos y Argelia ya han protagonizado una nueva demostración de la crisis diplomática que atraviesan. Mohamed VI anunció, en el último momento, que no ocuparía su asiento en la reunión y que estaría representado por su ministro de Exteriores, Nasser Bourita. El jefe de la diplomacia marroquí ya viajó a Argel el domingo para reunirse con sus homólogos árabes, una visita que causó polémica en Marruecos, al considerar que las autoridades argelinas no le dieron un trato diplomático correcto, según explicaron varios medios del país. Por contra, la diplomacia argelina ha defendido que recibió el mismo trato que los otros ministros.