POLÉMICAS IMÁGENES

¿Es útil el reportaje de 'Vogue' de Zelenska y Zelenski?

Olena Zelenska y Volodímir Zelenski

Olena Zelenska y Volodímir Zelenski / PIM

María G. San Narciso

María G. San Narciso

Volodímir Zelenski ha aparecido con su camiseta de color verde hablando por videollamada en parlamentos de todo el mundo. También ha aparecido en entrevistas de televisión, prensa e imágenes varias. Con su mujer, Olena Zelenska, ocurrió lo contrario hasta hace poco. Ella se mantuvo escondida junto a sus dos hijos durante los dos primeros meses del conflicto. Después, volvió con su marido y asumió un importante rol en la diplomacia ucraniana. Desde entonces, ha otorgado entrevistas a distintos medios internacionales. Ninguna ha llamado tanto la atención como el reportaje que han protagonizado en la revista 'Vogue'.

La publicación ha recibido un aluvión de críticas por su "frivolidad", pero esta guerra nos está enseñando que la estrategia y la ejecución de la comunicación política del gobierno de Ucrania no se deja nada al azar. La pregunta es si de verdad resulta útil un reportaje así. ¿Merece la pena captar la atención de Occidente justo en un momento en el que el panorama mediático habla más de las consecuencias de la guerra que del conflicto en sí? ¿Ha sido 'Vogue' la opción correcta? Las respuestas de los expertos, como las de los lectores, son dispares.

"'Vogue' tiene millones de lectores y poder hablarles directamente era mi deber. Creo que es más importante hacer algo y ser criticados por ellos que no hacer nada", afirmaba Zelenska a la BBC. Pablo Vicente Sapag Muñoz de la Peña, profesor titular de Teoría e Historia de la Propaganda de la Universidad Complutense de Madrid, no está de acuerdo. Este experto es uno de los que piensa que "el reportaje llega en un momento poco adecuado". "Quizá hubiera tenido otra repercusión, o se hubiera visto con menos recelo, de haberse publicado al principio del conflicto. Pero lleva cinco meses. Es evidente que Ucrania está perdiendo, lo que supone destrucción del país y la muerte y el desplazamiento de miles de ucranianos. Esto no acompaña. Ni el tono ni las fotografías del reportaje es el adecuado", asegura.

Saturación de Occidente

Otro de los puntos por los que cree que este reportaje no ayuda es porque "está orientado a un público occidental que empieza a estar saturado de la situación de Ucrania". "Al principio se vendió como un conflicto de un par de semanas. Ahora vemos que sigue, con unas consecuencias devastadoras para los países occidentales. Esta suerte de simpatía que generó Zelenski al principio con esa ubicuidad, desde mi juicio equivocada por su aparición tan continua en los medios, ya no hace la misma gracia de entonces. Si además el tono es frívolo, menos aún", añade. Para el experto, la publicación no está bien planteada ni en el medio, ni en la forma, ni en el momento. Volver a estar en boca de todos no siempre es positivo cuando hay repercusiones geopolíticas.

Porque a juicio de Sapag Muñoz de la Peña, hay un problema con la sobreexposición de Zelenski: "De no haber estado haciendo un uso y abuso de su imagen desde el primer día, el reportaje se hubiera visto como algo novedoso, por mucho que sea su esposa la que lo protagoniza. Pero él está ahí y ceo que no le va a favorecer".

Por su parte, Pere-Oriol Costa, catedrático emérito de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), opina más bien al contrario. Este experto en Comunicación Política no cree que Zelenski se haya sobreexpuesto. Más bien considera que lo que ha hecho es transmitir el mismo mensaje con "una gran coherencia": el de necesitamos armas y solidaridad con nuestro pueblo.

Costa explica que si bien este tipo de actuaciones suelen ser contradictorias, el reportaje sí está bien pensado, planificado y con coherencia como para que sea beneficioso para la presidencia del país. Lo piensa así, sobre todo, por el papel que toma aquí la primera dama. Al no haber estado en el foco mediático desde el principio , "la salida a la acción pública de Zelenska es muy creíble". "No es una mujer que esté pensando en los medios, sino que es ahora, cuando el país necesita la participación de todos, cuando adopta un rol público". De esta forma, logra "reforzar las políticas del marido, redundando en ellas", asegura.

Prejuicios sobre las revistas de moda

¿Las críticas hubieran sido distintas si no llega a publicarse ese mismo reportaje en Vogue? Muchas voces de revistas femeninas piensan que sí. Muchos expertos opinan que este tipo de publicaciones son frívolas por el mismo tono con el que trabajan.

"Lo que sí me parece frívolo es banalizar el papel que tienen las cabeceras de moda para tratar temas tan importantes como un conflicto bélico", asegura Alicia Parro, periodista experta en Moda y profesora de Comunicación de Moda en el ESIC. Ella piensa que son un medio tan bueno para hablar de este tema como cualquier otro. Y más en Vogue, que cuenta con 22 ediciones repartidas por el mundo y más de 24 millones de lectores al mes. Además de sus números de impactos nada insignificantes en las redes sociales.

Parro señala que una revista así es un "altavoz muy importante para tratar todo tipo de causas". "La primera dama ucraniana ha adquirido un rol muy importante en la diplomacia de su país. Este reportaje representa la esperanza y la dignidad. Las imágenes son muy poderosas y elegantes dentro de la sobriedad. Refuerza la tenacidad de su pueblo y de ellos mismos para seguir luchando, que es el propósito", explica.

Las fotografías de Annie Leibovitz se apoyan en el estilismo de la directora de Vogue en Ucrania, Julie Pelipas, y en otras tantas personas de la redacción de la revista en el país. "Es una forma de defender a los trabajadores y a un sector que representa ingresos para muchas personas", añade esta experto, que defiende el rol que puede tener la moda para hablar del mundo.