Elecciones

Un exguerrillero y un populista de derechas se disputan la presidencia de Colombia

Gustavo Petro, del Pacto Histórico, y Rodolfo Hernández, llegan a los comicios en una situación casi de paridad

Gustavo Petro y Rodolfo Hernández.

Gustavo Petro y Rodolfo Hernández.

Colombia

 elige este domingo a su nuevo presidente en medio de cimbronazos. De un lado, la muy reñida pelea de 

Gustavo Petro

 y Rodolfo Hernández por el voto de 39 millones de ciudadanos. Los sondeos han augurado un escrutinio tenso y un ganador de la contienda por un escaso margen. La otra singularidad de esta contienda es que tanto Petro, del izquierdista Pacto Histórico, como su oponente, no provienen de los partidos tradicionales. Como nunca antes, la elite histórica es apenas espectadora de un desenlace que muestra hasta qué punto está cambiando Colombia desde la finalización del conflicto armado, en 2016, y los estallidos sociales contra el Gobierno de derechas de 

Iván Duque

, en 2019 y 2021.

Petro fue guerrillero, pero, desde hace décadas, es un hombre del sistema político. El magnate Hernández, en cambio, más allá de un breve paso por la alcaldía de Bucaramanga, viene del mundo de la construcción que le ha permitido amasar una fortuna de 100 millones de dólares. El "viejito de

Tiktok

", quien acumuló su poder electoral desde las redes sociales, es, en un sentido, el candidato antisistema por excelencia. Algunos analistas consideran que se parece más al salvadoreño 

Nayib Bukele

 que a 

Donald Trump

. Hernández ha recibido el apoyo de los partidos Conservador y Liberal. El uribismo soportó el despecho de ser despreciado por el ingeniero y también ha llamado a votarlo: peor sería que ganara la izquierda moderada, asociada ligeramente al comunismo de la Guerra Fría. Un sector del liberalismo se ha rebelado contra sus liderazgos y optará por el Pacto Histórico. Parte del centro político parece inclinarse, con cierta desgana, en la misma dirección. Más allá de estos alineamientos, serán los indecisos, casi dos millones, los que tienen en sus manos el nombre del vencedor.

No solo el fantasma del fraude, avivado por Petro y permanentemente desmentido por Duque, sobrevuela ese país desde hace días. La propia Misión de Observación Electoral (MOE) ha admitido que se trata del "periodo electoral más violento de los últimos 12 años". Solo en lo que va de 2022 fueron asesinados 86 líderes sociales y 21 exmiembros de las FARC, grupo que abandonó las armas en 2016. La violencia está en el aire. La Defensoría del Pueblo ha confirmado que este domingo existe el "riesgo alto y extremo" de acciones armadas en 290 municipios con presencia de disidencias de las

FARC

o del ELN, grupos paramilitares de

ultraderecha

o narcotraficantes.

El peso de la desigualdad

La disputa entre Petro y Hernández está lejos de ser producto del azar. Si bien la economía colombiana se ha recuperado de los efectos del

covid-19

, con un crecimiento de 10,6% en 2021 y perspectivas del 6% este año, un 40% de la población se encuentra en la pobreza. Colombia es el tercer país de

América Latina

con las distribuciones de ingresos más desiguales, detrás de Brasil y Guatemala. La

OCDE

estima como promedio que una persona que nace en la franja social que recibe los menores ingresos tarda cuatro generaciones en convertirse en parte de la clase media. Sin embargo, Colombia rompe esa regla: 11 generaciones se necesitan para pasar de uno a otro universo social. Esa es una de las razones que explican los sucesivos estallidos y la apertura de una parte de la sociedad a otras alternativas electorales.

La segunda vuelta ha sido precedida por un alud de 

fake news

 pero también de informaciones veraces que solo el recuento de votos permitirá inferir se han influido en las predilecciones de los ciudadanos. La revista Cambio publicó a pocas horas de los comicios el vídeo de una "exótica celebración" en un yate que navega frente a las costas de Miami. Ahí está Hernández, el nuevo adalid de la lucha contra los corruptos, junto "con presuntos lobistas internacionales" y "alegres jovencitas".