PROYECTO COMUNITARIO

La reelección de Macron refuerza la unidad europea frente al antieuropeísmo y Putin

La UE ve en su elección una "magnífica noticia" para seguir desarrollando el proyecto de construcción europeo

Emmanuel Macron durante un discurso en el Parlamento Europeo a mediados de enero, en Estrasburgo.

Emmanuel Macron durante un discurso en el Parlamento Europeo a mediados de enero, en Estrasburgo. / GONZALO FUENTES / REUTERS

Silvia Martínez

Silvia Martínez

Emmanuel Macron

 será presidente de Francia otros cinco años más. Su reelección, este pasado domingo en la segunda ronda de las presidenciales francesas, ha generado un profundo alivio en la escena política europea. En primer lugar, porque su victoria supone un triunfo de las fuerzas proeuropeas frente a la ultraderechista Marine Le Pen, cuyo objetivo de desmontar progresivamente Europa desde dentro hubiera supuesto un bomba para el proyecto de integración y construcción europeo.

Y, en segundo, porque se produce en un momento particularmente difícil para la Unión Europea, con una Alemania debilitada y renqueante tras la salida de la escena política de Angela Merkel, en pleno conflicto con Rusia por la guerra en Ucrania y la creciente necesidad de reforzar una unidad europea que con Le Pen en el Elíseo, aliada del Kremlin, se hubiera visto completamente fracturada.

“Un voto que vence al nacionalismo, el antieuropeismo y a [Vladimir] Putin. Un voto que hace a Europa más fuerte”, ha dicho el presidente del Instituto francés Jacques Delors, ex primer ministro italiano y presidente del Partido Demócrata, Enrico Letta, sobre la lectura que hace del 58,5% cosechado por Macron este domingo. Sus palabras resumen también el sentir colectivo de los dirigentes europeos que tardaron apenas unos minutos en aplaudir y expresar su alegría por una victoria en la que ven una "magnífica noticia para toda Europa”, en palabras del primer ministro italiano Mario Draghi

“En este período tormentoso necesitamos una Europa sólida y una Francia totalmente comprometida para una Unión Europea más soberana y más estratégica”, celebraba por su parte el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, que forma parte de la misma familia política que el dirigente francés.

Esto es lo que representa a ojos de todos sus aliados europeos Macron, que casualmente ocupa la presidencia semestral del Consejo de la Unión Europea durante este primer trimestre de 2022. “La victoria de Macron supone la puesta en marcha de un ambicioso proyecto para Europa. Abogará por redoblar la agenda de la soberanía europea en tecnología, en defensa, en la lucha contra la coerción económica”, sostiene Tara Varma, analista del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores.

Unidad frente a los extremismos

Esto es lo que se espera con Macron al frente de Francia. Que siga apoyando la lucha contra el cambio climático, la construcción y la integración europea, desarrollo de la autonomía estratégica, el multilateralismo, los valores democráticos y la unidad frente a los extremismos que han aflorado y cobrado fuerza en muchos Estados miembros en los últimos años.

“Más que nunca antes, todas las fuerzas democráticas deben unirse contra los extremistas que enfrentan a las personas, erosionan nuestro estado de derecho democrático y debilitan a Europa”, ha reivindicado el liberal belga Alexander De Croo tras conocerse los resultados. 

De ahí las calurosas felicitaciones recibidas por el líder del movimiento En Marche, incluidas las del canciller alemán Olaf Scholz que, junto con Pedro Sánchez y Antonio Costa, publicaba esta semana una inédita tribuna en el diario Le Monde alertando de los peligros de la extrema derecha.

Se trata de una advertencia que vale también para las elecciones legislativas que celebrará Francia entre el 12 y 19 de junio, la próxima prueba de fuego electoral, que determinará el apoyo real con el que contará el presidente francés para llevar adelante su programa político en la asamblea de Francia y en la UE.

Hasta entonces, Macron dispondrá de dos meses para suavizar las inquietudes de un electorado francés muy fragmentado y reafirmarse como el sucesor de Angela Merkel al frente de la UE ante el titubeante canciller alemán Scholz, cuyo liderazgo ha quedado en entredicho en los escasos meses que lleva al frente de la coalición de gobierno en Alemania por sus mensajes confusos hacia Moscú.