GALICIA

Universitarios claman por las condiciones de los pisos de alquiler en Vigo: "Son insalubres"

Estudiantes denuncian que muchos de los apartamentos tienen desperfectos y que son inhabitables | Administradores de fincas recuerdan que las instalaciones deben ser seguras

Humedades en un piso alquilado.

Humedades en un piso alquilado.

Carlos Ponce

Cada verano, son miles los universitarios que buscan alojamiento en Vigo, bien porque son nuevos estudiantes y llegan de otras ciudades o bien porque deciden mudarse del piso en el que vivían antes. Lo que en ocasiones puede ser un una etapa ilusionante, este año se ha convertido en una auténtica pesadilla. En primer lugar, porque encontrar nuevo apartamento fue auténtica odisea. La falta de oferta y los elevados precios convirtieron en una misión casi imposible conseguir un piso antes del inicio del curso. Y muchos de los que se han alquilado o que están todavía disponibles para los universitarios, están en unas condiciones completamente “deplorables”, en algunos casos llegando hasta la insalubridad, con numerosos desperfectos y humedades.

Un episodio especialmente traumático lo ha vivido Nuria Alonso (nombre ficticio, pues no quiere relevar su nombre para evitar consecuencias), una joven lucense que se mudó a Vigo este año para estudiar Economía. Después de mucho buscar, encontró a última hora, poco antes del comienzo de las clases, un piso disponible en el centro de Vigo anunciado en una página web de alquiler de viviendas. Las fotos prometían, y lo apalabró a distancia porque no tenía más opción.

“Cuando llegué, firmé el contrato porque sino me quedaba en la calle. Pero la realidad no tenía nada que ver con lo que se podía ver en las fotos. El suelo estaba completamente levantado, la pintura de las paredes estaba dañada a causa de la humedad seguramente desde hace muchos años, los muebles son antiguos... No me voy porque tengo que vivir en algún sitio, pero he pasado momentos muy complicados. Estoy sola en una nueva ciudad y esto ha sido un palo muy duro. Además pago más de cuatrocientos euros, pese a que es un piso muy antiguo, tiene una sola habitación y tiene todos esos desperfectos. Y el casero se niega a hacerse cargo de las reparaciones”, explica esta joven.

Casos como el de Nuria hay muchos. Por ejemplo, Daniel Vidal, que este año tuvo que cambiar de piso porque sus dos compañeros acabaron la carrera y se fueron de Vigo. En su caso, buscaba un alojamiento pequeño. “Encontré un estudio. Cuando entré parecía todo normal. Pero pronto empezaron los problemas. El agua caliente funciona un día sí y cuatro no, hay problemas constantes de atasco de tuberías y ya se me ha inundado en varias ocasiones el baño... Y los propietarios no se quieren hacer cargo de las reparaciones necesarias, ni siquiera de arreglar la caldera. Ya estoy buscando algo para mudarme, pero de momento no encuentro nada que me pueda permitir”, afirma este universitario.

El Colegio Oficial de Administradores de Fincas de Galicia (Coafga) y distintos administradores de la ciudad confirman esta realidad. Recuerdan además que los pisos deben estar aptos para su uso y que se puede negociar con la parte arrendataria la ejecución de las obras pero que, en todo caso, deben tener unas condiciones mínimas de habitabilidad. Además, manifiestan que los pisos tienen que disponer de instalaciones seguras y actualizadas de gas, electricidad y agua.

Se pueden considerar no aptos para ser habitados aquellos pisos que tengan graves desperfectos o humedades insalubres, situación en la que se encuentran algunos inmuebles que están en el mercado de alquiler. También señalan que las fianzas que se piden son precisamente para reparar los desperfectos que se pudieran producir durante el tiempo que el inmueble esté alquilado y recuerdan que también se pueden reclamar otras garantías de pago para garantizar reparaciones o el cobro de rentas. Recalcan además que el colectivo de estudiantes goza de los mismos derechos que cualquier arrendatario y que los pisos que se pongan en alquiler para ellos han de ser adecuados, especialmente si el precio es elevado, como ocurre con frecuencia.

Los administradores de fincas colegiados también recuerdan que hasta el próximo 31 de octubre está abierto el plazo para solicitar subvenciones del Programa Bono Alquiler Joven de la Xunta de Galicia orientadas a facilitar el disfrute de una vivienda o habitación en régimen de alquiler o de cesión de uso a la juventud con escasos medios económicos.