SAN VALENTÍN

Esta iglesia de Madrid esconde los restos de San Valentín: el rincón más 'romántico' de la capital

Este templo de del centro de la capital permanece hoy abierto a las visitas

Imagen de la iglesia de San Antón.

Imagen de la iglesia de San Antón. / Secretos de Madrid

Madrid

No todo el mundo es consciente de que figuras como la de San Valentín realmente existieron. Y, mucho menos, que los restos mortales de este 'santo del amor' descansan en una conocida parroquia del centro de la capital. Si aún no tienes planes para hoy, siempre puedes acercarte con tu pareja a este rincón y examinar de primera mano los restos. Aunque advertimos de que la cena romántica posterior podría atravesarse...

¿Dónde están las reliquias de San Valentín?

El barrio de Chueca, además de bares de lo más exóticos y calles pintorescas, cuenta con una iglesia muy especial. La iglesia de San Antón, ubicada en el número 63 de la calle Hortaleza, exhibe en una urna de cristal -- ubicada en la parte derecha del templo -- las reliquias del santo. Allí reposa su cráneo, tibias y otros fragmentos del cuerpo del mártir. Hoy, Día de los Enamorados, el templo permanecerá abierto para quien quiera rendir culto a este sacerdote romano.

No es la única reliquia del santo que se relaciona con España. En la localidad zamorana de Toro y en el municipio aragonés de Calatayud también presumen de contar con restos del sacerdote. En el caso de Madrid, la teoría más aceptada es que estos restos fueron un regalo del Papa al rey Carlos IV, que habría cedido las reliquias a los escolapios, propietarios de esta iglesia.

¿Cuál es la historia de San Valentín?

Se ubica a San Valentín en el siglo III d.C. Concretamente, durante el mandato del emperador Claudio II. Este mandatario habría prohibido a los legionarios contraer matrimonio, ya que pensaba que combatirían mejor sin las distracciones fruto del amor. Valentín, sacerdote en Roma, decidió ignorar la voluntad imperial y empezó a casar a los soldados a espaldas de Claudio. Cuando fue descubierto, fue encarcelado y condenado a muerte.

El 14 de febrero del año 269, día de su muerte, devolvió la vista a la hija de su carcelero enviándole una carta firmada de la siguiente manera: 'Tu Valentín'. Este sería el origen de la tradición de mandar cartas de amor en esta marcada fecha. Más de un siglo después, el papa Gelasio I estableció el 14 de febrero como día de San Valentín para sustituir la fiesta pagana de las Pupercales, antigua celebración relacionada con la fertilidad.