GASTRONOMÍA

¡Arriba esas copas! Siete direcciones para brindar con buenos vinos

Madrid ha abrazado los ‘wine bars’ con entusiasmo: estos son perfectos para las reuniones prenavideñas

Los bares de vinos están de moda: ¿qué mejor sitio para brindar con amigos?

Los bares de vinos están de moda: ¿qué mejor sitio para brindar con amigos? / Propaganda

De un tiempo a esta parte se han multiplicado en la capital los locales en los que la carta de vinos va más allá de los lugares comunes. Denominaciones de origen menos exploradas, botellas de otras latitudes y referencias ecológicas y naturales hacen que cada vez haya más opciones entre las que elegir: ante este panorama, el neófito aprende y el experto disfruta. 

Los ‘wine bars’ están de moda y pueden ser el espacio perfecto para esas reuniones con amigos, colegas de trabajo o familiares que preceden al arranque de las fiestas navideñas. Aquí van siete, cada uno con su personalidad, en los que brindar antes de que el calendario de adviento tome carrerilla.

Bravo Wine Bar, en la calle de la Palma.

Bravo Wine Bar, en la calle de la Palma. / Bravo Wine Bar

Bravo Wine Bar

En el cada vez más animado tramo de la calle de la Palma entre San Bernardo y Conde Duque no dejan de florecer conceptos interesantes. Un año largo lleva ya abierto este bar de vinos, en el número 63 de la calle de la Palma, un proyecto del holandés Jean Pierre van Breugel, en el que hay una interesante (y cambiante) selección de vinos y también catas y eventos. Buena mezcla en la carta entre bodegas más grandes y otras más pequeñas. Con especial atención al vino nacional, también organizan sesiones dedicadas a tipologías foráneas, como los Beaujolais Nouveau franceses. Para picar, tablas de quesos, sobrasada con miel o boquerones en vinagre.

Propaganda

Sería injusto quedarnos en que Propaganda es el lugar perfecto para disfrutar de la riqueza vinícola italiana en sus dos locales (Libertad, 12 y Jorge Juan, 21). Eso es cierto, pero en la carta líquida se encuentra uno también una amplia variedad de 'champagnes', referencias de países como Alemania o Austria y hasta botellas del Nuevo Mundo. La propuesta gastronómica incluye delicias transalpinas como mortadela trufada de Bolonia, 'speck' del Trentino o 'porchetta' de Ariccia. También se fijan en la temporada y, por ejemplo, el otoño es época de ragú de jabalí, pato o ciervo. 

Masa

La reformada plaza de Olavide y sus aledaños hierven de propuestas gastronómicas en las que, eso sí, resulta complicado conseguir mesa. Masa (Trafalgar, 22) aterrizó hace unas semanas en Madrid procedente de Barcelona. Ambiente moderno, vinos naturales como corresponde y una cuidada selección de vinilos, en los que caben desde Yo la Tengo a Aphex Twin pasando por Stevie Wonder, conforman la propuesta de un establecimiento en el que beber y dejarse ver. Para comer, platos de raíz vegetal y postres clásicos como la tarta de queso, pero siempre con una vuelta de tuerca.

Fun Fun

Este es uno de esos bares en los que cualquier cosa puede suceder. Situado en las cercanías de Las Vistillas (Don Pedro, 20), se define como un bar de vinos naturales hechos en España. Imposible imaginar un sitio mejor para descubrir qué se está haciendo dentro de esta tendencia en las diferentes regiones. Organizan un Club de Vinos Naturales cada quince días en el que juntarse en torno a unas cuantas copas y unos platos para catar y poner nombre a productores y referencias. Para picar pueden aparecer en la carta desde preparaciones con polenta hasta recetas con espárragos, pasando por 'sushi'. No admiten reservas.

Muñeca Brava

Un espacio consagrado al vino pero también a la cultura. Esto es Muñeca Brava (Gutenberg, 5), un proyecto en el que se bebe sin complejos -no faltan los omnipresentes vinos naturales, pero también dedican sesiones a los generosos o a uvas en concreto, como la Cabernet Franc- Para comer, empanadas y pizzas con sello argentino. Completa el plan una animada agenda de actividades como conciertos, cursos de tango, lecturas de tarot…

La Franchutería

El nombre lo delata: en este local (Vallehermoso, 52) se mira más allá de los Pirineos para dar forma a la carta de comida como a la de bebida. Vinos tintos, blancos y rosados importados de denominaciones de origen como Borgoña, Côtes de Provence o Sancerre se convierten en protagonistas a la hora de maridar propuestas como la 'tartiflette' -receta a base de queso, patatas cocidas, cebollas, bacon y 'crème fraîche'- o la 'raclette'. En la carta de vinos también hay sitio para algunas referencias españolas, para fomentar los brindis transfronterizos.

Gastón Wine Bar

La primera sucursal del bar de vinos mexicano Gastón abrió en el número 11 de la calle Lagasca el pasado verano. La fórmula sigue a rajatabla el ADN del ‘wine bar’ moderno. Vinos y vinilos en un ambiente sofisticado y acogedor. Tremendo viaje el que propone el menú de vinos, donde se viaja por el Penedés, por Jumilla, pero también por la Alsacia o por el Piamonte. Los tragos se complementan con una oferta de coctelería donde caben clásicos como el espresso martini o el negroni en versiones sorprendentes, con aguacate como ingrediente añadido. La carta comestible va cambiando cada día, pero incluye bikinis, ostras y platos de inspiración mexicana, como el maíz en su salsa. No se reserva.