INFRAESTRUCTURA

Los vecinos de la A5 reclaman a Almeida que incluya todos los pasos subterráneos en el soterramiento

Residentes de Campamento y Aluche se manifiestan para denunciar el estado de los pasadizos para cruzar la A5 y volver a exigir que el túnel se extienda hasta la Avenida de los Poblados

Vecinos de la A5 durante una de las manifestaciones que han celebrado este año por el soterramiento.

Vecinos de la A5 durante una de las manifestaciones que han celebrado este año por el soterramiento. / Jesús Hellín

Será, al menos, la cuarta ocasión en que se manifiesten este año. Vecinos de los barrios de Aluche y Campamento, hoy separados por la brecha que supone la A5, saldrán este jueves nuevamente a la calle para protestar por el soterramiento de la autovía. No porque se vaya a hacer, algo que llevan años esperando, sino por cómo se va a hacer.

Durante la pasada legislatura, aseguran, se les prometió que el túnel cuya construcción se va a acometer llegaría desde la Avenida de Portugal hasta la Avenida de los Poblados. El proyecto final, en cambio, establecía dos fases para la ejecución y en la primera, la que se va a realizar durante los próximos dos años, solo llegará hasta la Avenida del padre Piquer. La diferencia, argumentan, no es menor, pues son muchas las viviendas que seguirán a escasos metros de la carretera, mientras que si se extendiera el subterráneo hasta la Avenida de los Poblados, los edificios que quedarían junto a la vía serían cuarteles en desuso.

Pero además acumulan otro motivo de descontento. Lo que llega hasta la Avenida Padre Piquer, apuntan, no es el túnel como suele decir Cibeles, sino la rampa de acceso o salida del mismo. La boca del túnel, insisten, estará 700 metros más cerca de la Avenida de Portugal, en la calle Illescas, lo que, además de seguir dejando varios bloques de viviendas expuestos al humo y los ruidos de los 80.000 vehículos que a diario circulan por la A5, mantendrá abierto el paso peatonal subterráneo existente a la altura de Pedro Piquer, en condiciones de grave deterioro.

Las obras de soterramiento de la A5 permitirán que sobre la superficie se extienda lo que desde el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento que dirige Borja Carabante han bautizado como Paseo Verde del Suroeste, una especie de parque lineal a la manera de Madrid Río, que facilitará el paso a pie entre lo que hoy son las dos orillas de la autopista. Actualmente, en el tramo que será soterrado en la primera fase, hay casi una decena de pasos, algunos para el tráfico y los peatones y otros exclusivos para peatones además de una pasarela ciclista.

Preocupación vecinal

El de Padre Piquer es uno de ellos y supone un obstáculo importante, particularmente para personas mayores y con movilidad reducida debido a los escalones o las largas rampas "que incumplen la normativa", según expone la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM). Habitantes de los barrios de Aluche y Campamento demandan el cierre de los pasos subterráneos y la extensión del soterramiento para que se pueda cruzar en superficie. Y para ello han grabado un vídeo en ese paso de Pedro Piquer, el más usado en la zona, cruzado cada día por unas 10.000 personas, que han hecho llegar al alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, a través de la red social X. En él denuncian la suciedad, los malos olores, la escasa iluminación ya la sensación de inseguridad que genera, particularmente por las noches.

"Estos subterráneos tienen que desaparecer, llevamos más de 50 años teniendo que cruzar por ellos", sostiene Andrés Piñeiro, portavoz de la Asociación Vecinal de Campamento. "El Ayuntamiento tiene que pensar en la movilidad de las personas y no solo en la del vehículo privado. Tiene que pensar en las personas mayores de nuestros barrios que llevan viviendo aquí toda la vida".

Es, precisamente, junto al paso de Padre Piquer donde tanto la Asociación Vecinal de Campamento como la Asociación de Vecinos de Aluche han llamado a una concentración el jueves por la tarde en la que además de llamar la atención sobre las alternativas para cruzar la autovía y volver a exigir la prolongación del soterramiento hasta la Avenida de los Poblados en una primera fase, mostrarán su preocupación por la duración de las obras.

La semana pasada, Almeida anunció que ya se había adjudicado el contrato para la redacción del anteproyecto de la segunda fase de soterramiento, que sepultará el tráfico a lo largo de más de dos kilómetros adicionales, entre la Avenida del Padre Piquer y la Avenida de la Aviación Española. La empresa adjudicataria dispone ahora de 12 meses para la elaboración del proyecto, cuya ejecución será cofinanciada por el Ministerio de Vivienda en el marco del acuerdo alcanzado con el Ayuntamiento para el desarrollo de la Operación Campamento.

Los vecinos recelan de que los trabajos para completar esta segunda fase puedan extenderse hasta 2030 o 2032. Y temen que el tramo entre Illescas y Padre Piquer llegue a quedar sin cubrir al final de la obra, un extremo que desmienten fuentes del Área de Urbanismo.