EL PERIÓDICO MEDITERRÁNEO

Un pueblo de Castellón de 262 habitantes, en busca de sus orígenes: "Queremos conocer nuestro pasado"

Quieren recuperar la Carta Puebla de la localidad

Imagen aérea de El Toro, en la comarca castellonense del Alto Palancia.

Imagen aérea de El Toro, en la comarca castellonense del Alto Palancia. / MEDITERRÁNEO

Concha Marcos

El Toro es una pequeña población enclavada en la comarca del Alto Palancia, en la provincia de Castellón. Con 262 habitantes, el municipio lleva una década creciendo en población “y plantando cara a la amenaza de la despoblación”. Una tarea que, tal y como manifiesta el alcalde, “es un deber que se trabaja día a día porque nunca se descansa”.

En este objetivo enérgico que lidera un joven alcalde que tiene su hogar y familia en la población, no solo se trabaja por traer inversiones que creen futuro, también por buscar orígenes “que nos recuerden quiénes fuimos para sentirnos orgullosos de una herencia que nos hace indomables, voluntariosos y tenaces”.

José Arenes busca la carta fundacional del municipio. Para ello no ha dudado en desplazarse hasta Teruel para entrevistarse con la dirección del Archivo Histórico Provincial de la vecina provincia con el objetivo “de buscar el legado de nuestros antepasados”.

“Saber más de nosotros mismos nos reconocerá como pueblo. Nos ayudará a entender nuestra historia, nuestros principios, las luchas que nos dieron derechos y el esfuerzo que hizo de esta localidad la tierra privilegiada que hoy se ha convertido en nuestro hogar”, ha declarado Arenes.

Reunión en el Archivo Histórico Provincial de Teruel

En este sentido, “y dado que todos los pasos nos guiaban hasta Teruel nos hemos entrevistado con la directora del Archivo Histórico Provincial con el reto de conseguir esos fueros que nos concedieron el título de pueblo”. Hacerlo “porque aquí nunca estamos parados”.

“El pasado mes de noviembre descubrimos una antigua necrópolis musulmana que podría estar datada en el siglo XII. En paralelo estamos restaurando los lienzos de nuestro castillo. Y hemos acabado de rehabilitar bienes patrimoniales de gran interés como el altar de la Divina Pastora, del siglo XVII”. Porque “cuidar de los tesoros que nuestro municipio posee es parte de nuestra identidad y carácter. El mejor legado que podemos dejar a nuestros hijos”, ha considerado Arenes.