MIGRACIONES

La inmigración irregular cayó en 2022 un 25,3 % en la península y Baleares

Aunque hasta finales de marzo el aumento de la inmigración ilegal era del 77 %, el ritmo de las llegadas comenzó a ralentizarse en abril coincidiendo con el apoyo de España a Marruecos

Llegada de un grupo de migrantes subsaharianos a la costa de Lanzarote. EFE

Llegada de un grupo de migrantes subsaharianos a la costa de Lanzarote. EFE / EFE

Un total de 12.955 personas arribaron en 2022 a las costas de la península y del archipiélago balear en un total de 1.206 embarcaciones, lo que supone una caída del 25,3 %, con 4.386 personas migrantes menos que el año anterior. El año pasado llegaron irregularmente a España un total de 31.219 inmigrantes por vía marítima y terrestre, lo que supone una caída del 25,6 % respecto a 2021, aunque las entradas de inmigrantes que han saltado las vallas de Ceuta y Melilla han aumentado en 2022 un 24 %.

Es el balance provisional del año hecho público este martes por el Ministerio del Interior, que constata que aunque hasta finales de marzo el aumento de la inmigración ilegal era del 77 %, el ritmo de las llegadas comenzó a ralentizarse en abril -coincidiendo con el apoyo de España a la propuesta marroquí de autonomía para el Sáhara Occidental- y a mediados de agosto empezó el descenso en los flujos migratorios.

La inmensa mayoría de los 31.219 inmigrantes que han entrado en España de forma irregular lo han hecho por vía marítima: 28.930 en 1.704 embarcaciones, un 27,9 % menos que en 2021, cuando llegaron 40.100 personas en 2.149 pateras. Más de la mitad de esas personas (15.682) arribaron a las costas del archipiélago canario, donde las llegadas cayeron por primera vez, desde que se reactivó la Ruta Atlántica en 2019, en la última quincena del pasado septiembre (un 4,7 % menos respecto al mismo período de 2021).

Ralentización de las llegadas en el último trimestre

Un descenso precedido por la ralentización en el ritmo de llegadas a las islas a lo largo del año: en febrero crecían un 134 %; en marzo, un 70 %; en abril y en mayo, un 50 %; en junio, un 25 %; en julio, un 27 %; en agosto, un 14 %; y en la primera quincena de septiembre, un 2 %. Y que ha continuado en el último trimestre del año -con caídas que oscilan entre el 13 % y el 25 %- y experimentado el mayor descenso en la última quincena de diciembre: un 29,7 % inferior respecto al mismo período del año anterior.

Desde que se reactivó la Ruta Canaria, octubre y noviembre venían aportando alrededor de dos tercios de todas las llegadas de cada año, porque en esos meses coinciden las condiciones más favorables para la navegación en la zona.

En 2022 las rutas marítimas que conducen a la península y Baleares desde el norte de África (Estrecho de Gibraltar, Mar de Alborán y Mediterráneo) también han experimentado importantes descensos desde marzo, tras comenzar el año con dos meses de crecimiento en las entradas por estas vías. Mucho más acusado fue el descenso registrado en las costas de Ceuta, a donde llegaron 124 inmigrantes de forma irregular frente a los 404 de 2021 (un 69,3 % menos); mientras que Melilla recibió 169 personas por vía marítima, 130 más que el año anterior.

Sin embargo, por vía terrestre -saltando la valla fronteriza- han aumentado las llegadas en ambas ciudades autónomas en lo que va de año con la entrada de 2.289 inmigrantes, 444 más que el año pasado, lo que supone un aumento del 24,1 %. A Melilla, donde el pasado 24 de junio fallecieron al menos 23 personas intentando saltar la valla, han llegado 1.175 (un 7,6 % más) y 1.114 a Ceuta (un 47,9 % más).

En un comunicado, el Ministerio del Interior ha valorado el "progresivo" descenso de la inmigración irregular, que, según subraya, se apoya en una política migratoria que promueve la cooperación con los países de origen y tránsito y refuerza la lucha contra las mafias que trafican con personas. Una "doble estrategia" que, según el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska, permite evitar en origen cerca del 40 % de las salidas hacia el territorio español.