IBIZA

Duelo perinatal en grupo: "Hay quienes no entienden que llores sin consuelo por alguien que no ha nacido"

Varias personas que vivieron la muerte de su bebé se reúnen en un grupo de ayuda en el centro cultural de Puig d’en Valls que está abierto a quien lo necesite

Una de las madres sostiene una jirafa de madera que tenía preparada para su bebé.

Una de las madres sostiene una jirafa de madera que tenía preparada para su bebé. / VICENT MARI

Marta Torres Molina

Era una ecografía normal. Pero la profesional que la atendía vio algo raro. Estaba en la semana 28 de gestación y no había mucho líquido amniótico. En unos segundos, se vio rodeada de sanitarios. La enviaron a Mallorca donde, tras varias pruebas, les dijeron que no había nada que hacer. "Mi hijo nació sin vida a las 30 semanas", indica la madre, recordando aquel funesto día de febrero de 2021.

Tras la tragedia, la soledad. "No había nada", señala. Una amiga de Sevilla, de donde es ella, había pasado "por algo parecido" y le habló de los grupos de apoyo y de una asociación. "Allí me dijeron que aquí no había nada, que lo más cercano estaba en Mallorca", señala. Así, ella y su marido entraron en contacto con una asociación de aquella isla: "Nos ayudó mucho y nos sigue ayudando". Poco después, tras encontrarse en Ibiza con otras familias que habían pasado por lo mismo, decidieron montar aquí un grupo de apoyo mutuo: "A todas nos pasó lo mismo. No encontramos nada y nos sentimos muy solas", indica. Así, hace unos seis meses, con el objetivo de que ninguna mujer se encontrara sin ningún lugar al que acudir, nació Tribu de estrellas.

El último miércoles

"Hablamos con una psicóloga de Mallorca sobre si podíamos montar algo, porque no somos profesionales. Ella nos explicó que existían los grupos de ayuda mutua, en los que puedes hablar con otras personas que han pasado por lo mismo que tú y te comprenden mejor", relata. Se reúnen una vez al mes. En estos momentos, el último miércoles de mes, a las cinco y media de la tarde, en el centro cultural de Puig d’en Valls.

"Pedimos un espacio al Ayuntamiento de Santa Eulària y desde el primer momento nos dijo que sí", explica, agradecida, la impulsora de Tribu de Estrellas. Al principio los encuentros se celebraban en el Club Náutico de Santa Eulària, pero en Puig d’en Valls tienen más intimidad. El grupo está abierto a cualquier persona que lo necesite. Sólo tiene que contactar con ellos a través de los perfiles de Instagram o Facebook de Tribu de Estrellas. Da igual cuándo vivió la muerte del bebé. Algunos de los participantes lo han sufrido recientemente. Otros, hace años. "Esto nunca se va. Lo tienes siempre ahí. Piensas ‘hoy habría cumplido un año’, ‘ahora empezaría a caminar’... Es algo que no vas a olvidar nunca. Tienes que aprender a vivir con ello", relata la impulsora de Tribu de Estrellas, que en estos momentos está planteándose la posibilidad de constituirse como asociación.

Los psicólogos de Mallorca la estuvieron llamando "durante tres meses" para ver cómo se encontraba. Algo que la sanidad pública no ofrece a todas las mujeres. Muchas de ellas tienen que afrontar el coste de una terapia en un psicólogo privado. Si pueden asumirlo. De hecho, algunas de las familias han llegado a la tribu a través de la recomendación de una psicóloga. "Si hay algún alma caritativa, algún profesional de la psicología o alguna institución que quiera ayudarnos, se lo agradeceríamos", indica la impulsora del grupo.

Todas las mujeres que han vivido la muerte del bebé que estaban esperando o de su recién nacido han sentido la incomprensión de su dolor. Palabras que, pretendiendo ser un consuelo, se les clavan en el alma. "Hubiera sido peor su hubiera pasado más adelante". "Ya tendrás otro". "Seguro que en nada vuelves a estar embarazada". Las matronas del Área de Salud pitiusa que acompañan a las familias en esos partos sin vida insisten en que esas mujeres son madres. Y han perdido un hijo. No hay que menospreciar su dolor. Ni su duelo. "Cuando se te muere alguien se da por hecho que te tienen que dar el pésame, pero como esa personita no había llegado a nacer viva parece que no ha pasado nada", explica antes de señalar que muchas personas no saben cómo dirigirse a ellos. "Es complicado", reconoce.

Recordar a sus estrellas

En el grupo cuentan sus historias. Hablan de cómo se sienten. Y recuerdan a sus estrellas. Ayla. Sasha. Carlos. Eva. Ainara. Nehuén. Jimena. Las gemelas. Oliver. Porotito. Sus hijos, sus hijas, que no llegaron a vivir. De ellos conservan, como tesoros, la pequeña jirafa de madera con la que esperaban que jugara algún día, la ecografía 4D en la que se le aprecian ya los rasgos de la carita. la huella de un pie diminuto...

Es duro, confiesan. "Aunque lo sea, mucho, cuando lo revives no lo haces desde el dolor, es una forma de hacerle un homenaje, recordando a tu niño", explica antes de confesar que en este casi medio año que lleva en el grupo se ha dado cuenta de que lo que más le está ayudando a ella a aceptar lo que le ha pasado "es poder ayudar a los demás". "Poder darle, de alguna forma, sentido a este dolor, apoyar a otros que lo necesitan, decirles que, más o menos, hay luz al final... Eso te ayuda", comenta. No es la única a la que le pasa, según las conversaciones que han mantenido repetidamente algunas de las integrantes de Tribu de Estrellas: "A las que estamos mejor el grupo nos aporta esto. A las que están peor les aporta ayuda". Eso sí, ni las que ya llevan tiempo trabajando ese dolor se libran de momentos duros, complicados, tristes, pinchazos de dolor. "Hay días, meses, fechas señaladas... Un día puedo estar ayudando mucho y al mes siguiente me están ayudando a mí", reflexiona antes de destacar que una de las cosas que más se repiten en este tipo de grupos de apoyo es que en esos crudísimos momentos cualquier sentimiento es válido. "Tienes derecho a sentirte como quieras", insiste.

Sobre el mejor momento para acercarse al grupo, no tiene una respuesta clara: "Cuando la persona lo siente". Ella considera que "cuanto antes, mejor". Pero es una opinión "muy personal", matiza. "Cuando te pasa algo así te sientes muy perdida y a veces no tienes a alguien a tu lado que te ofrezca un apoyo total y necesitas a una persona a quien llorarle desconsoladamente", comenta antes de continuar: "Muchas personas no entienden que llores sin consuelo por alguien que no ha nacido. No lo comprenden. No entienden que tengas algún recuerdo de esa persona. Cuando se te muere un padre o una madre no quitas todas las fotos".