VUELTA DEL REY EMÉRITO

Las negociaciones que permitieron el regreso del rey emérito tras cuatro intentos frustrados

Tres meses de negociaciones y varios intentos fallidos han sido necesarios para que Juan Carlos I haya podido volver a España dos años después de su marcha

Juan Carlos I.

Juan Carlos I.

Héctor González

Héctor González

Este lunes se ha reunido Juan Carlos I con su hijo y actual rey, Felipe VI, en el palacio de la Zarzuela después de haber pasado cuatro días en Sanxenxo. Es la última etapa del primer viaje de regreso a España del rey emérito tras 658 días de exilio en Abu Dabi. Una visita que se ha materializado tras tres meses de complejas negociaciones entre el Gobierno, el actual Jefe del Estado, el exmonarca y una persona mediadora cuya identidad no ha trascendido; y que deja como saldo el descontento del Ejecutivo y una opinión dividida entre la sociedad española.

El Gobierno presidido por Pedro Sánchez recrimina a Juan Carlos I que no haya cumplido con la promesa de privacidad pactada para su viaje de regreso, así como que se haya negado a dar explicaciones y pedir perdón. "¿Explicaciones de qué?", ha sido la respuesta del emérito a las preguntas de los periodistas sobre las polémicas judiciales que rodean su figura. Una contestación que resume la estancia del emérito en Pontevedra, donde ha sido acogido por su amigo Pedro Campos y el resto de su círculo íntimo tras llegar en un jet privado facilitado por el jeque emir Mohamed bin Zayed y que ha costado 100.000 euros.

"Podría haber sido más cuidadoso en esta primera visita", ha lamentado la portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez. Pero no ha sido así: Juan Carlos I ha aprovechado su paso por Sanxenxo para darse baños de masas entre los vecinos de la localidad, participar en la regata del Trofeo Viaje Interfrías, ganada por el 'Bribón', el velero del exmonarca; y hablar de velas y olas sin hacer caso de cualquier posible tormenta.

Varios intentos frustrados de regreso

Una "muy buena" experiencia, según ha declarado el emérito, que tendrá una segunda parte en breves. Juan Carlos I ya ha anunciado un más que posible regreso en junio con motivo de la celebración del Campeonato del Mundo de vela, que se celebrará también en Sanxenxo entre el 10 y el 18 del próximo mes. Antes de este primer retorno y su casi segura continuación, han sido necesarias múltiples negociaciones y cuatro intentos frustrados.

Según publica el diario El Mundo, estos cuatro intentos previos han contado con una figura mediadora consensuada por las tres partes involucradas: Moncloa, Zarzuela y el emérito, que pertenece al círculo de amistades del actual monarca, Felipe VI. Dicho intermediario ha estado presente en todos las negociaciones previas, tratando de conciliar los intereses dispares de los implicados.

El rey emérito ha manifestado en diversas ocasiones que, pese a que de momento mantendrá su residencia fija en Abu Dabi, sus intenciones son volver a pasar largas temporadas en España. La primera intentona fue en las Navidades de 2022, poco después de su marcha. La siguiente llegó en febrero de 2021, con motivo del 40 aniversario del fracasado golpe de Estado del 23F, uno de los momentos álgidos, y también discutidos, del reinado de Juan Carlos I. La tercera ocurrió en el verano de 2021 y, finalmente, la última y exitosa, este pasado mes de marzo de 2022.

Un éxito posible gracias a que el 2 de marzo la Fiscalía del Tribunal Supremo dio carpetazo a todas las investigaciones abiertas contra el exmonarca por delitos fiscales, de blanqueo de capitales y de cohecho, prescritos o no perseguibles a pesar de haber encontrado pruebas fehacientes contra él. Esta decisión judicial terminó de hacer posible el regreso del emérito, pero no ha cerrado las heridas abiertas en los distintos frentes.

Entre ellas, la irritación causada al Ejecutivo por haber incumplido los términos del acuerdo alcanzado. "El mismo dijo que iba a volver a España sabiendo que debía trabajar para facilitar la tarea de Felipe VI y que por eso hablaba de privacidad", ha reprochado la portavoz de los socialistas. No es la única voz que lamenta el daño a la imagen de la monarquía y de la figura de Felipe VI que esta visita trae consigo. “Aquí estoy y eso es lo importante”, ha afirmado Juan Carlos I, según las declaraciones de fuentes cercanas recogidas por El Mundo.