Opinión | TRIBUNA

Diana Morant | Ministra de Ciencia e Innovación

La ciencia y la innovación, nuestra bandera de progreso y bienestar

La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant

La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant / EFE/Jesús Diges

Octubre de 2031: en estos momentos, desconozco quién será por entonces el ministro o ministra de Ciencia e Innovación (espero que siga existiendo esta cartera), o qué partido o partidos gobernarán en nuestro país. No puedo saber qué titulares leeré en la portada de EL PERIÓDICO DE ESPAÑA una mañana de otoño de 2031.  

Pero, si de algo estoy segura, es de que la ciencia seguirá protagonizando las noticias positivas: salvando vidas, protegiendo a las personas y creando soluciones para mejorar nuestro día a día y la salud del planeta. Lo sé, porque así ha sido durante siglos, aunque no siempre con un merecido y proporcional reconocimiento social y político. Pero, sobre todo, lo sé porque este Gobierno de hoy ha priorizado como nunca la ciencia y la innovación como motor de transformación del país, con el mayor presupuesto en ciencia e innovación de la historia . Tenemos los recursos y el mejor mecanismo: el diálogo. 

Por primera vez en España, hemos establecido un marco de trabajo colaborativo con todos los agentes implicados: organizaciones científicas, universitarias, empresariales, sindicales y todas la fuerzas políticas. Juntos estamos elaborando un gran Pacto por la Ciencia y la Innovación que consiga fortalecer el sistema, salvaguardarlo de los vaivenes políticos y asegurar presupuestos duraderos y estables. Un pacto que acometeremos con la reforma de la Ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación. Y además contamos también con una ciudadanía militante de la ciencia que, con ejemplos como la vacuna contra el coronavirus, ha entendido que la ciencia nos salva la vida. Nuestro reto es hacer de la ciencia y la innovación la bandera del progreso y el bienestar social de este país. 

"Hay que atraer a las niñas a vocaciones científicas, combatir los sesgos de género y garantizar entornos igualitarios"

Rumbo hacia ese 2031 y más allá, desde el Ministerio de Ciencia e Innovación trabajamos con tesón para que las personas que investigan, emprenden e innovan cuenten con unas condiciones y retribuciones laborales a la altura de su excelencia. Atraer y retener talento innovador, la tinta con la que se escribe un futuro más verde, digital e inclusivo, es nuestro objetivo prioritario. Por ello, ya hemos activado un Plan por el Talento en Ciencia e Innovación, que reconoce, recompensa y estimula el talento investigador e innovador, con mayor estabilidad laboral, mejores salarios y más contratos tanto en el sector público como en el privado, donde queremos fomentar la cultura de la innovación. 

El Plan por el Talento permitirá la contratación de más de 2.500 doctores en los tres próximos años. Por otra parte, 1.083 personas podrán incorporarse de forma estable como personal investigador, técnico y de gestión de la I+D, gracias a la mayor oferta pública de empleo en el sector científico de estos últimos 15 años, lanzada por el Gobierno de Pedro Sánchez que, desde sus inicios hasta hoy, ha aprobado también un total de 2.746 plazas de funcionario investigador de los organismos públicos de investigación de nuestro país. 

En 2031, habrá también más mujeres dedicadas a áreas STEM (ciencias, tecnología, ingenierías y matemáticas) y un mayor porcentaje de catedráticas, rectoras y directoras de centros de investigación, que en ambos casos son hoy una clamorosa minoría. Así será si continua dando frutos nuestro labor por la igualdad en el sistema de la ciencia y la innovación, donde las mujeres siguen sufriendo la brecha de género. Desde este ministerio seguiremos desarrollando medidas para atraer a las niñas a vocaciones científicas, combatir los sesgos de género, facilitar su pleno desarrollo profesional, garantizar entornos igualitarios e inclusivos e integrar la dimensión de género en el contenido de proyectos de I+D+I. Sumando a las mujeres, habremos sumado productividad, progreso y tomaremos mejores decisiones en el camino hacia un mundo mejor.  

Si seguimos remando juntos, la España de 2031 será un país recuperado económica, social y emocionalmente de la crisis del covid-19. Será un país más resiliente, que habrá acometido las transformaciones necesarias de sus sectores productivos en torno a la sostenibilidad y la digitalización. El Ministerio de Ciencia e Innovación habrá contribuido a ello como principal proveedor de conocimiento y continuará ejerciendo su misión esencial: prever las necesidades de futuro de la sociedad, el mercado y la industria; identificar las tecnologías que las puedan cubrir y apoyarlas económicamente.  

Por último, seguiremos acercando la ciencia y la innovación a todas las casas y rincones de España, como instrumento de empoderamiento ciudadano y de cohesión social y territorial. Seguiremos reforzando esa ciencia vertebradora a través de la la divulgación, la digitalización, la colaboración público-privada y la cogobernanza con las comunidades autónomas y los municipios. 

En conclusión, si seguimos trabajando en esta línea, en 2031 la ciencia continuará estando varios pasos por delante de nuestros problemas, pero esta vez contará con un sistema estable, que facilitará aún más la labor de nuestra comunidad científica e innovadora de generar hoy el conocimiento que hará posible los productos, servicios y tecnologías que nos salvarán la vida mañana.