POLÉMICA CON BILDU

Ayuso desborda a Feijóo y pide aplicar el artículo 11 de la ley de partidos contra Bildu: "No son herederos de ETA, son ETA"

La dirigente popular continúa elevando el tono contra Sánchez y la formación abertzale

Isabel Díaz Ayuso: "ETA está viva, está en el poder y vive de nuestro dinero"

PI Studio

Elena Marín

Elena Marín

Isabel Díaz Ayuso vuelve a ir un paso más allá en su estrategia de campaña y presiona a su propio partido y su presidente, Alberto Núñez Feijóo, para instar la ilegalización de Bildu. Esta vez no ha sido solo un llamamiento general sino que ha ido a lo concreto. "Por la ley de partidos, por el artículo 11, se puede instar al Congreso y al Senado a que inicien esos trámites en la sala competente", ha señalado.

Ayuso llegaba al desayuno con Europa Press con los deberes hechos de casa, con el mensaje preparado aunque ha esperado a que le preguntaran por este asunto para explicar que no era un capricho: "Me lo he mirado". Ha respondido con un "sí" rotundo ante la pregunta de si habría que ilegalizar la formación y lo ha explicado así: "Sí, lo soy, porque han ido mutando con diferentes collares durante este tiempo", antes de criticar que "el Tribunal Constitucional cedió" cuando decidió permitir su participación en la política. Poco antes, había sido aún más rotunda: "No son herederos de ETA, son ETA". Una frase que era habitual entre los políticos del PP hace 20 años cuando comenzaron los primeros trámites para la ilegalización de los herederos de Herri Batasuna pero que había quedado fuera del debate político una vez que el Tribunal Constitucional dictó su sentencia hace doce años.

Propuesta propia de Vox

Con esta petición, Ayuso deja claro que no tiene intención de soltar el regalo que le ha hecho la propia Bildu han incluir en sus listas a 44 condenados por su vinculación con ETA y pone también de manifiesto que sigue su camino sin mirar si en Génova se apunta en otra dirección. El artículo 11 de la ley de partidos señala que "el Congreso de los Diputados o el Senado podrán instar al Gobierno que solicite la ilegalización de un partido político, quedando obligado el Gobierno a formalizar la correspondiente solicitud de ilegalización, previa deliberación del Consejo de Ministros". Es decir, puede pedir que se inicien los trámites. La petición de la dirigente madrileña, la apelación a este artículo, está más cerca de la propuesta de Vox, que ya ha solicitado la ilegalización de Bildu en el Congreso, que a la de su partido, que da por perdida esta iniciativa porque jurídicamente no lo ven viable.

Este pasado martes Alberto Núñez Feijóo fue muy duro en el Senado con el mismo mensaje que Ayuso sobre la connivencia de Pedro Sánchez con Bildu, pero al menos hasta ahora ha desviado la posible ilegalización de Bildu a los servicios jurídicos, insistiendo en que son la Abogacía y la Fiscalía los que deben actuar y analizar si la ley, en sus términos actuales, permite tachar del mapa electoral a Bildu. Y atendiendo a lo que dicen sus propios servicios jurídicos, el final de ese trámite que propone Ayuso, señalan en el PP, se conoce, por lo que "no tiene sentido" comenzarlo.

Cordón sanitario

En todo caso, Feijóo sugería esta semana una posible revisión de la ley para que no haya más dudas en el futuro sobre lo que se puede hacer. Ella lo tiene claro: "Se puede revisar y deberíamos intentarlo. No es retorcer la ley". Una vez asumido que jurídicamente el margen para actuar contra Vox es limitado, Feijóo intenta forzar a Sánchez a favor de un cordón sanitario contra la formación de Santiago Abascal mediante una votación en el Congreso para rechazar pactos con los partidos que lleven condenados por terrorismo en las listas o en su estructura orgánica.

La dirigente popular ha dedicado la primera mitad de su intervención, casi 15 minutos, a la polémica de Bildu, a hacer un recorrido histórico por todo lo que supuso ETA para la población del País Vasco y la española, recordando "a los jóvenes que igual no lo saben", que "hubo un tiempo en el que lo primero" que hacían muchas personas era "mirar los bajos de los coches para ver si había una bomba lapa". Delante, Carlos Iturgaiz, presidente del PP vasco al que Ayuso ha llamado "mi jefe" porque va cerrando la lista de Bilbao. Este próximo sábado por la tarde acudirá allí para su único mitin fuera de Madrid. La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha asistido también al desayuno, pero no ha estado el tiempo suficiente para escuchar la petición de Ayuso.