Empleo

EPA | Leve repunte del paro hasta el 12,7%, a las puertas de un otoño incierto

La temporalidad registra una caída sin precedentes durante los primeros seis meses de la reforma laboral

Una oficina de empleo.

Una oficina de empleo. / EP

Gabriel Ubieto

El 

mercado laboral 

se adentra en la incierta recta final del año con un leve repunte del 

paro

, algún signo de enfriamiento en la creación de 

empleo 

y una mejora generalizada en la calidad del mismo. La tasa de desempleados pasó del 12,5 al 12,7% en el tercer trimestre, lo que deja un número total de desocupados por debajo de los tres millones de personas, el más bajo desde la crisis del 2008. Pese a las previsiones macroeconómicas que apuntan hacia reducciones drásticas del crecimiento en 2023 o incluso a la recesión técnica, el número de horas trabajadas en el conjunto de la economía sigue al alza y en los centros de trabajo se opera a más actividad que antes del covid, según los datos de la encuesta de población activa (EPA) publicados por el INE este jueves.

El final de la campaña de verano deja un balance con algo más de paro, pero también algo más de empleo, algo que es posible si más personas en edad de trabajar se suman al mercado de trabajo, como ha sido el caso. El tercer trimestre del 2022 cerró con más ocupados que el anterior, concretamente unas 77.700 personas, hasta un total de 20,5 millones de trabajadores en activo. Nunca antes en España había habido tanta gente ocupada al mismo tiempo. Esa es la principal nota positiva, en un escenario especialmente complicado por el alza de precios que ahoga el poder adquisitivo de las familias y un encarecimiento de los tipos de interés y de los suministros que amenaza a las empresas.

El crecimiento, no obstante, da señales de cierto agotamiento tras dos años de récord tras récord durante la salida de la crisis del covid. Si bien se han creado más empleos que en el tercer trimestre del 2019 -donde ya había signos de enfriamiento tras la lenta salida de la crisis del 2008-, es el dato más discreto en la última década. Ello lo corrobora el dato desestacionalizado de empleo, que resta el componente estacional de las ultimas trazas del verano y revela un principio de desaceleración, con una variación trimestral del –0,06%. Los gremios que más actividad han perdido durante estos meses de encarecimiento de la energía y los suministros son la agricultura, las industrias extractivas y las actividades administrativas, que han perdido entre el 3 y el 13% de horas trabajadas en el último año.

La creación de empleo baja una marcha y se resiente de un contexto adverso, algo que hasta ahora no había ocurrido. Pero la calidad del empleo que se crea es mejor. La parcialidad ha bajado, así como la temporalidad, beneficiando ambas tendencias especialmente a las mujeres. Si la principal explicación de la pobreza laboral es la falta de horas para trabajar, este tercer trimestre hay menos españoles que querrían echar más horas en el trabajo pero no pueden. Los ocupados que no tienen una jornada completa bajan del 13,8% al 12,8%.

Aunque la mejora más substancial en la ocupación se visualiza en la estabilidad. Este tercer trimestre se cumple medio año con las normas de contratación de la reforma laboral en vigor. Y el resultado es el siguiente: La reforma comenzó a operar con una eventualidad que afectaba al 22,1% de los asalariados del sector privado. Ahora ese porcentaje ha caído hasta el 17,5%, una proporción muy superior a la media europea -el problema no ha desaparecido, ni mucho menos-, pero deja su nivel más bajo de la estadística disponible. Es la primera vez que la temporalidad baja en un contexto de creación de empleo, pues hasta ahora el número de eventuales solo se reducía durante las crisis económicas. Las empresas despedían y los primeros en salir eran los temporales.

Casi un millón de hogares en paro

El aumento de la tasa de paro se ha cebado principalmente entre el colectivo de jóvenes. La tasa de desempleo entre los menores de 25 años subió 10 veces más (2,49 puntos) que entre el conjunto de la población (0,2 puntos) este tercer trimestre, hasta colocarse en el 31%. Actualmente hay medio millón de menores de 25 años que buscan trabajo pero no lo encuentran y dicha situación ha crecido en 15.900 personas durante el último año. Tampoco ha mejorado, por el otro extremo de la balanza demográfica, la situación de los parados de larga duración, es decir, aquellos que llevan más de un año sin empleo. El 42% de los parados se encuentra actualmente en esta situación y en su gran mayoría son adultos de más de 45 años de edad. La nota positiva de ese balance es que el número de hogares que tienen a todos sus miembros en desempleo bajó en 12.900, hasta un total de 977.400 unidades familiares sin ingresos laborales.