CRISIS ENERGÉTICA

La industria española se rebela contra el plan de Bruselas de ahorro de gas

Una decena de patronales industriales piden al Gobierno que se oponga a la intención de la Comisión Europea de imponer reducciones de consumo iguales para todos los países sea cual sea su seguridad de suministro.

Imagen de un gasoducto entre Bulgaria y Grecia

Imagen de un gasoducto entre Bulgaria y Grecia / NIKOLAY DOYCHINOV

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La Comisión Europea ultima su propuesta de plan de acción para blindarse ante un corte de gas procedente de Rusia. Entre las medidas que baraja Bruselas, y que se darán a conocer este miércoles, se contempla un sistema de reducciones obligatorias del consumo de gas iguales para todos los países de la UE, con independencia de su situación de dependencia de gas ruso y las garantías de seguridad de suministro en cada estado.

Una decena de patronales industriales españolas se moviliza contra el sistema de alerta diseñado por Bruselas y han solicitado por carta a la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, que el Gobierno español se “oponga frontalmente” a la medida que prepara la Comisión Europea.

Las patronales Anfac y Sernauto (automoción), AOP (petroleras y refino), Aspapel (papel), Feique (química y farmacia), Fiab (alimentación y bebidas), Oficemen (cemento), Primigea (materias primas minerales) y Unesid (siderurgia) se unen para reclamar al Gobierno que se plante contra el sistema que contempla Bruselas de reducir su consumo de gas en unos porcentajes preestablecidos, un mecanismo que se activaría unilateralmente por la Comisión o por petición de dos estados miembros en caso de emergencia.

Toda Europa está en alerta está en alerta porque se ve como creíble la amenaza de que Rusia dé un paso más y aplique un corte total de suministro de gas a los estados miembros como una nueva medida de presión en pleno choque por la invasión de Ucrania.

Desde el Gobierno y el propio sector energético español se subraya que para España no hay riesgo de seguridad de suministro por baja dependencia del gas ruso y por la diversificación de los países de origen de las importaciones, por el enorme parque de seis plantas regasificadoras en el país (un tercio de la capacidad de regasificación de toda la UE) y por el esfuerzo que se está realizando en España para llenar los almacenes de gas incluso por encima del ritmo que pide Bruselas. Es por eso que la industria española se planta contra el ‘café para todos’ en la imposición de reducciones de consumo de gas en todos los países europeos.

“No tiene sentido imponer reducciones de consumo de gas en todos los países por igual, independientemente de su situación particular y de que el gas no consumido pueda o no ser exportado y consumido por otros países de la Unión”, sostienen las patronales industriales nacionales. “Forzar paradas industriales en países en los que no es necesario, agravará la escasez de productos esenciales en toda Europa y aumentará el impacto económico de la crisis, poniendo en riesgo el funcionamiento de toda la cadena de valor de la economía europea”.

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Frente a la enorme dependencia del gas ruso que tienen algunos países del centro y el norte de Europa, España cuenta con una situación privilegiada por su baja exposición a la compra de gas ruso y por contar con seis plantas regasificadoras en las que se concentra un 34% de la capacidad de regasificación de la UE y un 44% del almacenamiento del gas natural licuado (GNL), el que viene en barco.

 “Los consumidores de gas españoles, domésticos e industriales, vienen financiando desde hace años una gran inversión en infraestructuras de gas, precisamente para reducir el riesgo de dependencia de un solo país suministrador”, subraya la Alianza por la Competitividad de la Industria, que agrupa a las patronales industriales. “Este incremento de costes lo hemos asumido para limitar nuestra exposición a cortes de suministro, siendo incoherente que se pueda decidir por parte de la propia Comisión Europea que paremos nuestras fábricas y se genere gratuitamente una caída de actividad y empleo”.