COMISIÓN EUROPEA

Calviño avanza que la valoración "preliminar" de Bruselas de la reforma laboral es positiva

La vicepresidenta primera espera que en las próximas semanas se ratifique en el Parlamento con un amplio consenso político y urge a terminar con la Europa de "las trincheras"

La ministra española de Economía, Nadia Calviño, charla con la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, durante la reunión en Bruselas

La ministra española de Economía, Nadia Calviño, charla con la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, durante la reunión en Bruselas / EFE/EPA/OLIVIER HOSLET

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La reforma laboral es bien vista por Bruselas, al menos de forma inicial. La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, lanzó este mensaje este lunes después de primer debate de los ministros de economía y finanzas de la Eurozona sobre la reforma del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que fija los límites de déficit y deuda en que pueden incurrir los países de la Eurozona.

Calviño afirmó ante los medios que "la valoración preliminar de la Comisión Europea es positiva" y mostró su esperanza por que la norma se ratifique en las próximas semanas en el Parlamento con un amplio consenso político del que, hasta el momento, carece y se antoja complicado tras la negativa expresa del Partido Popular a refrendarla.

Pese a ello, Calviño desplegó todo un argumentario en Bruselas en defensa de la norma que, según dijo, "no es solo fruto de un amplio acuerdo con los agentes sociales, sino que recoge las recomendaciones que reiteradamente nos han venido haciendo las instituciones internacionales". Públicamente, la normal también recibió el halago del vicepresidente económico de la Comisión, Valdis Dombrovskis, que se refirió a la reforma como "un buen ejemplo de diálogo con los interlocutores sociales".

La reforma laboral es clave para desembolso del siguiente tramo del plan de recuperación, que asciende a 12.000 millones de euros y que está previsto para esta primavera. Por ello, la vicepresidenta de Asuntos Económicos no dejó pasar la oportunidad de reivindicar que España "ha abierto camino" en el despliegue de estos fondos tras convertirse el pasado diciembre en el primer país en recibir un pago condicionado de 10.000 millones a las reformas pactadas.

"El despliegue del plan alcanzará la velocidad de crucero en el año 2022 y estamos avanzando a buen ritmo en el cumplimiento de los hitos y objetivos correspondientes al próximo pago semestral, entre los que sin duda destaca la reforma laboral", afirmó Calviño.

Calviño califica de positiva la valoración de Bruselas de la reforma laboral

Debate constructivo

La ministra hizo también un balance positivo del primer debate sobre la reforma de las reglas fiscales de la Eurozona. “Ha sido un debate constructivo. Todos los países somos conscientes de la necesidad de mirar al futuro, de salir de las viejas trincheras, de las líneas divisorias y los debates del pasado, si queremos afrontar juntos y con éxito la transición verde y digital", dijo, al tiempo que defendió que "no tiene sentido volver a aplicar sin más las reglas prepandemia".

Bruselas decidió suspender las reglas de gasto a raíz de la irrupción de la pandemia, en marzo de 2020, para dar margen de gasto a los gobiernos y evitar la parálisis económica. Con el retorno del crecimiento la idea sobre la mesa es volver a aplicarlas a partir de 2023. De ahí su intención de presentar una guía con orientaciones presupuestarias para el próximo año “en las próximas semanas” y “en los próximos meses” sacar las conclusiones oportunas del debate abierto en el Eurogrupo y presentar propuestas para reformas las reglas.

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“Hemos tenido una buena discusión. Han presentado sus posiciones nacionales y son conscientes de que necesitamos lograr un acuerdo en 2022”, sentenció al término de la reunión el presidente del Eurogrupo, Pascal Donohoe. “Ha sido un debate positivo. Por supuesto que no hemos sacado conclusiones pero veo áreas en las que podemos construir un amplio consenso sobre los objetivos de la revisión”, valoró por su parte el comisario de asuntos económicos, Paolo Gentiloni, partidario de romper con la tónica de los últimos diez años y evitar repetir viejos debates.

Afrontamos una situación nueva. Por el nivel de deuda, que ha aumentado como consecuencia de la pandemia, y nueva por la necesidad enorme de inversiones que apoyen la transición climática”, resumió.