FÚTBOL

AFE abre una grieta con la RFEF de Louzán: rechaza la Supercopa femenina en Arabia

David Aganzo, en su primer día como presidente de pleno derecho tras el proceso electoral del sindicato, marca líneas rojas a la Federación de la que es vicepresidente

David Aganzo es el presidente de AFE.

David Aganzo es el presidente de AFE. / Carlos Lujan

Sergio R. Viñas

Sergio R. Viñas

Este martes, David Aganzo ha sido reelegido como presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) tras ser el único candidato del proceso electoral. Y antes de que termine el día, el dirigente ha querido lanzar sus dos primeros mensajes de rechazo: a los episodios de odio vividos este fin de semana en Primera y Segunda División; y a la posibilidad de que la Supercopa femenina se traslade a Arabia Saudí.

El primero de los pronunciamientos, tras los insultos a Balde en Getafe, a Barrenetxea y Kubo en Mestalla y a Diaby (Elche CF) en El Molinón, entraban dentro de cualquier lógica humana y política. El segundo, en cambio, dibuja la primera grieta entre AFE y la Real Federación Española de Fútbol que preside Rafael Louzán.

Porque Louzán fue quien abrió la puerta a que la Supercopa femenina se sume a la masculina y se dispute en los próximos años en Arabia Saudí. Formaría, de hecho, parte de un mismo acuerdo para que la competición masculina se dispute en la dictadura saudí hasta 2034, alargando cinco años el acuerdo que está actualmente en vigor y que fue negociado por Luis Rubiales, con una generosa comisión para Gerard Piqué como intermediario.

El aviso de Aganzo

Pues bien, resulta que Aganzo es, además de presidente de AFE, vicepresidente de la RFEF. Es decir, parte del equipo de gobierno de un Louzán al que ayudó activamente a ganar las elecciones, persuadiendo a futbolistas para votarle a él en lugar de hacerlo a Salvador Gomar. A las primeras de cambio, Aganzo le ha dejado claro que no va a recibir un cheque en blanco de su sindicato por haberle integrado en la junta directiva de la RFEF.

El presidente de la RFEF, Rafael Louzán, preside este jueves la primera Junta Directiva de la Real Federación Española de Fútbol.

El presidente de la RFEF, Rafael Louzán, con David Aganzo y el resto de su junta directiva. / Chema Moya / EFE

"AFE ha mantenido contactos en los últimos días con futbolistas de diferentes equipos de la Liga F, manifestando su oposición a disputar la Supercopa de España en un país en el que se discrimina a la mujer. La asociación está totalmente en contra de que se dispute la Supercopa de España femenina en Arabia Saudí, y pone a disposición de las futbolistas los medios legales para defender su no presencia llegado el caso", defiende AFE en un contundente comunicado.

El "respeto a la mujer"

"Justificar la disputa de la Supercopa de España femenina en Arabia Saudí por meras cuestiones económicas no nos parece aceptable bajo ningún concepto, por encima de todo deben imperar otros aspectos, empezando por el respeto a la mujer", prosigue la institución que preside Aganzo, que aprovecha para "condenar" el acoso a las mujeres de futbolistas del Mallorca y aficionados del club balear en la reciente disputa de la Supercopa masculina.

Una contundencia ante unos actos "vergonzosos y denigrantes" que contrasta con la tibieza de la RFEF. Louzán, tras siete días desde aquellos hechos se limitó a disculparse: "Pedimos disculpas y lamentamos que sufrieran esos momentos difíciles".