LILLE 1 - 0 REAL MADRID

Las estrellas del Real Madrid se borran tras la derrota: Lunin, Fran García y Endrick dan la cara en Champions

El ucraniano, tras su primera titularidad del año, y los dos jugadores secundarios, suplieron a Modric o Carvajal en las comparecencias posteriores al tropiezo en Lille

Kylian Mbappé y Dani Carvajal, jugadores del Real Madrid, durante la primera derrota en 37 partidos del equipo blanco.

Kylian Mbappé y Dani Carvajal, jugadores del Real Madrid, durante la primera derrota en 37 partidos del equipo blanco. / Associated Press/LaPresse

Denís Iglesias

Denís Iglesias

La situación es la siguiente: el Real Madrid, vigente campeón de Champions, pierde en Lille. Primera derrota en 37 partidos. Juego deficiente y sensaciones que suponen un paso atrás que viene desde el derbi madrileño. El momento ideal para que los capitanes o los pesos pesados del equipo cierren filas e impidan las 'minicrisis' que generan cada derrota de los blancos. Así lo habría hecho Sergio Ramos, quien asumía la portavocía en los malos momentos. Lo mismo hizo Oblak después de la goleada ante el Benfica. ¿Quién dio la cara en Francia? Lunin, Fran García y Endrick, tres suplentes que hicieron de Carvajal, Modric o Mbappé.

Carvajal pagó las prisas con un miembro del Lille

En el primer revés, los capitanes se borraron, tanto en el campo como fuera de él, cuando su equipo más lo necesitaba. Carvajal cuajó un partido discreto. Se le vieron las costuras frente a un atacante móvil como Jonathan David que descubrió la falta de contundencia defensiva del Real Madrid. Como al resto de sus compañeros, al de Leganés le entraron las prisas en búsqueda de otra épica remontada que esta vez no llegó.

Pagó su frustración con Mario Sandúa, preparador físico español del Lille al que la retransmisión confundió con un recogepelotas. Le empujó para arrebatarle el balón y sacar de banda lo antes posible. Tan mal en la ejecución del lanzamiento como en el resultado. Modric no suele practicar el escapismo. Sería ilógico para un jugador de 39 años que ha tenido a sus espaldas la carga de todo un país como Croacia. Después de la eliminación en fase de grupos de la Eurocopa dio la cara, con lágrimas en los ojos y un MVP que no valía de nada.

Tampoco estuvo en la zona mixta del Estadio Pierre-Mauroy donde no fue la solución. La cantidad que ha aportado al fútbol nunca será proporcional a la gasolina que le queda a un jugador destinado a ser una solución para partidos de perfil bajo. Un rol que le costó asumir, pero que ha cambiado en un Real Madrid sin fútbol y carente de Kroos, para el que el único sustituto aproximado es su viejo camarada.

Mbappé no fue la solución en su regreso a Francia

A partir de ahí, una constelación de estrellas que surcan cada uno por su cuenta el cielo de la Champions. A pesar del perfil y del contexto en Francia, exigir a Mbappé el liderazgo después de su primer gran tropiezo en el Real Madrid no sería lo más ajustado a los hechos. El francés salió en la segunda mitad para arreglar la angustia de su equipo y no fue capaz de rematar a puerta.

Ni siquiera tuvo la foto soñada con su hermano Ethan, lesionado en el Lille. A Vinicius tampoco le concederán una portavocía, porque el reguero de controversia que le rodea. Cuando habla, lo hace de sí mismo mejor que del resto. El tercer capitán, Lucas Vázquez, ni siquiera jugó y el cuarto, Valverde, prefiere hablar en el campo.

Por una o por otra razón, Lunin, Fran García y Endrick acabaron dando la cara por el Real Madrid tras el fracaso. De todos ellos, el ucraniano, en su primera titularidad, fue el que ejerció un mayor liderazgo. No puto atajar una pena máxima perfectamente ejecutada por Jonathan David, pero antes evitó otro gol del Lille con una gran doble atajada. Cuando juega, Courtois es otro candidato a ser portavoz de una institución en la que lleva siete temporadas. Pero esta vez fue Lunin, el más autocrítico, junto a Ancelotti, sobre lo sucedido en Francia.

Endrick, en su primera titularidad en Champions con el Real Madrid, lucha por un balón con Alexsandro, del Lille.

Endrick, en su primera titularidad en Champions con el Real Madrid, lucha por un balón con Alexsandro, del Lille. / DPA vía Europa Press

Solo Lunin fue autocrítico con el rendimiento del equipo

"Faltó agresividad, creatividad y luchar más. En la segunda parte tuvimos más ganas, en la primera fue peor. Siempre queremos ganar, porque sabemos qué colores defendemos. No pasa nada, hay que seguir trabajando y preparar el siguiente partido", explicó el ucraniano. Para Ancelotti, la sensación con la que se fue el Real Madrid de la segunda jornada de Champions es de "tristeza". Falló, como viene siendo habitual esta temporada, el entusiasmo y "las sensaciones".

Fran García fue el primer cambio de Carletto. Entró al inicio de la segunda parte para sustituir a Mendy y darle más bagaje ofensivo. En plena lucha por esta demarcación, el canterano del Real Madrid quiso ser más positivo. “Las oportunidades las hemos tenido, pero cuando no quiere entrar es complicado, hay que seguir intentándolo y con el trabajo que hemos hecho hasta ahora”, se conformaba el de Bolaños de Calatrava. Por su parte, Endrick se quedó en el terreno personal de su primera titularidad con la que batió otro récord de precocidad al ser el titular más joven en Champions del Real Madrid: "Ha sido increíble".

El conjunto blanco no actuó como un equipo ni dentro ni fuera del césped. Cada jugador hizo la guerra por su cuenta en Lille. Algunas tan innecesarias como infructuosas. Para muestra, la tángana en la última acción de peligro de la que dispuso el Real Madrid. Un lanzamiento a balón parado que fue repelido por la defensa del equipo galo previo enfrentamiento entre Diakité y Rüdiger. El primero se mofó del segundo, quien se jugó la expulsión en varias ocasiones, tras mantenerle la mirada en el colofón que representa la actitud de un equipo bañado en oro, pero carente, hasta el momento, de alma.